BlackHole (Relatos Cortos)

(1) BlackHole

*Ida de Lawrance hacia su misión*

<<Todo comienza con la mente y de la mente sigue el miedo>>, esto le dijo el Emperador de Umbra a Lawrance antes de su partida a por los hermanos Boss.

Antes de su salida del reino fue a despedirse de su compañero de Academia Fork, el cual estaba con su hermano, un Protector de la Corte, trabajando en un proyecto:
-¡Lawrance!, lo he conseguido, he podido encontrar la forma de llevar acabo mis teorías.-Dijo emocionado, sin saber la noticia que le daría su viejo amigo.
-Fork...El Gran Emperador me ha encargado un recado; El deber de fulminar a los hermanos. Y para ello me ha entregado la BlackHole.-Lo comento con un tono lúgubre y escasez de energía.
-No...no, no, mientes. No puede haber mandado a un simple estudiante a ejecutar a aquellos despreciables, ¿verdad?También, ¿no habían aniquilado a un pueblo entero?
-Lo sé, lo sé, pero el Gran Emperador ha confiado en mi, no era nadie y ahora soy...-Entonces se quedó todo en silencio.
Lawrance se había cortado con la espada, aunque sólo fue un corte, su cara mostraba horror.
-¿Amigo...Estás bien, Larry...?
Se fue de la sala sin pronunciar ni una sola palabra, sin siquiera mirar a su amigo, dejándolo inquieto.
-Fork, ven ya, está todo listo.-Dijo el hermano mayor de Fork llamándolo-. Por fin vamos a curarte.
-Si...Dame unos momentos, tengo que pensar.

*La demencia de Logos*

El pasillo era largo, sólo se podía escuchar el sonido de los pasos de la niña resbalando en el brillante suelo, eso le agradaba. Todo estuvo tranquilo hasta que una melodía se asomó por los oídos de Lily, llamándola la atención. El sonido la llevo hasta una sala rodeada por algunos cuadros; uno era de la silueta de un muchacho con una espada colgada del techo y el otro de un Guardia de alta clase, aunque su cuadro había sido cortado por alguien. Habia alguien dentro, así que espero fuera para ver quien era:

-No...¡No, así no es!Debes tocarlo con las notas que te pide la partitura, no hacer lo que te plazca.
-Lo sé, pero quiero componer, expresarme, crear algo nuevo, no repetir lo aprendido una infinidad de veces.
-Ya, pero lo sabido es útil, es seguro, es...-Lily apareció asomándose por la puerta. El sujeto se levantó con rapidez y golpeó el piano con gran fuerza, lanzándolo hacia una pared, destruyéndolo.-Mira lo que tenemos aquí.
Este extraño hombre tenía una composición fisiológica inhumana; con la parte izquirda del cuerpo con cierta musculatura y la parte derecha más enclenque. Lo que hizo gracia a lily era que necesitaba agachar la parte del cuerpo izquierdo para poder estar rígido.

-Una niña que quiere morir.-Decía mientras se acercaba.
-Dicen que buena es.
-Dicen que envidiosa también.
-No llegará muy lejos como alguien como tú.
-No llegará muy lejos como alguien como yo.
-No llegará muy lejos gracias a nosotros.-Dijeron al unísono.

La batalla comienza y todo se pone más caótico mientras avanza el tiempo. El sujeto tiene discusiones consigo mismo, pero lo que más sorprende a Lily son las respuestas que da. La lucha es frenética, llegó a alcanzarla, pero consiguió esquivarlo, aunque su sombrero se calló al suelo.

-Niña...Te estamos haciendo un favor al fin y al cabo, tu vida no vale, y tengo hambre...-Su boca se hacía agua pero paró instantáneamente.
-No vamos a comerla, sería un desperdicio de...-Se interrumpió
-¡Calla!Llevamos esperando este momento...
-<<Llevas>>. Tu eres el único que...
-¡No me interrumpas!-La discusión paró la batalla. Lily se escondió detrás de los restos del piano.-Voy a devorarla, llevo esperando este momento más de lo que puedes pensar.
-Lo sé, conozco esas ansias que tienes, pero no podemos...
-Tu no, ¡yo si!-Se lanzó en busca de la niña, pero algo lo detuvo, una fuerza interna...Pero no le detuvo mediante impulsos, sino con su propio brazo.-¡Qué estás haciendo, no lo hagas, no, no, no!