Capitulo 5

327 8 0
                                    

Cristian

El muy desgraciado estaba golpenado al muchacho sin ningún tipo de piedad.
Esto no era un acto de BDSM, esto era sencillamente violencia.
El había practicado lo suficiente para saber que no era la manera de tratar a su sumiso, el BDSM se trataba de confianza y control, lo que veían sus ojos era a un hombre descargando su furia sobre un muchacho que no podía defenderse.

Se incorporo involuntariamente, solo para que Mark lo volviera a sentar sujetándolo de un brazo.

-Para hombre, sabes cuales son las reglas, somo intervenimos si el chico lo pide.

-Esto no está bien.

-Lo se, solo espera, en este momento no hay nada que hacer.

Intente calmarme con todas mis fuerzas, respire y bebí el whisky de un solo trato, al levantar la vista quede inmobil, el chico tenía su mirada en mi, como si quisiera transmitir todo lo que sentía con sus ojos.

Estos eran de un azul profundo como las aguas del caribe, pero llenos de tristeza, dolor y añoranza, de que no supe adivinar.

A pesar de su extrema delgadez era un hombre hermoso, no del tipo de belleza que se ve todos los días, sino una belleza angelical, el chico parecía un ángel en toda su expresión, solo le faltaban las alas.

No quería moverse para no cortar el hechizo en el que lo tenía este chico, pudo ver los pómulos marcados, unos labios llenos, la mandíbula marcada como un adonis.

El pelo largo y rubio caía sobre la frente, tapando por unos segundos sus ojos que justo en ese momento se cerraban por la fuerza del golpe recibido.

Para cuando el término de analizar al chico, se percato que la tortura seguía, sin poder aguantar más, pago su cuenta y se fue sin decir palabras a Mark y sin haber disfrutado de su tan preciado viernes.

Mi Salvador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora