Capitulo 11 "Flor Sin Luz"

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Cuando era pequeña, tan solo una niña, nunca se me permitio salir al esterior, vivia encerrada en mi habitacion, y la unica forma de ver la luz solar, era por la estrecha ventana que tenia.

Las unicas veces que podia salir de ese pequeño cubo que me tenia aprisionada, era con compañia. Pero aun asi, solo se me permitia estar dentro del templo. Una vez decidi salir de mi habitacion sin compañia, pero poco tardaron en encontrarme y me devolvieron a mi habitacion.

Por intentar fugarme no pude salir de mi habitacion por 2 meses consecutivos, el mayor tiempo que alguna vez estuve en ese condenado lugar. Fue ahi, que en mi aburrimiento, descubri las historias de heroes.

Fue en ese momento que yo desee que algun heroe llegara y me liberara de mi prision. Al final, la realidad fue mas decepcionante de lo que me imagine, pues ese heroe nunca aparecio.

Pero si lo que podria ser el equivalente a uno, un dia como cualquier otro, un dios acompañado de su Familia se presento ante nosotros.

Fue con ellos, que por fin pude conocer la libertad, aunque sea solo durante unas horas, yo podia salir de esa estupida habitacion sin compañia de los guardias l cualquier otro sirviente.

La Familia Takemikazuchi me enseño lo que es la libertad, y cuando tuve una sola probadita de lo que eso era. Desee mas.

Casi diariamente, durante todas las noches, cuando nadie veia, ellos me ayudaban a escapar, y pude sentir la brisa del viento. Podia correr por el campo con la unica limitacion de cansarme.

Veia la luna como si fuera la cosa mas bella del mundo, me encantaba, y me encantaria aun mas ver y poder sentir la luz del sol. Lastima que no duro mucho....

¿Te preguntaras porque cuento todo esto? La vedad, no lo se muy bien, a veces siemplente repaso la historia de mi vida pensando que hice mal, pensando en que falle para terminar donde estoy.

Aqui, igual o mas emcerrada que antes, trabajando como prostituta en los exuberantes burdeles del Barrio del Placer en Orario.

Mi padre, ese viejo verde que nunca me vio con cariño si no con desprecio. Ese arrogante aristocrata que preferia pasar el tiempo con sus concubinas que en vez de su propia hija.

El me dijo que fue mi culpa, que yo deshonre a la Familia, que yo comi esa ofrenda. Ni siquiera quiso escuchar la version de mi historia, sin si quiera cuestionar, hizo caso al falso acusador.

Todo por ese hombre que me encerro, e hizo de cuenta que yo no existia.

Y gracias a eso y varios inconvenientes mas, termine aqui, una aristocrata desheredada y trabajando como prostituta.

La flor que necesitaba la luz del sol para florecer, nunca florecio. Tal vez en algun momento pude ser una gran y justa lider, pude formar una Familia. Pero todo eso ya es solo un sueño.

Ahora, solo me encuentro pagando el castigo de mi mayor pecado: Nacer.

Ahora, lo unico que puedo hacer, es esperar que alguien, no importa quien, no importa como, me muestre la luz del sol.

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¿Cuantoa años habian pasado? Mikoto lo recordaba del todo bien. En aquel tiempo en el que ella era tan solo una niña sin muchas preocupaciones mas que salir a jugar con sus amigos.

En aquel entonces, ella podria decir que la vida era mejor, no porque viviera con mas lujos, y tuviera lo mejor que te podia ofrecer la vida. Lo era porque ignoraba lo peor que esta te podia ofrecer.

Ignoraba la angustia y soledad que Haruhime solia pasar antes que ella llegara. Aquella timida pero energica niña a la que ayudaba a escabullirse de su padre.

Danmachi: Heroe MalditoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora