🩸_"Cadenas de Sangre"_ ❤️ (Omegaverse)

CAP.8 De regreso

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Por su parte, Muzan no se había rendido en volver a ver a su querido Omega; el haber estado 4 años si siquiera poderlo ver a la distancia era una completa tortura. Constantemente se preguntaba por que el destino lo había hecho encontrarlo si simplemente se lo quitaría tan fácil de las manos; estuvo un buen tiempo "interrogando" cazadores, solo para descubrir que se había retirado por motivos personales, lo que claramente era su culpa.

El mayor avance que tenía en su nueva búsqueda, era el nombre de su preciado cazador, al parecer era Yoriichi Tsuguikuni pilar del sol, aunque claro, no podía confiar en la información que había obtenido de un cazador novato, debía ir por alguien mas importante si quería información de verdad.

 Simplemente su cabeza daba vueltas  al plantearse la pregunta de ¿Y si me lo hubiera llevado? 

Y precisamente en eso pensaba mientras recorría uno de los mercados de el restaurado pueblo fantasma en donde lo había encontrado por primera vez. Tenía la esperanza de que por alguna razón podría encontrar algo que le diera una pista de su paradero o algo parecido, y para su buena suerte, el retiro lo había vuelto mas descuidado, después de todo... ¿Quién dejaría solos a sus hijos en medio de un mercado tan transitado?

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Unas horas antes de la llegada de Muzan a la plaza, se veía a Yoriichi sacudiendo la ropa de el pequeño de sus hijos, ese mercado era el punto de encuentro que iba a tener con su hermano, pues este se había ido a una misión y no habían tenido oportunidad de comprar comida, así que lo esperarían allí y de paso vagarían un rato entre los puestos para ir escribiendo una lista de compras.

Los pequeños en algún punto se alejaron de su "madre" y se perdieron en medio de la multitud, así que el mayor decidió acercarse a un punto de referencia y tratar de encontrar a su tío o su madre desde allí. Desafortunadamente fueron arrastrados nuevamente por la marea de gente y fueron a parar frente a un callejón donde se les acerco nuestro ya tan conocido, rey de los demonios.

-¿Están perdidos?- se hoyó la voz de un "hombre" saliendo de la parte profunda de un callejón.

- N-no!- menciono en mayor de los niños poniendo a su hermano menor detrás para protegerlo.

-Entonces, ¿Qué hacen solos en un callejón así?- esta vez la vos fue acompañada con el mismo "hombre" saliendo del callejón.

-Estamos... ¿Sabe que? ¡Usted que se mete!- dijo alejándose aun mas de la entrada de callejón.

- Oye muchachito, ¿Qué tus padres no te enseñaron a respetar a los mayores?- dijo hincándose a la altura del pequeño.

 -Si... pero mi madre me dijo que me aleje de le gente que tenga cara de querer secuestrarme-

-¡Oh vamos! cuantos prejuicios, vamos, te ayudare a buscar a tus padres es bastante obvio que están perdidos ¿Cómo lucen?-

-Bueno... si me promete que no nos hará daño le digo-

-Mmm ... esta bien... lo prometo- 

-Bueno, mi mamá es bastante alta, tiene un yukata color crema y un ahori rojo, el cabello largo y trae unos aretes de cartas hanafuda-

-Muy bien, ¿y tu padre?-

-No tengo, pero viene mi tío, también es alto y de cabello largo, pero el trae un ahori morado de puntos negros... y también trae siempre una katana-

- vaya vaya...bueno vamos, no se me pierdan, síganme, creo que se de un sitio donde podemos encontrar a su madre-

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-¿Un puesto de vestidos?- preguntó el pequeño mientras agarraba a su hermano de la mano, sabia que no le tenían que hacer caso a ese hombre, ahora habían caminado para nada.

-Bueno, este tipo de puestos atrae a mucha gente-

-Pero a mi mamá no le gusta comprar ropa, dice que es una perdida de dinero-

-Pues tu madre suena muy aburrida, algún día tráela a comprarse ropa, seguro le gusta- dijo cruzándose de brazos, ya se estaba desesperando de acompañar a esos niños, si no encontraba rápido a los padres se los iba a terminar comiendo.

-Vámonos hermano, conseguiremos ayuda en otro lado, este sujeto es muy tonto para ayudarnos-

-Si...-

Muzan al escuchar eso se le reventó la paciencia, estaba decidido a matar a los mocosos, pero una voz lo hizo detenerse, era la voz que mas deseaba escuchar desde hace años.

-¡Niños!- gritó Yoriichi corriendo a abrazar a sus hijos.

-¡Mamá!- gritaron al unísono.

 -(¿MAMÁ?)-

Yoriichi cargó a sus pequeños y se dio media vuelta sin prestar atención a quien estaba con ellos.

 -Vaya vaya, miren quien apareció por fin-

Un escalofrío recorrió la espalda de Yoriichi al escuchar esa voz, era demasiado familiar y por alguna razón su cuerpo temblaba de miedo de solo reconocerla, así que como reflejo volteo a ver a quien le pertenecía; al reconocer su rostro su mente le trajo de vuelta todos los recuerdos que había mantenido en secreto desde hace tanto, el shock no lo dejaba moverse, su cuerpo temblaba, quería salir corriendo con sus hijos y jamás volver, pero su cuerpo no le hacía caso, solo estaba allí temblando mientras Muzan daba pasos lentos acercándose a él.

-No sabes todo lo que hice para encontrarte, y ahora, seré capaz de hacer lo que no pude hacer hace cuatro años atrás- 

Muzan estaba a punto de lanzar uno de sus famosos cortes que estaban inyectados con su sangre, pero algo lo detuvo, otra presencia hizo reaccionar a Yoriichi y se lo llevó junto a los niños, lo había perdido de vista de nuevo, todo gracias a la misma persona.

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Michikatsu estaba muerto de miedo, pero por reflejo seguía corriendo entre la gente con sus sobrinos en brazos y con su hermano medio zombie también agarrado fuertemente del brazo, sabía quien era él que estaba antes a solo unos centímetros de matar o convertir en demonio a su hermano, era el mismísimo Muzan Kibutsuji en persona, pero ni loco lo enfrentaría, había demasiadas personas en riesgo, además de los niños que tanto se esforzó en cuidar; él no podía ser rival para el padre de los demonios, no era capaz de utilizar correctamente el aliento solar aunque lo hubiera practicado sin descanso tras el retiro de Yoriichi, el único capaz de hacerle frente  era su hermano, y claramente no estaba en condiciones de pelear, así que solo quedaba huir y llegar a casa lo mas pronto posible.

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"Habían conseguido escapar, pero...¿Por cuanto tiempo?"