"Vamos, princesa..." Draco llamó, entrando a su estudio mientras seguías su rastro detrás de ti. "...sube" Se detuvo frente a su escritorio de roble, golpeando el material duro para que te sentaras.
Hiciste lo que te pidió, deslizándote entre él y su escritorio antes de levantarte de un salto y sentarte frente a él. "¿Qué estás haciendo papi?" Preguntaste, tu mirada siguiendo sus brazos mientras abría uno de los cajones instalados en su escritorio, sacando una caja sellada de color negro azabache brillante.
Él no te respondió, siguió abriendo la caja mientras lo esperabas pacientemente "Te compré un regalo princesa..." Comenzó, abriendo la caja negra para revelar una especie de cosa de silicona rosada en el interior. "...creo que te va a gustar este"
Tus ojos se abren como platos en el momento en que te das cuenta de lo que era, y te preguntas por qué tiene uno, especialmente porque se ha propuesto vencerte 5 veces hoy. "¿Sabes qué es esto?" Preguntó, tomando tu mano para colocar el objeto.
Se sintió un poco extraño al principio, el objeto extraño se colocó en su palma suave mientras cerraba los dedos alrededor de él, la textura era inusual, se sentía gomosa y resbaladiza, pero no lo suficientemente resbaladiza como para resbalarse de su mano.
Miraste a Draco, mordiéndote el labio inferior mientras pensabas en una respuesta para él. "¿Un vibrador en V?" Tartamudeaste por un rato, manteniendo tu mirada sobre él.
"Así es..." Respondió, las comisuras de sus labios formando una sonrisa mientras abría las palmas de tus manos, agarrando el vibrador "... ¿quieres probar algo bebé ?" preguntó de nuevo.
"Try what?" You cocked your head to the side,
"Prueba el vibrador" Respondió, sus palmas deslizándose por el costado de tu cuerpo, manteniendo su toque sobre ti mientras la idea se asentaba.
Nunca has probado nada como esto. Todo lo que pasaba con él… en el dormitorio, siempre era solo él. "¿Yo puedo?" Le preguntaste, tu voz elevándose unas cuantas octavas mientras la emoción se revelaba.
"Claro que puedes bebé..." Él susurró, sus palmas deslizándose para agarrar tus caderas. "... acuéstate para papá, ¿eh? " Agregó presión a sus palmas, empujándote ligeramente hacia abajo para que te recostaras en su escritorio.
Fue un poco incómodo al principio, acostada en ese trozo de madera, pero una vez que sentiste sus manos deslizándose por tu pierna, todos esos pensamientos volaron por la ventana.
Podías sentir sus palmas deslizándose a través del material de tu falda, anulando la tela y fue directo a tus bragas. "Está bien, terminemos con esto", murmuró Draco, bajando la cabeza, dejando rastros de besos en tu muslo, cada vez más cerca de donde más lo necesitabas.
Te retorcías debajo de él, tu pecho palpitaba mientras tratabas de mantener la calma, pero la habitación solo parecía calentarse más y más. "Necesitas a tu papi... p -por favor " gritaste, moviendo las caderas hacia su cara.
"Está bien, papá está aquí, princesa", susurró mientras sentías que el material de agarre de tus bragas se aflojaba, deslizándose por tus piernas.
Tu mente se sentía confusa, todo lo que podías sentir era la mano de tu padrastro sobre ti, la áspera yema de este pulgar comenzando a dibujar círculos perezosos en tu clítoris.
Trataste de contener tus gemidos, mordiéndote el labio inferior mientras tu espalda se arquea fuera de la mesa, sus labios dejando rastros de besos en tu yugular. "Parece que no estás lo suficientemente mojada, princesa ..." Podías sentirlo alejarse de ti, "...todavía no puedo ponerte el vibrador, te va a doler"
