Esᴛᴏ ᴇs ᴀᴍᴏʀ..? /𝑺𝒂𝒊𝒐𝒖𝒎𝒂/

Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 18 🥀

Al llegar la noche, Saihara retiro el vibrador de la entrada de Kokichi, el petite solo soltó un suspiro de alivio y murmuró un "G-gracias" Saihara lo tomo de la mano y lo llevo a su habitación, ahí lo acostó y lo arropó hasta el pecho y le dio un beso en la frente

Saihara: Descansa, amor~

Kokichi: Descansa..

Apago la lámpara de la habitación y salió de esta, cerrando la puerta tras suyo, Kokichi solo se acomodo en la cama intentando conciliar el sueño, hasta que en 1 hora pudo hacerlo

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En la mañana Saihara salió apresuradamente de la casa, le dió un beso a Kokichi y cerró la puerta con llave, Kokichi fue hacia la cocina para hacer su desayuno, al final se hizo unas tostadas con mermelada y subió a su habitación, busco ropa para ponerse y se puso uno de los vestidos que Saihara le había dado, se sentó en la cama y se quedó mirando la habitación por un rato, mientras pensaba en sus amigos... Realmente los extrañaba, quería salir de ahí.. no le gustaba ese lugar..

Sin que el se diera cuenta empezó a soltar algunas lágrimas, en serio ese lugar era demasiado horrible... Quería ver a sus amigos, a sus padres, a Amami...

Se quedó algunas horas llorando hasta que se hicieron las 2:00 pm, Saihara llegaría pronto.. Fue hacía la cocina para empezar a preparar la comida; estaba cortando unas zanahorias hasta que simplemente paro, se quedó viendo el cuchillo un buen rato y se subió la manga del vestido, no sabía por que hacia eso, es como si algo le dijera que así se sentiría mucho mejor

Sin pensarlo mucho, posicionó el cuchillo en su brazo eh hizo un corte en este; el dolor era demasiado, pero extrañamente se sentía mejor, como si esa fuera una forma de desahogarse

Hizo otro corte, eran 2

Hizo otros cortes, eran 6

Hizo otros cortes, eran 15

Hizo otros cortes, eran 20

Estaba empezando a soltar lágrimas por el dolor que sentía, pero no quería parar, se estaba sintiendo mucho mejor ahora. Hasta que escuchó el sonido de la puerta abriéndose y pudo ver a Saihara entrando en la casa

Saihara: ¡Buenas t- ....

Kokichi: ...

Kokichi miro horrorizado a Saihara y empezó a temblar considerablemente, tenía mucho miedo, no quería que Saihara volviera a castigarlo

Saihara fue con pasos apresurados a dónde estaba Kokichi y le arrebató el cuchillo, lo dejo a un lado y tomo gentilmente su brazo, viendo las cortadas que el menor se había hecho no hace mucho

Saihara: ¿Por qué hiciste eso..?

Kokichi: –Snif– E-es que.. –Solloza–

Saihara lo cargo gentilmente y fue hacia su cuarto, abrió la puerta de este y fue presuroso a su cama, acostó gentilmente a Kokichi y fue al baño por el botiquín, cuando salió pudo ver qué la sangre de Kokichi estaba manchando las sábanas, así que presuroso fue hacia el y abrió el botiquín, sacando unos algodones, agua oxigenada y vendas

Saihara: ¿Te vas a poner bien, si? Pero dolerá un poco

Kokichi: ¿V-va a... –Solloza– doler m-mucho..?

Saihara: Solo un poco, toma mi mano, ¿si? –Toma la mano de Kokichi– ¿Listo?

Kokichi solo asintió mientras tomaba la mano de Saihara, el antes mencionado tomo un algodón y le puso un poco de agua oxigenada, acerco el algodón a la piel de Kokichi y cuando comenzó a limpiar la piel del pequeño, sintió como su mano era fuertemente apretada y escucho un pequeño grito de dolor y seguidamente unos sollozos

Kokichi: D-duele.. –Solloza– duele m-mucho..

Saihara: Lo sé, cielo, pero tengo que limpiarlas –Siguió limpiando con mucho cuidado las cortadas del menor– te prometo que después va a dejar de doler

Unos minutos después termino de limpiar todas las heridas del menor, tomo un par de vendas y empezó a vendar el brazo del menor, pero escucho un quejido de este y paro

Saihara: Lo siento.. ¿apreté demasiado fuerte?

Kokichi: N-no.. así está bien..

Saihara: No lo entiendo, Kichi... ¿por qué lo hiciste?

El de piel pálida solo se quedó callado un momento y empezó a soltar algunos sollozos, cuando Saihara terminó de vendar su brazo este lo abrazo

Kokichi: L-lo siento, S-shumai...

Saihara: No tienes por qué disculparte, Kichi

Kokichi: ¿E-en serío? ¿no c-crees que soy un i-inutil...?

Saihara: Jamás pensaría eso..

Ambos se acostaron en la cama del mayor, Kokichi se acurrucó en el pecho de Saihara y soltó una pequeña risita, el de cabellos oscuros sonrío y después de unos momentos se durmió

"Tal vez.. No es tan malo como pensaba"

Pensó Kokichi antes de caer dormido