୭̥⋆*Tannie ୭̥⋆*

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–¡Hicimos cinco cuadras, nos faltan cinco más, ya no podemos volver a casa!

En ese instante recuerda el lavadero de autos ubicado en la siguiente esquina, el que frecuentan sus padres, también recuerda a su dueño y así inmediatamente se gira para caminar casi a trote hasta allí. Al llegar, ve al joven subiendo a una ambulancia y justo antes de que él cierre la puerta le pregunta presuroso pero con amabilidad.

–¡Disculpe, señorito Hoseok! ¿Por favor puede acercarme hasta la casa de mi primo? Es su cumpleaños y debo llevar este Tiramisú pero se me está derritiendo ¡por favor, es una emergencia!

Gracias a lo tierno que se ve Taehyung y luego de escuchar la dirección del lugar, el chico decide llevarlo en ese vehículo ya que la casa le queda de paso al hospital, donde debe entregar dicha ambulancia en las condiciones que fue solicitada.

Van charlando tranquilamente, circulando por una calle de ripio pero apenas avanzan dos cuadras cuando de repente sienten un golpe en el frente, Hoseokse baja a mirar que sucede y descubre una rueda pinchada. Él no sabe mucho de neumáticos, así que sin dudas llama al mecánico solicitando su ayuda y este le comunica que se tardará unos quince minutos en llegar. Taehyung no tiene opción más que esperar, pero vuelve a desesperarse cuando siente más gotas de crema entre sus dedos y una idea arrebatadora le surge con la rapidez de decir puff.

–¿Puedes prender el aire acondicionado para que mi Tiramisú pare de derretirse y llegue salvo a la fiesta? ¡O se convertirá en sopa!

El joven ríe encantado por su ocurrencia y lo acciona, luego busca pañuelitos descartables en la guantera para limpiar las gotitas de crema en las manos de su copiloto. Hasta ese momento en el que estuvo más cerca de su cuerpo, Hoseok no se había percatado del cahorro en los cabellos ajenos, por lo que no detiene su curiosidad al querer saber sobre él.

–¿Llevas un perrito en la cabeza? –dice muy sorprendido, aún sin creerlo.

–¡Si si!, es mío y se llama Yeontan –responde dirigiendo la mirada hacia arriba para señalarlo, aunque no lo puede ver.

–¡Woow, se ve muy a gusto! ¿Siempre duerme ahí?

–No, solo cuando salimos a pasear. Mejor dicho, él duerme la mayor parte del día en cualquier lugar cómodo –agrega Taehyung mientras lo observa con una mirada llena de amor recordando los primeros días con su Yeontannie. Él ama charlar sobre su mascota y por eso continúa haciéndolo sin dar lugar a más preguntas–. Lo busqué desde el refugio de animalitos hace unos meses, ahora puede comer alimento blando y lo hace solito. Lo que no conozco de él es su ladrido porque es un perrito muy silencioso, desde que lo adopté no lo escuché ni una vez. Mis papás dicen que si pero yo... no sé.

–¿Pero al menos juega o solo duerme y come? –Continúa queriendo saber más.

–¡Ay si! juega con Kimi, el gatito de mi vecino –Suspira con cansancio de solo recordar los días en que el cachorro activa el modo travesura–. Yeontan tiene una pelotita que chilla y siempre juega con ella, entonces parece que a Kimi también le gusta y este ha llegado a casa, buscando a Yeontannie, sosteniendo un pompón con cascabeles en la boquita. Ellos se juntan más seguido los domingos en el garaje de mi casa, que está pegado a mi habitación y produce mucho eco, entonces es un ir y venir de uñas en el suelo, más los chillidos y cascaveles. No usan el patio que es enorme ¡No! en el garaje  –Enfatiza la última palabra junto a un gruñido–. Está bien que solo pasa algunos domingos ¡pero habiendo tantos días y tantas horas, tampoco! los señoritos lo hacen de noche, me mantienen despierto hasta muy entrada la madrugada. Lo peor es que el sueño que perdí en la noche me vuelve el lunes en la última hora de clases, justo cuando tengo mi taller de lectura y escritura ¡Sabes que allí hay que hablar mucho porque tenemos que leer un montón!

Hoseok asiente riéndose bajito al imaginarse lo parlanchín que debe ser Taehyung en sus clases, justo como ahora.

–Bueno, yo siempre estoy hablando pero entonces cuando Yeontannie y Kimi juegan el domingo, no puedo mantenerme activo en alguna de esas clases porque me cae un sueño terrible. Me la paso mucho tiempo bostezando y es obvio que a mi profe le sorprende cada vez, pero todas esas veces le digo que estuve estudiando hasta tarde porque dudo mucho que me crea si le digo que mi perrito junto al gatito de mi amigo, se ponen a jugar y no me dejan dormir... Parece una excusa muy barata ¿o no? –cuenta de tal manera en que su rostro se deforma de preocupación.

El joven intenta juntar todos los datos posibles de la vivencia del chico para responderle pero este habla tan rápido que algunas frases se le van volando, así como lo hacen los minutos en que llega el mecánico. La rueda es cambiada en un santiamén y Taehyung le agradece al muchacho un montón de veces por ayudar a salvar su postre e incluso sigue haciéndolo mientras este se va. Nuevamente, sin peligros en el vehiculo, marchan a destino.





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♡~¡Buenas buenas, mis Jazmines!

Me costó esperar hasta el viernes, aunque ya es mañana pero quise publicarlo hoy como regalito para quienes comenzaron las clases.

Adjunté en multimedia un video para que prueben hacer lectura ambientalizada con una melodia animada. Personalmente me acompaña a sentir la ternura que quiero plasmar y ¡espero también puedas sentirla!

Gracias por llegar hasta aquí y ¡Por solo leerme ya te quiero! Cuidate mucho y no pierdas ni una pizca de esperanzas.

¡Espero te haya gustado este capítulo!~♡

୭̥⋆*Taehyung y Yeontan en: La Cámara Helada ୭̥⋆*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora