Resfriado 🤒

346 27 6
                                    

Hace unos días Peter salió a jugar en la lluvia con Cassie, Scott les había dicho que no porque se iban a enfermar pero como Peter y Cassie son necios, salieron a jugar, ahora papá e hija están resfriados, pero papi Scott está ahí para cuidarlos, será su enfermero por unos días.

Quill: ¡AMOOOOOR!

Cassie: ¡PAPIIIIIII!

Los dos llamaron desde su habitación para que el menor fuera a verlos y lo peor es que no sabe con quién ir, Si con su bebé pequeña o su bebé grande.

Dejo lo que estaba haciendo en la cocina, subió las escaleras en dirección al cuarto de Cassie, el sabía que su pequeña era menos complicada con eso de las enfermedades, mientras subía pudo ver en la pared algunas fotos, fotos de el con Cassie, fotos de el solo, fotos de Cassie y las últimas eran fotos de el junto a Peter, algunas de Peter en su nave y la última era la que más le encantaba, era una fotografía de ellos tres afuera de la casa, eran una familia, algo pequeña, pero una familia.

Su vida cambio de un momento a otro, ahora es más feliz, con una pareja increíble y una hija maravillosa.

Cuando entró al cuarto de su pequeña la vio enrollada en su cobija como si de una oruga se tratara.

Scott: ya llegó papi – se sentó en la cama – ¿Qué te pasa pulga?, ¿Necesitas algo?

Cassie: ya se acabó mi película – señaló el televisor, efectivamente la película que estaba viendo había finalizado.

Scott: ¿Y porque no te paraste a poner otra?

Cassie: esta muy – estornudo – lejos...papi ponme otra película – le hizo un puchero.

Scott: de acuerdo – fue al lugar donde tenía todas las películas – ¿Qué quieres ver?

Cassie: ponme Toy story – Papá colocó el disco en su lugar y la película empezó a reproducirse – gracias papito.

Scott: para eso está papá, pulga – antes de salir de la habitación le lanzó un beso al aire – en un momento te traigo de comer – la pequeña asintió, Scott cerro la puerta y se encaminó a ver a su bebé grande.

Dió un largo suspiro, abrió la puerta con cuidado, ahí estaba Peter Quill tumbando es su cama por un simple resfriado, pero por algo simple, Peter lo hace ver muy grande.

Quill: por fin llegas – alzó los brazos – me siento muy mal amor, siento que me voy a morir – Scott se rió – ¿¡Por qué te estás riendo de mí sufrimiento?!

Scott: eres un dramático corazón – se acercó a la cama para acomodar sus almohadas – yo te lo dije pero tu y la niña quisieron jugar como animales bajo la lluvia – le dió su medicina.

Quill: soy un idiota débil – se quejó.

Scott: no lo eres.

Quill: me voy a morir.

Scott: tampoco te morirás – era cuento de nunca acabar, tiro todo el papel higiénico que estaba en la cama a la basura – ¿Y el control de la televisión?

Quill: por ahí – se tapo con las cobijas hasta la cara, estaba haciendo berrinche porque su esposo no le hacía caso a su enfermedad tan grave.

Scott: ¿Encerio viste 365 días? – Peter sintió sus mejillas arder – no estás tan aburrido entonces pervertido – le lanzó el control aún lado de el.

Quill: ¿Y que querías que hiciera?, No duermes conmigo, tengo que complacerme de alguna manera – de un momento a otro su mente hizo click y los papeles que había tirado al bote no solo eran de mocos, también eran de otra cosa.

Hay un Nosotros (Star Ant)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora