La historia agrícola del hermano feo

Capítulo 44

"¡Cómodo, tan cómodo, vamos, hagámoslo de nuevo!"

Lo que siguió fue una ráfaga de sonidos que hizo que las orejas de Xu Qing se sonrojaran: "¿Qué pasa?". Li Changfeng abrazó suavemente a Xu Qing y también dejó caer la mano que le cubría la boca.

Xu Qing giró la cabeza para mirar a Li Changfeng y dijo sin palabras: "Volvamos". Li Changfeng miró al otro lado y negó con la cabeza a Xu Qing: "No, si nos vamos ahora, se enterarán, te taparé los oídos, no escuches".

Xu Qing no tuvo más remedio que enterrar la cabeza frente al pecho de Li Changfeng, tratando de evitar el sonido del viento que soplaba en sus oídos. Pero cuanto más intentaba evitar el sonido, más fuerte se hacía.

Li Changfeng miró a Xu Qing, que estaba enterrado en sus brazos como un avestruz y sus ojos miraron a la pareja de tortolitos salvajes, emitiendo un peligroso brillo.

No tardaron mucho en cesar los sonidos de allí, Xu Qing suspiró ligeramente en su corazón, pensó en el tiempo que tardaría, no era ni una fracción del tiempo que tardó Changfeng en terminar.

"Ya casi está".

Xu Qing escuchó el sonido del vestir que venía de allí, no pasó mucho tiempo hasta que escuchó los pasos de los dos que se iban, "¡Por fin!" Xu Qing se levantó y movió sus músculos y huesos, Li Changfeng acarició con cuidado algunas de las hierbas y polvos pegados al cuerpo de Xu Qing, "Siento las molestias".

Xu Qing puso los ojos en blanco y se giró para mirar a Li Changfeng, que seguía acariciando el polvo por él. "En serio, es la primera vez que veo algo así", se quedó un poco corto.

"¿Lo sientes mucho?" Viendo la peligrosa mirada de Li Changfeng, Xu Qing no pudo decir nada más, sólo pudo sonreír y resoplar: "Todavía tenemos que ir a buscar las secuoyas, ¡vamos!"

Cuando Li Changfeng y los demás acababan de salir del lugar donde los dos estaban teniendo sexo, una figura familiar apareció detrás de ellos, era uno de los "artistas", Luo Jiao, que originalmente sólo quería volver para ver si había algo que no había dejado cuidadosamente, pero no quería encontrar a alguien que no debía.

"Son los dos de la parte de atrás de la montaña, ese cuerpo de puerta a puerta no está mal", pero, visto lo que hizo, no estaría tan contento de rendirse.

Por último, Xu Qing y los demás llevaron un árbol de rama amarga de tamaño medio a la casa y tras dejar que la iniciativa de Li Changfeng se limpiara, Xu Qing empapó la ropa de los dos hombres en la palangana y la lavó.

"¿Hay alguien en casa? Soy Xie Yu".

"¡Hermano Xiao Yu!" Xu Qing abrió la puerta del patio y vio a Xie Ge'er, cuyo cuerpo se había recuperado en gran medida, sonriéndole mientras sostenía un objeto.

"Toma, echa un vistazo, ¿te gusta?" Xie Ge'er empujó el objeto en sus brazos hacia Xu Qing, "¡¡¡Un cachorro!!!"

Xu Qing casi dio un salto de alegría, ¡era un pequeño cachorro negro! "¡Me encanta! ¡Me encanta! ¡Gracias Hermano Pequeño Yu!" Xu Qing tomó con cuidado al cachorro en brazos, que acababa de abrir los ojos y sus ojos estaban llenos de amor, él era el que más quería a los perros y a los gatos.

Cuando Xie vio que a Xu Qing le gustaba de verdad, se sintió aliviado, temía que a Xu Qing no le gustara.

Xu Qing asintió felizmente: "¡El hermano Xiao Yu ha pensado en todo! Entra rápido, estaba tan contento que me olvidé de dejarte entrar".

Xie Ge'er negó con la cabeza: "No hace falta, tengo que volver a cocinar, Ama y Padre están ocupados hoy en el campo, no puedo ayudar mucho, el arroz tiene que estar listo, me voy, ven a jugar cuando estés libre".