Capítulo 2

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La hora del receso llegó y Win sentía que aire era escaso en ese gran salón ¿podrías asfixiarse? Pensó.

Después de la caída de su lápiz miraba de reojo al chico a su lado, pero lo más atrayente eran esos labios, sintió su rostro arder de solo imaginarlo.

Respiraba con dificultad, su pulso se aceleraba. Sintió el timbre sonar y se levantó, listo para salir corriendo cuando una mano se posó sobre su brazo y lo detuvo.

Bright: ¿puedo pedirte un favor Win?, verás... no conozco a nadie y quería saber si tú podrías mostrarme la facultad y sus alrededores, si tú quieres, si tú puedes – y se acercó más a Win.

En ese momento el aire se fue por completo, al menos así se sintió y el rostro de Win se tiñó de rojo carmesí ¿cómo era posible? Ni siquiera Nam lograba ese efecto.

Win: Ehhhh claro, yo... yo... quiero, digo, yo puedo ¿Ahora? – tartamudeo como nunca en su vida.

Win respiró profundo sintiendo que moría en ese momento ¿qué le estaba pasando? ¿cómo podía este chico voltear su mundo y ponerlo así?

Bright: Si puedes ahora sería genial Win -su sonrisa se amplió y Win juró que sus rodillas temblaron.

Salieron del salón, caminaron por los pasillos de la facultad, Win seguía sin mirarlo, no podía, era eso o tartamudear, eligió hablar de corrido.

Win: Y esta es la cafetería de nuestra facultad y al lado la biblioteca – dijo señalando a su alrededor- si quieres otro día te puedo mostrar otras facultades – una vez dicho esto hizo una nota mental, no volver a ofrecerse ¿en qué estaba pensando? ¿lo hacía?

Bright: Muchas gracias Win, has sido un gran guía, déjame hacer algo por ti... ¿un café? Hoy no alcancé a desayunar pues salí temprano de casa – aunque en realidad él dormía poco, había pasado a la estación antes de ir a la universidad.

Win: No es necesario, en serio, debes tener cosas que hacer – mientras hablaba muchas chicas comenzaron a rodearlos.

Bright: En realidad no, vamos, acompáñame – lo tomó de la mano y lo llevó dentro de la cafetería.

Una corriente eléctrica subió por la mano de Win y llegó directo a su pecho ¿qué diablos? Pensó, mientras sentía como la piel le quemaba, ahí donde Bright lo tenía tomado. Su rostro ardió cuando vio como las chicas suspiraron decepcionadas viendo como Bright lo tomaba de la mano y se lo llevaba dentro de aquel lugar.

Win: para ser nuevo eres muy popular – dijo refiriéndose a las chicas.

Bright: ¿De qué hablas?

Win: Las chicas que te esperaban...

Bright: No suelo mirar a mi alrededor Win cuando tengo enfrente lo que me interesa – dijo sin mirarlo.

Win tragó saliva ¿de qué mierda está hablando? Espera ¿Qué? Su cabeza se llenaba de pensamientos y unos muy confusos... acaso Bright hablaba de él, no, imposible, pensó.

En eso una mano que quemaba al tacto tocó su mejilla y lo hizo voltearse.

Bright: Deja de pensar tanto ¿cómo prefieres tu café? – dijo con esa sonrisa que doblaba las rodillas de Win.

Win: ¿Ah?

Bright: Tu café Win, la chica pregunta cómo lo quieres – señalando a la vendedora tras el mostrador.

Win sintió vergüenza, le habían estado hablando y él ya no entendía nada.

Win: americano, sin azúcar por favor – suspiró ante sus pensamientos, segunda nota mental se dijo, pon atención Win.

"Hijos de la mafia 💥"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora