XII

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Su corazón palpitaba muy ferozmente, realmente se encontraba muy intranquilo y nervioso al no tenerlo a su lado, no sabía como la estaba pasando, si tendría hambre, cansancio, angustia, no podía soportarlo.

-Lou, tranquilo, estás poniendo a todos muy nerviosos- Habló Niall desde la cama.

Volteó a verlo con un puchero y los ojos caídos.

-Es que no sé como se encuentre Harry, necesito saber algo por lo menos- Respondió apresurado.

-Lou, solo fue a una conferencia en la empresa de su padre, está todo menos en peligro, tranquilo-.

-¿Y por qué no me lo dijo a mi personalmente? No puede hacer simplemente lo que le pegue la gana sin pensar en mí-.

-Louis, primero que nada, estabas dormido, claramente Harry jamás se le ocurriría despertarte, por él esperaría a que despertaras para empezar la conferencia, pero comentó que era muy urgente, segundo, eso fue hace tiempo ya no debe tardar, igual puedes marcarle si gustas para saber cómo está y tercero, está bien que compartan un lazo telepático, pero eso tampoco implica que no pueda hacer algo sin ti-.

La puerta se abre de repente revelando una alta figura con cabello largo y rizado.

-Louis...- Sólo fue lo único que pudo pronunciar antes de que el pequeño se lanzara abrazarlo con fuerza.

-Te extrañé demasiado, no podía con la angustia-.

-Me sentía igual que tú, estaba demasiado preocupado por saber si estabas bien o no, me doy cuenta de que no puedo hacer algo sin que no estés tú a mi lado-.

El beta se pone serio, arruga su nariz y suelta un ligero bufido.

-Claramente me doy cuenta que jamás entenderé a los alfas y omegas en cuestión de relaciones- Dice Niall poniendo sus ojos en blanco.

Ambos se separan del abrazo y se miran mutuamente.

-Adivina- Menciona Harry con una ligera sonrisa en sus labios.

-Dime-.

-Te tengo una sorpresa-.

Los ojos del omega tintinean de emoción al escucharlo decir eso.

-¿Qué es?- Se apresura a preguntar con suma emoción.

-Nos vamos de viaje- Suelta con alegría.

Tenía planeado todo, se irían una semana completa a Alaska, lo llevaría a conocer la nieve y enseñarlo a esquiar, de solo pensar en lo emocionante que sería poder pasar tanto tiempo con su omega, le palpitaba el cuerpo de un sentimiento más grande que la alegría.

-¡Esquiaremos y haremos ángeles de nieve!-Exclamó.

Por otra parte, una de las comisuras de los labios de Louis cayó formando una mueca la cual el alfa detectó de inmediato.

Toda la emoción que tenía se desvaneció en cuestión de segundos.

-No te gusta la idea, verdad- Afirmó contemplando el rostro del más pequeño.

Rápidamente reaccionó y negó repetidas veces con la cabeza, cayendo en cuenta de lo que había hecho.

-No, no Harry, nada de eso- Respondió algo exaltado.

Ahora se sentía estúpido por haber arruinado la sorpresa que Harry le tenía, no fue su intención, es solo que tenía años que no viajaba, mucho menos a otro país en otro continente, sería una locura enorme.

También temía por todos sus amigos ¿Qué sería de ellos cuándo no estuvieran ellos dos?

-Es solo que, me tomaste por sorpresa, claro que me encanta la idea de poder salir contigo-.

Mi Omega -Larry Stylinson-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora