Las flores del cerezo brillaban más que nunca, las mariposas blancas coloreaban el paisaje y al fondo se podían escuchar a los gorriones cantando felices, el escenario ideal para una boda, si tan solo el novio no hubiese huido.
-¿Esto es algún tipo de broma?, llevamos siglos planeando esta alianza y ahora tu hermano ha decidido que no desea casarse ¡Como si tuviera elección!
-Padre Emil solo está asustado, ya verás que aparecerá antes de la ceremonia, él conoce su deber como regente.
-Eso no es suficiente Amy, no necesito que conozca su deber, necesito que lo cumpla.
Amy suspiro mientras miraba por la ventana, su padre estaba más alterado que nunca y el viento que empezaba a mecer los árboles era una clara muestra de ello.
-Voy a caminar un rato, quizá lo encuentre en el camino.
-Si lo encuentras traelo a rastras ante mi
Amy hizo una pequeña venia y se retiró, el Rey, su padre había organizado esta alianza durante años, Emil estaba destinado a ser el esposo del alfa desde antes de su nacimiento y su matrimonio traería la tan anhelada paz al reino de Ecatsu.
Hace muchos años, antes de las conversaciones de paz los lobos y las criaturas del bosque estaban en guerra, un conflicto doloroso y duradero que causó pérdidas de ambos bandos, allí falleció su abuelo y su primer hermano; sus padres nunca se recuperaron de la pérdida, pero fueron inteligentes, no permitieron que el dolor los cegara y se motivaron a conseguir la paz, fue una tarea ardua pero después de muchas conversaciones y regalos se firmó el acuerdo; las pautas eran claras:
Los miembros del clan del bosque no tienen permitido herir a ningún lobo
Los lobos no tiene permitido herir a ningún miembro del clan del bosque
Una vez al año las familias regentes se reunieran y discutieran las condiciones actuales de sus territorios y la participación de su aliado en el mismo
Con el fin de afianzar ambas familias el alfa regente de la manada y el heredero del clan contraeran matrimonio durante el eclipse de la Pachamama
El eclipse de tierra o de la pachamama, era un evento raro que se daba una vez cada quinientos años, la luna, el sol y la tierra se alinean de forma tal que todo oscurece por unos instantes para posteriormente dar paso a un paisaje totalmente iluminado de color oro, se dice que las flores y frutos que son recolectados ese dia son capaces de sanar cualquier mal y que las uniones que se realicen estaran llenas de bediciones, de allí la importancia de que el matrimonio sea hoy, eso o tendrian que esperar otros quinientos años.
Amy recorría el bosque mientras inhalaba el aroma de las flores, podía escuchar a los lobos y las criaturas correr atareados para que todo estuviera listo "¿Donde están los listones?" "¡Que no entiendes la diferencia entre fucsia y rosa!" y muchas otros gritos que rayaban la histeria, Amy se agacho en el lago y empezó a jugar con el agua, sus poderes de ninfa le permitían controlar ese elemento y era algo que siempre le ayudaba a desestresarse, hizo pequeñas figuras y luego realizó volcanes que erupcionaban agua, se estaba divirtiendo hasta que escuchó un carraspeo.
Se apuro a levantarse y giro su cuerpo para mirar al visitante, el hombre era alto con unos fuertes musculos y ojos cafes que lo miraban furioso, era uno de los lobos y estaba levantando una ceja mientras escurria agua, en ese momento Amy se fijo, el hombre estaba totalmente empapado, el pantalon negro y la camisa que llevaba se pegaban a su cuerpo como una segunda piel, delineando sus pectorales y un miembro nada despreciable; un segundo carraspeo lo hizo levantar la mirada sonrojado.
-Lo lamento, yo...-El príncipe desvió su mirada hacia los árboles donde podía ver a unas hadas burlándose de él , pequeñas traidoras, Amy volvió a mirar al hombre mientras giraba su mano.- solo un minuto.
Con un pequeño movimiento de muñeca el viento seco a su visitante.
-Esto es a lo que se dedica la realeza, mojar transeúntes inocentes mientras todos están realizando los preparativos.
-Mucho ayuda el que no estorba.-respondió encogiéndose de hombros.-además si no se hubiese acercado tanto al lago no se habría mojado, señor...
-Roman.-El lobo tomó una de las manos del príncipe.- y no me habría acercado si no te hubiese visto; quería conocer a mi futuro esposo antes de la boda, no eres lo que esperaba.
Amy alejó su mano rápidamente, el hombre tenía un agarre fuerte y cálido, y se casaría con su hermano.
-Se confundió de persona, soy Amiel, usted se casara con mi hermano, el príncipe Emil.
Los ojos del lobo se volvieron fríos de repente.
-Oh.
El viento movía la túnica de Amy mientras él seguía mirando fijamente a su futuro cuñado.
-¡Alfa! .-Una joven mujer llegó corriendo al claro seguida por dos hombres más.-Tengo que informarle, el príncipe ha escapado con un grupo de vampiros.
La sangre de Amy se congeló, no, no, no, repetía una y otra vez en su mente.
La postura de Roman cambió de inmediato, su mandíbula se apretó y sus puños se cerraron con indignación.
-¿Cuándo?
-Más de cinco horas
El alfa se giró hacia Amy furioso
-Tu hermano huye y tu te burlas de mí, ¿esa es la forma de mantener una alianza príncipe Amile?
Amy negó rápidamente con la cabeza.
-¡Claro que no!, no sabía nada de esto.-Roman dio unos pasos hacia el, si daba un paso más chocaría con su cuerpo, el príncipe tuvo que levantar la cabeza para seguirlo mirando.
-¿Pero lo arreglarás?
-¿que?
-Tu, ¿te haras responsable?.-Roman levantó una mano y acarició suavemente la mejilla de Amy.-No me importa si eres tú o tu hermano, esta noche nuestros territorios se unieran.
Lo siguiente que supo es que estaba siendo arrastrado por un fuerte agarre hasta el palacio.
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¡Nueva historia!
Me emociona mucho volver a escribir, esta vez les traigo algo un poco diferente a lo que había hecho antes ¡Espero que les guste mucho y se animen a seguir este camino junto a mi!
Os mando un abrazo <3
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Bosque Azul (+18)
FantasyLas flores del cerezo brillaban más que nunca, las mariposas blancas coloreaban el paisaje y al fondo se podían escuchar a los gorriones cantando felices, el escenario ideal para una boda, si tan solo el novio no hubiese huido. Amiel, deberá tomar e...