LOS ENCUENTROS DE LA VIDA
UN MES DESPUES
Estoy bien...
Puedo decir que últimamente he estado bien.
¿Pero cuánto me va a durar esta calma que he estado sintiendo?
¿Cuándo mi mente se va a activar para volver a la misma rutina de siempre?
Es irónico que cuando a uno le está yendo bien en la vida, cuando las cosas están bien, o sientes un momento de tranquilidad, tú mismo te destruyes porque empiezas a preguntarte ¿Por qué me está yendo bien?, ¿Cuánto me va a durar esta felicidad?, ¿Qué día la vida me chocara diciéndome "ya tuviste demasiado tiempo de paz, vuelve a la guerra"?
Ya deben estar cansados de mí, tanto dramatismo, tantos llorosos, pero es mi vida. Y estoy segura de que la de la mayoría de ustedes también. Comparto esto para desahogarme, para que tú también te desahogues, contar los problemas con las palabras es muy difícil, pero escribirlo y contárselo a alguien es liberador.
Muchas veces tenía ganas de llorar, pero las lágrimas no salían, hay veces que nunca salían. Era ese tipo de tristeza, ya sabes, la tristeza enfermiza, de la que no nos animamos a admitir que tenemos, esa en la que no te puedes sentir peor. Creo que todos pasan por ella de vez en cuando, y es como ley pasar por ese sentimiento, porque llorar sin lagrimas es más desgarrador que descargarse, porque cuando lloras sueltas todo lo que guardas, pero cuando no logras sacar esa descarga, te guardas todo, te aguantas las emociones, porque quieres ser fuerte...
O por lo menos lo intentas.
Lo intentamos porque ya estamos cansados de desplomarnos tan seguido y buscamos otros métodos para "intentar avanzar".
Somos patéticos.
Soy patética.
Pero me gusta como soy, con desastre y todo, sigo siendo yo.
Todavía no me he perdido.
-Mira lo que encontré.
La voz de papá me sorprende cuando se acerca a mi lado y apago la pantalla del celular.
-Estaba revisando los cuadernos del jardín de ustedes y vi esta notita que escribiste tu-
- ¿Nostalgia papá? -
-Crecen demasiado rápido.
Veo a la cara a papá, y veo sus ojos rojos que brillan con añoranza al mirarme.
-La maestra te había preguntado que era el amor para ti y tu escribiste esto- me extiende una hoja ya amarillenta, algo arrugada- solo tenías cinco años...
"EL AMOR PARA MI: Es cuando papá prepara café para mamá, y lo prueba primero, para asegurarse que esta bueno."
-No me acordaba de esto- le digo devolviéndole el papel
-Nunca pierdas esa esencia tuya, el de la niña soñadora. - le sonrío con el alma, con esa sonrisa que solo produces al recibir el amor de quien quieres- Tarde o temprano llega el corazón adecuado para encajar con el tuyo.
- ¿Y si nunca aparece ese alguien adecuado?
-Entonces conviértete tú en esa persona adecuada para ti.
***
Un mes después
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Hasta llegar a mi
Roman pour AdolescentsIveth a sus 20 años se siente perdida. Siente que todo a su alrededor sigue su curso cuando ella se quedó estancada en el mismo lugar. Ve como sus amigos, familias y conocidos hacen sus vidas y ella solo mira desde lejos como el mundo avanza. Y como...