Capítulo 26🦋

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Tu risa es una canción mágica que cura todas mis heridas, y me transporta al paraíso-- ☉🌙

La verdad es que yo estaba en las nubes, me había olvidado del consejo de Josh para visitar a su amiga psicóloga como también me había olvidado de mi teléfono en casa y tuve que pedirle a Estelle que mandara a alguien por él, la semana había pasado normal con odio en sus ojos y yo molestando de vez en cuando, aveces me sacaba de quicio pero había ocasiones en las que yo quería darle todo, construir un gran castillo y hacerla mi reina, momentos en las que me sentía pequeña delante de ella y me ponía nerviosa, afortunadamente mi cara de poquer me ayudaba, casi nunca se me notaba o podría decirse que no.
Lizzita entró a mi oficina sin tocar la puerta.

--¡HOLA!

--Sonreí-- Que hermoso verte, linda.

--Lo sé, te extrañé y bueno estuve por ahí cerca y aquí me tienes aún más cerca y esperando un abrazo-- mi sonrisa se ensanchó y fuí a abrazarla.

--Te extrañé-- exclamé al alejarme.

--Llevamos-- observó el reloj en la pared y con la cabeza me indicó que la viera-- 10 horas sin vernos.

--Lo sé, es una abominación-- fuí a sentarme y ella hizo lo mismo.

--¿Todo va bien por aquí? No ví a Estelle cuándo entré. Dime qué no la has despedido.

--No-- exclamé soltando una risita antes-- Aún no.

-- No seas así, ki. Ella me agrada.

--Tranquila, cariño la única que puede despedirla es mi mamá.

--Es un alivio.

--¿Salimos ésta noche?

--No, tengo cita con mi novio.

Rodé los ojos.

--¿Estás celosa de él?

--Te dije innumerables veces que no, uffff. Es que no te merece.

--Ki.

--Ajá.

--Kiara si te dieras la oportunidad de conocerlo lo querrías.

--No apuestes por ello. Mi plan con Arth, está en pausa pero ya verás.

Alguien tocó la puerta y entró después.

--Señorita, su teléfono--vió a Lizzy la saludó inclinándo la cabeza--Hola, señorita Ferrer.

--Estelle, es Lizzie. Ya hablamos de eso ¿Y porqué llamas a Kiara así?

Estelle me miró con desprecio y yo solté una risita.

--Profesionalismo.

--La señorita aquí, ha marcado una pauta entre nosotros, lamentablemente ella es mi jefa y ...

--Necesitas el trabajo.

--Ay por dios, Kiara Michier-- miró a Estelle-- Puedes trabajar conmigo si ya no aguantas a ésta rasca bolas-- la secretaria sonrió.

Estelle y yo nos miramos por un largo rato, queria saber que respondería y al parecer ella buscaba la respuesta en mis ojos.

--Aún puedo soportarla.

--Casi había soltado un suspiro de alivio, en cambio sonreí pícaramente-- No puede vivir sin mí-- ella me asesinó con los ojos haciendo que Lizzy soltara una risita.

--Son increíbles.

Estelle dejó mi teléfono de mala gana sobre mi mesa y salió, yo observé como se iba atentamente.

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