el soltero

Capítulo 2: La mansión

Harry se secó las manos sudorosas en los pantalones mientras caminaba de un lado a otro.

"Deja de preocuparte Harry" dijo Hermione que estaba sentada en el sofá frente a él.

"Lo siento, estoy realmente nervioso. No puedo creer que dejé que los gemelos me convencieran de esto". Harry gimió. Estaba a una hora de conocer a los concursantes del programa de despedida de soltero. Las únicas tres personas que sabía que iban a estar allí eran aquellas de las que los gemelos le habían hablado el primer día. Después de eso, habían insistido en que Harry les dejara elegir a los otros concursantes y Harry los conocería cuando comenzaran el espectáculo. Harry protestó pero todos, menos él, acordaron que sería lo mejor para el espectáculo.

El espectáculo se llevaría a cabo en una mansión en las afueras del centro de Londres que el Ministerio había comprado solo para eso.

Harry estaba en ese momento esperando en el vestíbulo de la mansión; Se suponía que Fred y George estarían allí pronto, solo se estaban reuniendo con el equipo de filmación y con los funcionarios del ministerio que habían aprobado el espectáculo. Una vez que llegaran aquí, Ron y Hermione, quienes estaban esperando con Harry, tendrían que ir con Fred y George a una carpa, como las que tenían en la copa mundial de Quidditch, que se instaló afuera de la mansión. Se suponía que era el área de visualización central donde podrías encontrar a Fred y George, quienes dirigían el espectáculo. También puede encontrar a los funcionarios del ministerio y a cualquier otra persona que trabaje en el programa cuando estén de descanso. La tienda estaba bajo hechizos protectores y nadie, excepto las personas que sabían dónde estaba, podría verla.

Una vez que Hermione y Ron se fueran, Harry tendría que salir al frente de la mansión y esperar a los invitados que llegarían individualmente en una limusina encantada.

Harry estaba tan nervioso; no podía creer que en aproximadamente 12 semanas tendría que elegir a alguien para casarse. Después de los últimos meses no podía imaginarse establecerse con alguien. Quería una familia pero la idea le era ajena.

Cuando se dio cuenta por primera vez de que era gay, le preocupaba que eso fuera un problema para tener una familia hasta que descubrió que en el mundo mágico no era raro ni tabú que las personas fueran homosexuales. Sin embargo, después de haber derrotado a Voldemort, descubrió que ser gay no era un problema en absoluto, había miles de hombres haciendo fila que querían meterse en los pantalones de Harry, pero no por ninguna razón que Harry quisiera permitir que alguien entrara en sus pantalones. .

"¡Harry!" Fred y George dijeron mientras entraban al vestíbulo.

"Esta noche es la gran noche, eh compañero" dijo George palmeando a Harry en la espalda.

Los funcionarios del Ministerio que también estaban allí entraron detrás de Fred y George. "Bueno, todos", dijo el primer árbitro, un hombre llamado Tony Lionel mientras agitaba su varita. Delante de todos apareció una copa de vino. "Me gustaría hacer un brindis por la esperanza de éxito esta noche para todos los involucrados y por la felicidad en el futuro si todo sale bien". Terminó de señalar a Harry con una sonrisa.

Todos levantaron sus vasos y luego les dieron un sorbo, Harry tuvo que controlarse para no tragarlo, sabía que no le habría causado una muy buena impresión.

"Bueno, creo que es mejor que todos pongamos este espectáculo en marcha si no queremos retrasarnos". Dijo el otro funcionario del ministerio.

"Tienes razón Amber" dijo Tony y con otro movimiento de su varita todos los vasos desaparecieron "Será mejor que salgas Harry, tu primer invitado llegará pronto".

Harry asintió; se sacudió mentalmente y luego se dirigió lentamente hacia las puertas.

"Buena suerte Harry" dijo Ron.