18. Te quiero todo el tiempo

1.8K 257 16
                                    

Después de esa tarde que pasaron juntos entre risas y besos, volvieron a la casa de Yuuji. En el camino se detuvieron a comprar pizza, pues el peli rosa planeaba que se quedaran en el sillón de la sala a ver películas. 

Yuuji poder sentir las famosas mariposas en su estómago, además de sentirse como un tonto enamorado. No quería alejarse de Toji por ningún motivo.

Toji estaba sentado en el sillón observando como Yuuji bajaba por las escaleras vistiendo un short que mostraba sus sensuales piernas y se ajustaba en su trasero. También llevaba una de sus camisetas negras, la cual le quedaba bastante grande a Yuuji dándole un aspecto tierno.

El hombre no dejaba de mirar esas bronceadas piernas, que tanto le gustaban. 

Yuuji se acercó trayendo consigo las cajas de pizza, para que ambos pudieran disfrutarla. Se sentó en el sillón al lado de Toji y depositó en la mejilla del hombre un pequeño beso. 

Toji le guiño un ojo y abrió las cajas, tomando su primer trozo. Yuuji lo siguió y se dispuso a agarrar un trozo de su pizza favorita, una cuatro estaciones.

Por el contrario, Toji disfrutaba de una pizza napolitana.

Una sonrisa traviesa se formó en el rostro del mayor, causando que su cicatriz se estirara. Le causaba gracia ver a Yuuji batallar con el queso del trozo de pizza que con ansias devoraba.

—Eres un goloso chico,—  Le menciono, mientras que una risa baja se escuchaba por parte del hombre, causando que Yuuji se avergonzara y dejará de jalar el queso que se desprendía de su trozo.

—Pero no te preocupes, me gusta que seas goloso... sobre todo cuando te atragantas con mi polla y lo haces con tantas ganas. — Toji le guiño un ojo.

Yuuji se atraganto con su comida y se levantó para ir por un vaso de agua, sin antes darle un golpe en las costillas, mientras le gritaba;

—¿Porque tienes que arruinar nuestra comida?, — Le reprocho. Sus mejillas lucían muy sonrojadas y su ceño estaba fruncido.

Toji puso los ojos en blanco y se dispuso a terminar su pizza. 

  ━━━━


Más tarde tras comer y ver una película, ambos se encontraban cansados, por lo que se dispusieron a ordenar e irse a la habitación de Yuuji. El chico se sentó en la cama mientras revisaba su celular, mientras que Toji había ido al baño para tomar una ducha y así poder refrescarse.

Sonrió al ver mensajes de sus amigos preocupados y dándole las condolencias por la muerte de su abuelo, además de recordarle que lo querian y que estarían siempre para el.

Dejó su celular en el bolsillo de su short y se puso de pie. Agarró el peluche que Toji había ganado en aquel juego y lo abrazo con cariño .

No podía olvidar cómo el hombre había ganado un premio para él con tanta facilidad, sorprendiéndolo.

Sujeto el peluche que yacía en sus brazos con mayor fuerza y comenzó a moverse en su habitación. Su cuerpo se movía generando un baile lento, mientras cantaba una canción que le gustaba mucho, la cuala solía recordarle al mayor. Tras haberlo conocido, la letra de aquella canción no dejaba su mente y solía ganarse las burlas de Nobara constantemente, diciéndole que era demasiado cursi y que le generaba náuseas.

Por supuesto que eran bromas, Nobara siempre se preocupaba por él. Una risa bajita abandonó sus labios y se dispuso a seguir bailando mientras tarareaba, sin percatarse de que era observado.

Tras tomar una ducha fría y refrescarse, pues el calor era una mierda. Toji se colocó un pantalón de dormir y seco su cabello con una toalla. Salió del baño y se detuvo al escuchar la voz de Yuuji, se acercó lentamente y sonrió al observar que el chico tarareaba una canción, mientras mecía sus caderas lentamente, bailando.

En sus brazos llevaba el raro peluche que escogió en esa feria. 

—¿No prefieres bailar conmigo?, —el hombre lo observaba fascinado. Tenía una sonrisa en su rostro y su expresión era bastante relajada.

Yuuji se detuvo y se volteo para ver a Toji, el cual lucía bastante relajado de brazos cruzados apoyado en el marco de la puerta de su habitación. Solo llevaba unos pantalones de dormir negros, los cuales colgaban de sus caderas, dándole una gloriosa vista de la "zona v" de sus marcados abdominales, causando que Yuuji se sonrojara y un cosquilleo de excitación se formara en su vientre.

—Mierda, —Murmuro bajito y procedió a morder su labio.

Toji se acercó y le quitó el peluche arrojándolo al suelo. Lo sujeto de las caderas y lo atrajo hasta su cuerpo. Sus manos acariciaron con lentitud su cadera, viajando por su espalda y deteniéndose en su cintura para apretarla.

Podía sentir los labios del hombre rozar su cuello y repartir pequeños besos, sacándole un gemido.

—Hace bastante tiempo que no bailamos, — Le susurro Toji mientras besaba su cuello y mordía el lóbulo de su oreja.

— D-deberíamos intentarlo, — Suspiro y se alejó un poco del hombre. Un puchero se formó en su boca, pues Toji siempre lo provocaba y jugaba con el. Pero no podía negar que le encantaban esos juegos, los cuales siempre estaban acompañados de besos y caricias que lo volvían loco, además de sacarle uno que otro gemido.

Saco su celular del bolsillo y colocó la canción que anteriormente estaba cantando. Lanzó con cuidado el dispositivo hacia su cama y se aproximo a Toji, para rodear con sus brazos el cuello del hombre.

(Les sugiero que en esta parte escuchen la canción  Dreaming of you de cigarettes after sex♡)


Toji sonrió y sujetó la cintura del chico. Se movieron lentamente al comenzar la canción y cuando el cantante comenzó con la letra, acercaron sus cuerpos, ya que querían sentirse uno al otro.

Estableciendo un baile lento en pareja, ambos bailaban lentamente al ritmo de la canción que sonaba de fondo, creando un ambiente totalmente romántico.

Yuuji acariciaba la nuca del mayor y jugaba con su cabello. En su rostro se plasmó una sonrisa y sus ojos de color miel parecían brillar, sentía los latidos de su corazón acelerados, puesto que nunca había bailado de esta manera con nadie.

Toji no lo soltaba. Disfrutando del calor de su cuerpo, mientras que tenía apoyado su mentón en el hombro de Yuuji, inhalando el olor frutal que desprendía su cabello rosa.

Cuando la canción terminó, Toji lo sujeto del trasero y lo subió hasta sus caderas para besarlo.

El peli rosa rodeo las caderas del mayor y se dejó llevar por el apasionado beso de Toji, saboreando el sabor mentolado de su boca y mordiendo sus labios.

Luego de unos minutos se separaron para coger aire y se miraron. Yuuji beso la cicatriz de la boca del hombre.

Te quiero todo el tiempo,— le susurro y rozo sus labios con los de Toji. Podía sentir su corazón totalmente acelerado, además de las manos de Toji que apretaban y acariciaban su trasero.

Toji le sonrió y beso su frente. 

Un brillo peligroso se formó en los ojos del hombre y se acercó a la cama para arrojar a Yuuji, causando que el chico chillara.

Apago la luz de la habitación y sin perder más tiempo cayó encima del chico, depositando besos por todo su bonito rostro, mientras escuchaba las quejas y la risa de Yuuji, el menor le reclamaba de que lo estaba aplastando.

Detuvo su juego y se recostó al lado de Yuuji. Lo abrazo acurrucándolo en su pecho, bostezando en el proceso.

Yuuji sonrió y abrazó a Toji, disfrutando de su cercanía. Sus ojos se cerraron, debido a que el sueño invadía su cuerpo.

No quería que sus días en su ciudad natal junto a Toji se terminaran, pero mañana sería el último día para permanecer en la casa que solía compartir con su abuelo, pues el cuerpo cremado del anciano le sería entregado y por fin podría despedirse de él.



I Know What You Want | TojiItaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora