El dulce sueño de Luna

Llegada al hotel de Miami

Viajar en avión puede ser muy divertido, o para algunos ser la excusa perfecta para dormir todo el viaje, incluso si fuera de 12 horas. Así la pasaron nuestro par de hermanos. Lincoln no podía dormir por ver el cielo, aprovechar los juegos y películas en los asientos, los aperitivos, etc. Y Luna la pasaba profundamente dormida con orejeras ya que no podía usar nada eléctrico.
Para cuando Luna despertó, fue debido a la turbulencia del aterrizaje. Eso sí que la puso alerta, tanto que se aferró al asiento como si de un gato asustado se tratase

- Hah, pero miren quien se asustó ¿Segura que no eres Gatubela? –Dijo Lincoln en lo que no paraba de reír por la actitud de su hermana, cosa que ella se vengó ahogándolo con su propia camisa-

Finalmente estaban en Miami, y era mucho más maravilloso de lo que podían imaginar. El calor era bastante fuerte como para broncearse en un par de horas, la brisa era perfecta, y las calles eran sin duda como un lugar para festejar a todo momento.
Ambos se encontraron con una mujer de traje negro con lentes oscuros, y cabello rubio.

- ¿Lincoln Loud? Por favor sígueme –dijo la mujer, guiándolos a una limosina-

- Es un gusto poder estar aquí, la verdad me siento muy feliz por esto –decía Lincoln en lo que extendía su mano en señal de gratitud-

- No hay de qué agradecer, a fin de cuentas, ganaste limpiamente siguiendo las reglas. En fin, iré al grano con ustedes. El señor Lee no pudo acompañarnos para felicitarte en persona ya que está de viaje con su familia, pero podrás tener su número de teléfono para estar en contacto con él, y negociar un lugar en la compañía de comics ¿te parece bien?

Lincoln estaba petrificado por la presión. Sin duda no estaba preparado para algo tan increíble, cosa que Luna lo sacó del trance arrancándole un pelo. Ya consciente, decidió tomar la palabra.

- No se preocupe, sé lo importante que es tener tiempo para la familia y no estar solo en el trabajo, además estaría encantado de poder trabajar con ustedes, y poder lograr grandes proyectos. Como una gran familia

La mujer se quedó mirando fijamente a Lincoln sin que lo notara gracias a los lentes, pero sin duda podía sentir esa chispa como con su jefe, el señor Lee.

- (Creo que le va a agradar bastante al jefe, aunque....... Tengo intriga por la chica a su lado. ¿Será su hermana, o su novia?) –supuso la mujer al notar que ambos tenían uno que otro rasgo en común, pero era sin duda toda una sorpresa ver a un albino-

Luego de dar unas vueltas por gran parte de Miami, y darles un mapa turístico, la mujer les explicó del hotel donde se quedarían, el itinerario de actividades, y que contaban con un sobre con 10.000 dólares para gastar en lo que quisieran mientras disfrutan del mes.
Finalmente los dejó en el hotel, les dio las llaves de su habitación, y les deseó que disfruten la buena vida.

Lincoln y Luna no sabían qué cosas hacer por todo un mes, pero sin duda lo disfrutarían al máximo. Claro, evitando caos y destrucción en el proceso.