12.

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——¿Por qué llegaste apenas? – tenía los brazos cruzados.

——Lo siento mucho, pero... – suspiró – Lo que pasa es que llegó un caso de emergencia del cual tuve que ser donador.

——¿Donador tú? Osea ya se que eres demasiado amable, pero no creo que seas capaz de hacer eso.

——Yo tampoco lo creía. Pero por alguna circunstancia sentí la necesidad de hacerlo.

——Es triste escuchar eso, porque ni siquiera por mi que soy tu hermana haz hecho algo lindo – bajó la mirada.

——Ahora que metes el tema.. Tengo que decirte algo muy importante – ahora era él quien estaba serio.

——Doctor... – él dejó de hacer la revisión un momento para ponerle atención – Muchas gracias por haberme salvado – le tomó la mano – De verdad muchas gracias. Estaré eternamente agradecida con usted.

——No tienes que agradecer, es mi trabajo, además eres muy joven para estar pasando por estas cosas.

——Y se que esta mal ésto, pero... – hizo una mueca ya que no sabía cómo decirlo – ... Usted es tan bueno que he llegado a verlo como un hermano mayor – habló con lágrimas en los ojos pues le había dado nostalgia.

——Ésto no puede ser cierto... Porfavor dime que ésto es una broma – se levantó del sofá.

——Al principio estaba igual que tú, pero hice la prueba de ADN. Y es así como lo oyes Lía... Encontré a la pequeña hermanita – ésto último lo dijo con una sonrisa.

                                  (....)

Al día siguiente...

——¿Qué haces aquí? – habló la chica mientras un poco adormilada – Tengo entendido que solo el doctor Mateo y su asistente están a cargo de mi caso.

——Vine a verte, me preocupe cuando me enteré que estabas aquí – habló la rubia como si la conociera.

——Yo no te conozco, ¿quien eres?

——Que mal que no me recuerdas, hermanita.

——¿Porque me dices así? Ya te dije que yo no te conozco y mucho menos soy tu hermana. Es más, yo no tengo hermana.

——¿Mateo no te ha dicho nada? – fingí sorpresa – En verdad me sorprende demasiado porque él siempre dice ser muy honesto.

——No estoy entendiendo nada... ¿A que te...

——... Lo que quiero decir es que el doctor Mateo, como tú le dices, es tu hermano – soltó todo como si se tratará de algo normal.

——Eso no es cierto. Él y yo no podemos ser hermanos – habló aún con confusión.

——A ver linda, ¿porque crees que fue tu donador?

——Pero eso solo fue una coincidencia... No significa que seamos algo.

——Y justo porque Mateo no cree en las coincidencias fue que mandó a hacer una prueba de ADN. Y salió positivo – dijo con una sonrisa.

Alguien A Quien Amar | [EN PROCESO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora