Shameless ✦ Heejake

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Los chicos recibieron una invitación a un conocido programa de televisión sobre idols para poder entrevistarlos por su carrera, y otros temas variados, aceptando gustosos el asistir.

A lo largo de la emisión en vivo, los presentadores tenían planeado darle un reto a cada uno de los miembros del grupo. Los demás fueron cumpliendo los suyos, siendo el castaño el último en participar.

—Jake, ¿estás preparado? —Le preguntó uno de ellos, el recién nombrado asintió con fervor en respuesta—. Bien, ¿ves esos post-it en la mesa? —Volvió a asentir—. Tú reto consiste en colocarlos en las partes que más te gusten de uno de tus compañeros, no hay restricciones para ello.

—¿Puedo elegir a quién yo quiera?

—Claro, adelante.

Una sonrisa se dibujó en sus labios al escuchar la positiva, tomó los papelitos con una mano y caminó hacia la persona con la que tenía pensado usarlos.

Sus pies deteniéndose en Heeseung.

—Cierre los ojos, hyung. No quiero lastimarlo ni por accidente —Pidió gentil, sintiéndose un tanto embobado ante la pequeña curvatura que se instaló en los belfos ajenos mientras el dueño de éstos, acataba su orden.

Sin más, fue arrancado de una en una las diminutas y coloridas hojas para luego ir pegándolas en dónde su mente le dictaba; puso una en su cabello, dos en sus ojos, otra en su nariz, barbilla y mejillas, y el último que quedó, lo colocó en sus labios con total suavidad.

Puchereó al no tener más papeles que poner, sintiendo sus mejillas arder al darse cuenta de que había abarcado el rostro entero del pelinegro con los mismos en cuestión de minutos.

Heeseung rió por lo bajo al sentir como toda su cara estaba cubierta, lo encontraba tierno y gracioso en partes iguales.

—Vaya... ¿Tanto te gusto, Jake?

Susurró aquello, no olvidaba que estaban en televisión nacional.

—De hecho, me gusta aún más que eso. Es una pena que no hubieran suficientes post-it, faltaron muchos lugares por cubrir.

Y no mentía, a Jake le gustaba absolutamente todo del mayor. Si hubiese sido por él, habría llenado su cuerpo entero de aquellas notitas, sin dejar siquiera un solo espacio libre.