Capítulo extra 6. (Mérida y Erik)

36 3 0
                                    

Mérida

Durante del resto de los días y ese fin de semana intento borrar completamente de mi mente esa desconfianza que ha crecido en mi cuerpo sobre Erik. Aunque le lleguen mensajes a altas horas de la noche y no me diga quién es, aunque lleve el móvil pegado a él como una lapa y no lo suelte, y aunque el sábado por la mañana se haya vuelto a ir con sus amigos y dándome una excusa que no me parece nada verdadera. No sé por qué mi paranoia seguía para adelante si Erik cuando estaba en casa me trataba como siempre, pero el no saber que hacía fuera y que era lo que le llegaba al teléfono me llevaba por el camino de la amargura.

-¿Puedo ir contigo?.- no sé por qué se lo pregunté, no quería parecer tan desesperada, pero salió de mi boca mucho antes de yo haber pensado la pregunta. 

-¿Por qué?.- me respondió con otra pregunta y con el entrecejo fruncido. 

-Me apetece salir.- y me encogí de hombros queriendo quitarle la importancia que sentía que tenía que no me hubiera dado ni una respuesta ni otra. Es como si se hubiera puesto nervioso de repente. 

-Creía que ibas a estudiar.- y el ruidito de su móvil, que me decía que le había llegado un mensaje, me alteró más de lo que debería. 

-También necesito descansos. 

-Pues queda con tus amigas.- y su respuesta hizo crecer mucho más mi mosca detrás de la oreja. 

-¿No quieres que vaya contigo? ¿Por qué?.- y sin poder evitarlo, se lo pregunté sin ocultar ese cabreo que estaba apareciendo en mi cuerpo. 

-Solo quiero salir con mis amigos al igual que sales tú con las tuyas. Deberíamos hacer cosas por separado.- otro pitido salió de su teléfono. Y a mí se me llevaban los demonios al mezclarse ese sonido con su respuesta. 

-Tú has salido mucho esta semana y no te he dicho nada.- le recriminé.- Solo te estoy pidiendo de ir a tomarme algo contigo y tus amigos. Por Dios.- En ese momento Erik se pasó la mano por el pelo dejándome ver que se estaba poniendo cada vez más nervioso. Ahí me di cuenta de que me estaba ocultando algo.

-¿No puedes dejarme en paz por un segundo? No tenemos por qué hacer todo juntos.- me soltó notando como su enfado también iba en aumento. No tenía ni idea de por qué se estaba enfadando. No tenía motivos, yo sí. ¿Qué coño me estaba ocultando? O peor. ¿A quién?.

-Me cago en la leche. ¿Por qué es tan malo que quiera ir contigo?.- un nuevo mensaje, pero esta vez si que saca su teléfono del bolsillo delantero de los pantalones para mirar la pantalla. Mis nervios me estrangulan el estómago.- ¿Quién es?- y se lo pregunté rabiosa, sintiendo como los celos impregnaban las dos palabras y prácticamente todo mi cuerpo. 

-Nadie.- y se lo volvió a guardar en sus pantalones. Erik soltó un suspiro en ese momento, cansado y cabreado. Nervioso porque le veía cambiar su peso de una pierna a otra, pero no me daba la gana ser la tonta que se queda en casa esperando a que su novio vuelva de hacer a saber qué.- Mira, ya llego tarde. No voy a discutir. Luego, si quieres, lo hablamos, pero me tengo que ir. 

-¿Enserio te vas a ir dejándome aquí? Sabes que estoy enfadada, y los dos sabemos que es porque me estas escondiendo algo que no quieres que sepa. ¿Estás conociendo a alguien? ¿Hay otra?- y las palabras salieron a borbotones por mis labios sin yo poder retenerlas.

-¿Qué? ¡No!- de nuevo se pasó la mano por el pelo en señal de nerviosismo.- Y no entiendo esa manía tuya y esa necesidad de querer saberlo todo. No hay ninguna otra.- y me lo dijo muy enserio sin dejar de mirarme a los ojos, pero como seguía sin contarme nada no me lo creí.

-No te creo.- y me crucé de brazos para que viera lo cabreada que estaba.

-Mira, créete lo que quieras.- un nuevo mensaje.- Yo me voy. Tienes que dejar de hacer suposiciones y dejar de ver cosas donde no las hay. No sé en qué  momento te he dado motivos para que estés tan paranoica.- y dicho eso se giró y se fue hacia la puerta.- Luego vengo.- dijo antes de cerrar la puerta detrás de él dejándome plantada en medio del pasillo.

Que Empiece el baile.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora