Mi Obsesión_Husk Obsesionado X Lectora_Temporada 2

Secuestro Y Revelación.

Tn había salido del edificio en el que se ubicaba el club de Mimzy por la puerta de atrás.

Alastor la estaba esperando al lado de la misma.

Tn: Hola Al- Alastor.

Alastor: Hola cariño. Ya te dije que puedes confiar en mí.

Tn: Sigo sin creerlo.

Alastor: Bueno. Cambiando de tema: según mi sombra, ¡fué un magnífico espectáculo el que diste cantando allí dentro!

Tn: Gracias.

Alastor: De nada, querida.

Le extendió el brazo.

Tn: Hoy no necesito que me acompañes a mi hogar.

Alastor: ¿Estás segura Tn? ¿Después de lo de las cartas y la confesión de que tu acosador te secuestraría para que, según él: "Podrían finalmente estar juntos sin que nadie los separa-

Lo interrumpió la demonio hámster estallando en una gran seguridad de lo que diría.

Tn: Sí. Estoy segura, Alastor.
Ten buena noche y cuidado.

Alastor: De acuerdo. Lo que la dama diga.

Tomó su mano y le besó el dorso.

Alastor: Lo mismo digo, Tn querida.

El demonio ciervo ya había comenzado a caminar en dirección contraria a la de Tn mientras tarareaba una canción de los años 20's.

Cuando finalmente Tn se encontraba sola en mitad de la noche, empezó a caminar por donde debía ir rumbo a su departamento, que por cierto se encontraba a unos veinti-siete kilómetros de distancia de Ciudad Pentagrama, exactamente en Ciudad IMP.

Resumiendo todo, ella ya había caminado trece kilómetros en total, le faltaba mucho todavía para llegar a su hogar, unos demonios quisieron violarla pero no pudieron porque alguien la salvó.

Se durmió en los brazos de su salvador.

Cuando despertó, notó que tenía los ojos vendados, tenía la cola libre y estaba atada de pies y manos a, al parecer, una cama.

Entró en pánico.

Esto no podía estar pasando.

Olfateó el aire:
Sentía un leve olor a humedad, un fuerte aroma a pegamento y un rastro a... ¡¿SU PERFUME?!

Esto debía ser una pesadilla.

Sí.

Una pesadilla de la que ella despertaría en cualquier momento.

Lo estuvo intentando por aproximadamente cinco minutos seguidos, pero nada.

Escuchó la puerta abrirse suavemente.

Tn empezó a llorar.

Su secuestrador se acercó a ella, le quitó lo que la estaba atando a la cama, le quitó la venda de los ojos y le limpió las lágrimas.

Tn no podía creerlo.

Tn: ¡¡¿¿HUSK??!!

Husk: Hola, mi amada Tn.
Supongo que ya sabes que soy tu "Acosador".
Pero prefiero que me pongas un apodo cariñoso o que me digas "Mi Amado Admirador Secreto".

Tn sólo empezó a gritar.

Pero no pudo hacerlo más a causa de que Husk le había inyectado un tranquilizante con el que ella se durmió al instante.

Husk: Espero que seas feliz conmigo, Tn.
Muy feliz.
Para siempre.