Quizás esa mañana en el hospital fue sólo un sueño, un mal sueño. Desperté y sentía que ese cambio de turno que debía hacer esa mañana, esa terrible mañana, sería algo que no tenía que llevar a cabo.
Quizás si me hubiera reportado enferma no estaría corriendo por la avenida totalmente sola.
Quizás.
Al mismo tiempo pensé que seguía dormida. Que seguía dormida el entrar al hospital, que seguía dormida al ver toda la gente abarrotandose por ser atendidos. Que seguía dormida al ver a personas siendo brutalmente atacadas por otras.
Ojalá siguiese dormida.
¿Qué es todo esto? ¿Qué son estas cosas? ¿Qué buscan de nosotros? ¿Es un castigo divino? ¿Es todo un plan de purificación de almas?
¿Qué es? ¿Qué son?
Siento que aquí hay obra humana, manos humanas. Siento que aquí hay algo que se nos ha ocultado, siento que en este momento nadie va a ayudarnos.
Siento que.
No creo que esto sea producto de mi imaginación, no creo que sea una simple subida de fiebre como me dijeron que identifiquemos esto en urgencias.
No creo.
Y como tengo más preguntas que respuestas, y el miedo me carcome el cerebro, decido abandonar mis dudas en este papel que encontré hace unas horas en la mochila de una cosa, que no se si llamarle hombre. A la cual me vi obligada a aplastarle los sesos en el pavimento.
Pasadas las horas de reelección sobre esto, espero que alguien se responda mis cuestiones, ya que yo no he podido hacerlo.
Como ya no puedo sostener dudas y miedo, miedo de morir en cualquier segundo, hoy me abandono a mi misma. Dejando mi sangre y oraciones entre signos de pregunta en esta hoja.
Hoy, dejo al mundo y al viento mi alma.
ESTÁS LEYENDO
El tipo de traje.
Fiksi IlmiahEn el peor día de tu vida, con muchísimas dudas sobre cosas que te suceden en el mismo. No es suficiente... Una nueva enfermedad arrasa con las masas sociales convirtiendo a la mayoría en carne en descomposición con deseos de carne humana y hacer cu...
