😬 La Sal 🧂

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Les ha pasado que un día quieren que la tierra se los trague o que quieran desaparecer por algo vergonzoso que les pasó, pues a Peter y a Scott si y veremos el porque.


Era la tercera cena familiar que tenían en este mes y a Scott le gusta mucho que su novio cene con su familia de vez en cuando, al principio a su padre no lo agradaba la idea ya que odia a Quill pero el mayor logro ganarse un lugar en la mesa con el tiempo.

Hanck: entonces Quill – el mencionado puso atención a su suegro – ¿Cómo va el espacio?

Quill: por ahora está muy tranquilo, no hay tantos problemas de alienígenas por eso estoy más tiempo con Scott y con Cassie – le sonrió a los dos últimos.

Hanck: ¿Cuando piensas irte?

Janeth: hanck

Hanck: ¿Qué? Solo hice una pregunta, no estoy siendo grosero con el.

Quill: no, no se preocupe señora pym, con gusto voy a responder eso – comió un poco y luego respondió – me voy en tres días, de hecho Scott vendrá conmigo, tenemos misión juntos – Scott tomo la mano de Peter.

Cassie: no olviden tráeme algo del espacio.

Scott: te traeremos algo increíble pulga.

Hanck: ¿Por cuánto tiempo estarán en el espacio?, ¿Si tienes lugar en tu pequeña nave? – lo último que preguntó lo dijo con sarcasmo, Peter iba a responder pero Scott lo hizo por el.

Scott: estaremos allá por una semana papá y si, si tiene lugar, por fuera se ve pequeña pero por dentro es muy grande, yo duermo con Peter en su habitación.

Hanck: Y cuando no eran novios ¿Dónde dormías?

Scott: no tenía misiones con ellos papá, aún no los conocía – la cena empezaba a ponerse un poco tensa.

Después de ese pequeño momento nadie hablo.

Hope: Peter ¿Sabes si Gamora trajo lo que le pedí?

Quill: si, de hecho te trajo más cristales de los que habían acordado, ahorita te los doy – la pelinegra asintió con una sonrisa.

Janeth: ¿Quieres más Peter?

Quill: si no es mucha molestia – le dió su plato – usted hace de cenar muy rico, hizo que recordara cuando mi mamá me hacía de comer.

Janeth: es un placer para mí – le sonrió y se llevó su plato para servirle más.

Scott: pero yo también se cocinar, ¿No te gusta mi comida? – hizo un pequeño puchero.

Quill: me encanta mi amor, tú haces las mejores delicias para mí por eso cuando estoy en el trabajo ya quiero llegar para probar tu comida – se acercó a su oído – y para probarte a ti – le dió un beso en su mejilla.

Hanck: ¿Piensan casarse? – soltó de la nada, todos que quedaron quietos ante esas palabras.

Scott: ¿Encerio papá?

Hanck: solo quiero saber hijo, para ir preparando mi discurso de padre sobreprotector.

Janeth: ya se lo diste – le entrego el plato de comida – y el pobre se fue casi sin hablar – volvió a sentarse en su lugar.

Hanck: solo estoy haciendo mi trabajo cariño, pero este discurso es muy diferente al de antes.

Quill: De hecho si, si estamos pensando en casarnos, llevamos ya dos años juntos y nada me haría más feliz que pasar el resto de mi vida con mi Hormiguita – Scott se acercó a darle un beso.

Hope: ay cuánto amor – se burló – espero  ser la madrina de sus futuros hijos – hanck, Scott y Quill casi se ahogan con la comida – creo que fue muy pronto.

Scott: demasiado pronto – intento calmar su respiración.

Hope: no lo siento – siguió comiendo.

Después de ese momento continuaron cenando.

Scott: papi pásame la Sal – mala elección de palabras y mal momento también, pues Hanck y Quill movieron su mano al mismo tiempo para pasarle dicho condimento – mierda – susurro.

Cassie: oh no – se cubrió su carita con ambas manos.

Quill y Hanck solo se miraban, uno con miedo y el otro con enojo, si antes lo odiaba ahora lo quiere matar.

Hanck soltó la sal, Peter también y Scott pues ya ni tenía hambre, Hank pym se veía calmado solo veía a la pareja con una sonrisa, pero por dentro se aguantaba las ganas de matar al guardián.

Hank: Ya te tienes que ir ¿Verdad Quill? – se cruzó de brazos en la silla.

Quill: si si yo ya me iba – se levantó de su lugar – gracias por la cena – tomo su chaqueta – te veo mañana mi amor – se despidió con un beso – nos vemos pulga.

Cassie: Bye Osito.

Hanck: no lo verás mañana, lo verás en tres días que es cuando se van de misión.

Quill: si, lo que usted diga señor pym – se despidió por última vez y se fue.

Scott: Papá, no puedes hacer eso, ya no soy un niño – le reclamó.

Hank: claro que puedo porque soy tu padre y mientras no te cases con ese hombre yo pongo las reglas – un grito se escucho afuera de la casa, Scott salió rápidamente y se encontró a su novio en el suelo.

Scott: ¡Genial, lo acaba de matar!

Janeth: ¿Encerio Hank?

Hank: yo no lo maté querida, fueron las hormigas, aunque ganas no me faltaron, solo lo dormi – ahora el se levantó – ¡Tráelo para acá hijo! – Hope fue a ayudar a su hermano – ¡No, mejor déjalo ahí!

— ¡PAPÁ! — Dijeron los hermanos.

Cassie: ¿Ya no habrá boda entonces?

Janeth: si habrá corazón, solo que tú abuelo es muy agua fiestas.









Fin








Hay un Nosotros (Star Ant)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora