Míralos, parados frente a los casilleros como si fueran dueños del pasillo. Desgraciados.
Ni siquiera hablan de nada, solamente esperan a que algún alma ingenua se atreva a cruzarse en su camino para meterse con ella.
Pero por desgracia, esta vez mis ganas de ir al baño son más fuertes que mi miedo a Kris y Susie.
Solo debo esperar el momento exacto, y si hay suerte, podré hacer mis necesidades sin que ellos hagan nada.
La campana suena, un revoloteo de estudiantes camina en todas direcciones hacia su salón de clases. La distracción perfecta, es ahora o nunca.
Con la cabeza baja, y dando pasos callados, debo tratar de perderme entre la multitud del pasillo.
Oh Dios, están justo al lado.
Creo que los pasé de lado. Woof, esquivé una grande.
--Hey, MK--. Gruñó de la nada, con su maldita voz de lagarto.
Solo seguiré de largo. No me pueden hacer nada si finjo que no la escuché.
Algo tira de mi playera con fuerza bruta. Cierro los ojos y volteo a ver, tratando de no cagarme de miedo.
Como temía, son sus garras púrpuras y grasosas, ¡y en mi nueva playera!
--¿A dónde vas con tanta prisa, MK?--.
--...Al baño...--.
--¿A dónde? Kris, ¿escuchaste algo de lo que dijo?--.
El humano agita la cabeza en negación, el maldito ni siquiera va a decir una palabra, como siempre.
--Voy al baño, Susie--. Intenté decir con claridad.
--¿Al baño? Hey Kris, ¿sabes si ahora cobran por usar el baño de la escuela?--.
Él se encoge de brazos nada más, cómo lo odio.
--No se tú, MK, pero estoy bastante segura de que el baño sigue siendo gratis--.
--No comprendo qué tratas de decir Su...--.
--Trato de decir que, no necesitas todo este cambio para hacer del baño--. Se exalta, rugiendo al mostrar cada uno de sus dientes afilados como navajas. Al mismo tiempo, pone sus manos gigantescas sobre mis bolsillos del pantalón, agitando agresivamentr las monedas que planeaba usar para mi almuerzo.
Miro alrededor con mi vista periférica, todo el bullicio de los pasillos se ha ido junto con los alumnos en sus salones. Estoy solo. Estoy perdido.
--¡Quítame las manos de encima!--.
Susie golpea el casillero detrás de ella. Kris no podía hacer más negaciones desaprobatorias con la cabeza por más que intentara, si sigue así va a destornillar su cráneo.
-*No queremos alertar a los profesores, ¿o si?--.
--...Déjenme en paz...--. Me volteo hacia los salones. Kris pone su brazo para detener mi avance hacia la seguridad.
--Vamos, MK, solo necesitamos un poco de dinero para nuestro almuerzo--.
--¡Este dinero es de mí almuerzo!--.
--Que poco compartido eres, ¿estos son los valores que te enseñó tu madre?--.
--¡¡Cierra el hocico reptil!!--.
Ella pierde la paciencia.
--Ugh, cállate. Vamos Kris, está siendo demasiado ruidoso--.
Entre los dos me pusieron de cabeza tomándome por las piernas, agitándome como si fuera una piñata, sacaron todo el dinero de mis bolsillos. Por si fuera poco, me cargaron hacia el baño, colocándome sobre el suelo, me dejaron ahí, cerrando la puerta detrás de sí.