Embarazado de un arquero.

Capitulo 19.

Juan estaba manejando su carreta para avanzar hacia su hogar intentando olvidar a un perro callejero detras de el, Robin estaba mirando como el contrario manejaba atentamente, cosa que incomodaba bastante al chico rubio y esto dejaba un ambiente muy incomodo, ellos dos no se hablaban desde hace muchos años nisiquiera teniendo algun tipo de contacto de ambos y ahora que estaban viajando juntos, después de tantos años de que tendrian que conversar.

La pesada tension estaba agobiando al chico rubio al punto de querer tirar al chico naranjo por ahi para sentirse mejor, este miraba de reojo al chico naranjo sintiendose poco seguro y mucho más incómodo con el contrario mirandolo de forma tan atenta.

--..Y..Como esta Scarlett?-- El Alfa hablo rompiendo el silencio que gerenaba la tension en ese momento, esto hizo que el Omega diera un pequeño grito de sorpresa.

--..Esta bien...supongo no hablamos mucho..-- El Omega no quería conversar con él aquello era peor que mantener la tensión silenciosa, tener una conversación con el chico naranjo hacia que en su boca sintiera un sabor ácido y mareos en su estómago.

-- Eso me alegra...La extraño mucho sabes, también a mi tia y a sus pasteles...-- El Alfa rio un poco al recordar a su familia, algo dentro de él se emocionaba en pensar que iba a volver a verlas.

El chico rubio dejó de hablar ignorando el recuerdo del chico naranjo, solo rogaba llegar a su castillo y ver a su pequeñito que seguro lo recibiría con amor, eso quería pensar después de todo lo que le paso en este asqueroso viaje, el chico naranjo seguía hablando de su prima y tia en eso recordó a Marian y a sus antiguos amigos, claro sabía que no volvería a ver, a este punto nisiquiera recordaba sus nombres pero si recordaba a Marian.

--..Como esta Marian?..-- El Alfa miro al Omega esperando una respuesta de el, se preguntaba si seguía viéndose tan bonita como en aquellos días y si seguia practicando magia.

-- Esta bien y sabes que podrías hacer en vez de hablar?, Quedarnos en silencio por todo el viaje bien!?-- El Omega callo de una vez al Alfa no soportando más la conversación.

Esto hizo que el chico narajo hiciera caso notando el estado en el que estaba el chico rubio, solo se acostó en la madera de la carreta y intento dormir un poco, esta madera era más cómoda que la de su casa y no huele a excremento de ratón.

Pasando las horas más insufribles del chico rubio llegó a su castillo a salvo pero no sano pues tenía plagas con el, un pequeño niño quien miraba desde la parte alta de la torre la entrada del castillo observando con emoción que había llegado su madre tan pronto, corrió lo más rápido que pudo a la salida pasando por pasillos del castillo y chocando con algún mueble.

Juan bajo de la carreta ya dentro de su castillo siendo recibido por sus sirvientes, miro como su hijo llegó corriendo a abrazarlo con fuerza y amor.

-- Ma..Pa,Papi!! Ya volviste!!-- El pequeño miro su madre con cariño y el Omega levanto a este para abrazalo con un cariño maternal que hizo sentir al menor cómodo y seguro.

El chico naranjo había despertado cuando habían apenas entrado al castillo, solo que se había quedado en la misma posición para seguir cómodo solo que se levantó apenas escucho un papi de una voz infantil, sintió su sangre helarse por un momento se asomo por la carreta al ver a Juan abrazarse con un pequeño niño quien parecía estar cómodo en los brazos del chico rubio.

El pequeño miro hacia la carreta al ver que alguien se había asomado de esta, observo a un hombre bastante sucio y que olía raro con quien tuvo contacto visual por unos segundos hasta que el hombre se tiro para atrás asustado.

-- Papi que es el??, Porque esta sucio y huele feo??-- El menor le pregunto a su mamá quien miro la carreta observando que el chico naranjo se había escondido.

Sintió enojo al ver que este se escondía de su propio hijo pero no se molestaría por una tontería de el.

-- No es nadie solo un vagabundo cariño, no lo mires te puede enfermar, porfavor denle un baño al vagabundo y cuidado no sabemos si puede morder...-- El Omega camino a hacia otro lado mientras seguía cargando a su hijo.

El chico naranjo miro algo molesto al chico rubio por su comentario y aún seguía nervioso por el niño, no había pensando en el desde que supo de su existencia y pensó que el contrario se había desechó de su embarazo cuando se fue, este fue obligado a bajarse de la carreta por los sirvientes, por suerte no podían reconocerlo por el olor a beta que el tenía y lo sucio de su apariencia.

Estos llevaron al chico naranjo a una tina de madera en una parte del castillo, lo dejaron solo con eso y algunas cubetas de agua caliente, pensó que le estaban dando un lujo pues solo los nobles se podían bañar en tina y con agua caliente claro que no desaprovecharia nada de esto ahora.

Juan camino por los pasillos del castillo con su hijo mientras este le hablaba sobre lo que paso mientras el no estaba.

--Y entonces el ladrón no te hizo nada?-- El Omega miro con preocupación al menor sobre lo que decía, pensó que como demonios dejaron a su hijo solo mientras el no estaba.

-- Si!..Porque el no era malo y me devolvió mi libro!! Después yo salí del castillo solo-..--El menor fue interrumpido quien por su madre quien a este punto parecía bastante molesto.

Juan penso que como pudo dejar Marian que su hijo estuviera sin alguna proteccion y dejando que se fuera solo afuera del castillo, el chico rubio sintió como la ira se acumulaba dentro de el, dejo al menor con un sirviente para que lo llevara a su habitación mientras este se fue a hablar con Marian por sus acciones.

Marian camino hacia la habitación donde guardaban las tinas para poder darse un baño, después de lo sucedido con el menor pensaba que merecía un relajo después de estar cuidando a un niño bastardo.

Esta apenas entro al lugar observo a un hombre desnudo de cabello naranjo que apenas sintió la presencia de la chica castaña se escondió en la tina en donde se aseaba este ocultando la mayoria de su cuerpo descubierto, la chica castaña al sentir el aroma natural que emanaba de el contrario sintió una escalofrío de varias emociones al mismo tiempo pero en ella se encontraban más sentimientos alegres.

-- Robin??..Enserió eres tu!?-- La Omega miro con emoción al Alfa que intentaba aún esconderse en la tina.

-- Marian..Un gusto volver a verla bella dama-- El Alfa sonrió con dulzura al ver de nuevo a su antigua amiga y también antigua amante.

La chica castaña no lo creía, su amado por fin había regresado por ella la espera no fue en vano, por fin volvería a tener a su pareja para hacer la vida que tuvo que ser, eso según pensaba ella en su mente Robin se reconciliaria con ella y le pediría que se casasen, luego tendrían muchos cachorros juntos, seria la fantasía que guardo años en su corazón.

-- Continuará--