Cortos Superrobin. [Finalizado]

Calor Inesperado

Había sucedido tan rápido que no se dieron cuenta cuando llegó.

Richard y Conner estaban en su apartamento viendo una pelicula, cuando el calor golpeó a Richard y ambos se sintieron abrumados de inmediato.

Antes de que se dieran cuenta, ambos estaban tirados en la alfombra, con sus sentidos al máximo, ambos tan necesitados que nisiquiera querían ir a la habitación.

Conner se posiciono arriba de del pequeño cuerpo de Richard, cubriéndolo casi por completo.

Richard olía tan bien, era obvio que estaba en celo. Conner estaba en trance mientras besaba suavemente los labios de su omega. Cuando sus labios se separaron, Richard expuso su cuello, mostrando la marca de reclamo que había dejado hace tanto tiempo en esa piel tan suave y clara. Rápidamente acarició el cuello de Richard con el suyo, oliéndolo. se sentían embriagados por las feromonas que cada uno liberaba y se mezclaban en la sala.

Antes de que ambos se dieran cuenta, toda su ropa fue rasgada y arrojada a distintas partes, dejando a ambos completamente desnudos. Conner estaba tan duro, sus instintos gritaban que necesitaba llenar a Richard, su compañero, lo más rápido posible y anudarlo. y no soltarlo hasta que estuvieran satisfechos.

Richard no se sintió diferente, quería a Conner dentro de él lo más rápido posible. Entonces, abrió sus piernas blanquecinas, revelando su apertura rosa. Richard estába tan mojado, con su lubricante natural saliendo de él, mostrando que su cuerpo estaba preparado para recibirlo completamente. Su pene también estaba duro, y lo acarició mientras esperaba a Conner.

Conner se inclinó hacia adelante y lentamente comenzó a insertar su enorme polla en la cálida entrada de Richard. Estaba tan mojado, lo que hizo que todo fuera mucho más fácil. Cuando todo estaba adentro, inmediatamente comenzó a empujar, para deleite de Richard.

Richard dejo escapar un fuerte gemido y, un segundo después, Conner sintió que las uñas de los dedos de Richard se enterraban profundamente en su espalda, pidiendo más. 

Mientras Conner empujaba con fuerza. Richard seguía rasguñando su espalda, gimiendo y gimiendo con cada movimiento. Estaba bajo un hechizo, cada movimiento, cada empuje siendo más embriagador que el anterior. Era como si Richard se estuviera deshaciendo lentamente, transformado en puro deseo primario cuando Conner golpeó todos sus puntos dulces y se estrelló contra sus paredes apretadas. Todo en su mente era placer, sumisión y deseo para que nunca terminara.

El sexo en su celo fue lo mejor, los moretones que se comenzaban a formar en esa piel tan clara valieron la pena al final.

Sus respiraciones era irregulares, se formaban gotas de sudor por todo el pequeño cuerpo de Richard. Y en el momento en que sintió que el ritmo de sus embestidas cambió ligeramente, supo que su compañero estaba cerca.

Un minuto después, Conner liberó toneladas de semen espeso dentro de él, que fue lo que hizo que Richard cayera al límite, estaba lleno hasta el borde con su cálido fluido. El enorme nudo de Conner se infló rápidamente, ambos quedaron pegados y lo estarían por al menos media hora.

Cuando finalmente tuvieron tiempo de recuperar el aliento, abrazarse y luego limpiar el piso y decudiero mudarse a la habitación y acomodarse en su cómoda cama antes de que llegara la próxima gran ola de calor y tuvieran que arreglar todo su desastre nuevamente.

Sin dudas tener acercamiento cuando uno estaba en calor era lo mejor y ambos no se negarían a disfrutarlo al máximo.

FIN
Listo aquí una nueva actualización. Bye