Capítulo 31

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Emilio

El teléfono de Ari comienza a sonar con el sonido de mensajes mientras ella está en la ducha, tomo el teléfono entre mis manos debatiendo si debería mirar o no. Opto por lo primero, mientras lo desbloqueo mi corazón palpita rápidamente.

Es un número desconocido, no lo tiene registrado de inmediato me doy cuenta que es un número de Alemania.

Ella sabe que aun estas en casa, tengo mucho miedo. Prometí que no volvería a llamarte, pero ellos tienen a mi hija, por favor ayúdame. Solo debes irte, salvaras tres vidas. Te salvaras tú, tu hijo y también estarás salvando a mi hija. Por favor sal de esa casa. Deja a tu novio, no sabes de lo que ella es capaz.

Comienzo a llamar al número de teléfono y suena apagado, reenvió el mensaje a mi teléfono y lo borro del teléfono de Ariana. Bloqueo el número, las llamadas y los mensajes internacionales y vuelvo a dejar el teléfono donde estaba.

Envió un mensaje al abogado con los datos del mensaje, el promete nuevamente ponerme al tanto de todo.

Pasan los días y aun no tengo noticias sobre la llamada anterior y esto me está carcomiendo la mente.

Esta noche cenaremos en casa de Santiago, por fin pude convencer a Ariana de salir de casa, el que ella este asustada dice mucho de la situación.

-amor ya estoy lista – dice apareciendo con un vestido maternal floreado, se ve hermosa.

-te ves hermosa nena – digo mientras beso sus labios.

Llevamos días sin hacer el amor, ya no me besa como antes y sé que en cualquier momento me dirá algo para hacerme retroceder. Solo estoy esperando el momento indicado para dejar salir que ya se todo.

Cuando llegamos a casa de Santiago todo el mundo está ahí, la hermana de federico abraza a Ariana mientras le besa la cara con alegría. También esta Laura la amiga de Liliana, mientras entramos escucho el chillido de las amigas de Ari asomarse por la cocina.

Todas corren abrazarla mientras yo me fijo en el sujeto que está apoyado en la puerta sonriendo, Rhys.

Justo cuando estoy por acercarme Santiago me toca el hombro.

-Emilio ¿podemos hablar en mi despacho? – dice mientras me guía hacia allí – no te preocupes, Liliana la tendrá vigilada. Nadie en esta casa la dejara sola, ni la dejara salir.

Eso me tranquiliza, camino con él y entro mientras el cierra la puerta.

- ¿Qué hace él aquí? – pregunto enojado – Ariana quiere escapar con Rhys.

-Rhys no vino por ella, él vino a advertirnos lo que está pasando. No se la llevara a ningún lado.

Hablamos de la información que ha logrado juntar sobre lo que está pasando y me informa que la psicóloga de la cárcel está involucrada con las llamadas y mensajes. Que han secuestrado a su hija de cinco años, están tratando de ayudarla sin que termine en una tragedia por lo que tendremos que hacer un plan.

Un golpe en la puerta nos hace quedar en silencio

-adelante – dice Santiago

-lamento interrumpir, ¿pero podemos hablar? – dice Rhys mientras espera a que Santiago le dé el visto bueno.

Entra y se sienta en una silla a mi lado.

-hola – dice estirando su mano – lamento todo lo que está pasando.

-gracias – digo mientras suelto su mano y me concentro en cualquier cosa menos en él.

- ¿Cuál es el plan? – pregunta después de un rato

La Hija Del JefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora