La Bella y la Bestia

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La bella bestia...

Todos le llamaban monstruo, todos le criticaban y en su mayoría le temían solo por ser diferente.

Él jamás mató a nadie, no le hizo daño a nadie más allá de esa personalidad déspota, la misma que le llevó a convertirse en esa bestia exterior que hoy muestra.

Ella sin embargo era...normal

Humana

Y si algo la diferenciaba del resto era su manera de pensar...

¿Por qué los seres humanos tienen la manía de destruir?

¿Por qué debían juzgar lo diferente?

¿Por qué ella admiraba lo que otros despreciaban?

Todos creía que la bestia debía cambiar, todos pensaban que lo mejor sería que se volviese...normal

Pero ella no...

Para Bella él era perfecto, las personas se asustaban por su intimidante físico, a ella le gustaba.

Él ya no era malo, él ya había cambiado, se había vuelto generoso y amable...¿Por qué aún no lo aceptaban?

Y ahí el problema.

Uno nunca es suficiente para las personas equivocadas. Sin importar cuanto lo intentes siempre verán un defecto en tí...y ella estaba cansada de eso.

Estaba cansada de intentar explicarle a todos que a quien llamaban bestia, era en realidad un ser maravilloso.  Estaba cansada de verlo esforzarse por cambiar cada día un poco más, cuando en realidad no valía la pena hacerlo, al menos no por las razones por las que él lo hacía.

Si quería cambiar debía hacerlo por él mismo, no por un montón de hipócritas que si no fuese porque no es como ellos , le adularían debido a las riquezas que posee.

Así fue como tomó la decisión que cambiaría su vida para siempre...

Ella ya lo amaba, ella podría besarle y romper el hechizo, pero, así solo les daría la razón a los que lo despreciaban.

Ellos no tenía razón.

Él no debía cambiar, ellos eran quienes debía aprender a aceptar las diferencias...las peculiaridades de cada quien.

Por ello lo hizo...por eso arrancó pétalo a pétalo de la rosa, incluso pinchándose un dedo con una de sus espinas.

La puerta de la recámara fue abierta con agresividad, la madera resonó contra el concreto de la pared y el sonido de la respiración alterada, perteneciente a la enorme criatura asomada al umbral, abarcó la estancia.

– ¡¿Pero qué demonios has hecho?!– Gruñó la bestia mirando horrorizado la flor

– No quiero que cambies– le miró afligida, con la cabeza inclinada hacia un lado

– ¿De qué hablas? ¿Cómo que no?

– Te amo así, me enamoré de tí siendo lo que eres...no tienes porqué cambiar solo por la gente

La castaña fue acercándose despacio, estiró sus manos para acunar el rostro de su acompañante...

– Yo era gente antes de ser esto, Bella– miró hacia el suelo, observó los pétalos...ya no había remedio

Los corazones de ambos latían fuerte...el sentimiento era mutuo, tanto el amor, como el miedo a lo que pasaría...

– ¿Querías ser humano de nuevo?– Preguntó con temor

– En realidad me he acostumbrado a ser así, pero , te quería a tí, conmigo...Dime, Bella, como mantendrás una relación con una bestia– Sus ojos se encontraron, él estaba angustiado...ella solo sonrió dulcemente

– Ya te lo dije , no quiero que cambies...encontraremos la manera de seguir así– Entonces algo vino a su mente– Espera..¿Cómo supiste que algo ocurría?

Él rió...algo que la desconcertó por completo

– Estaba en el salón y...todos han vuelto– Dijo feliz envolviendo la pequeña cintura de la chica con sus grandes manos, pero ella no entendió

– ¿Qué?

– Pues que todos son humanos de nuevo.

– No entiendo ¿Cómo pasó?

Él pasó a estar divertido...

– En parte supongo que el hechizo se rompió, te enamoraste , más no me besaste antes de que la rosa perdiese su último pétalo

La felicidad en la cara de la bestia hizo que no pudiera resistirse más y se alzó de puntitas para besarle.

Él se dejó, se inclinó y la apretó a su cuerpo intentando no lastimarla por su fuerza...la besó como hace ya mucho quería hacerlo.

Fue un beso de amor...con pasión incluida.

Y entonces pasó, se convirtió...

Bella se convirtió en bestia...

En una bella bestia.

...

"Salud🥂, por esas personas que aceptan lo diferente sin intentar cambiarlo o juzgarlo"

¿Y si no acaba así?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora