𝑫𝒐𝒓𝒂 𝑴𝒂𝒂𝒓 [𝑶𝒏𝒍𝒚𝑶𝒏𝒆𝑶𝒇]

Pt. 3

—Y bien, ¿Por qué te uniste a esta universidad? —Pregunta por curiosidad Kyubjn.
—La universidad en la que estaba no contaba los recursos para poder desarrollar mi trabajo al máximo.
—Ohhh, ya veo...

Ambos se encontraban de camino a el estacionamiento después de que Kyubin llegase con Yoojung. Había comenzado el plan de Kyubin.

—¿Este es tu carro? —Pregunta Yoojung.
—Exacto. ¿Está lindo? Jajaja.
—Bastante diría yo. ¿Eres rico? —Dice mientras admira el auto.
—Jajaja nah, nada de eso, es solo que mi padre tiene una empresa de cosméticos y a pesar de no ser tan grande tenemos una buena cantidad de dinero.
—Entonces si eres rico.
—Algo...

Procedieron a entrar al auto pero Kyubin se tomó la molestia de abrir la puerta para Yoojung. "¿Gracias?" Dijo un Yoojung que no estaba acostumbrado a tal trato.

El camino fué algo callado. A pesar de la amabilidad de Kyubin, Yoojung no podía abrirse tan fácilmente. Era entendible, había pasado por una amarga experiencia en su primer día.

—¿Vives con tus padres? —Dijo Kyubin con esperanzas de poder romper el hielo.
—No... Vivo solo en un departamento a 30 minutos de aquí. —Respondió.
—Ya veo. ¿Cómo haces dinero? ¿Trabajas? ¿Te dan dinero?... —Seguía con sus preguntas. Quería conocerlo bien.
—Trabajo a medio tiempo como mesero en un restaurante.
—¿Cuál? Claro, si es que puedo saber.—Se llama "Byredo". ¿Lo conoces?
—¿"Byredo"? Ese es el nombre de una fragancia, ¿Cierto?
—Exacto —Asintió con la cabeza—. Se llama así debido a que queremos cautivar a los clientes con los olores de la comida. Usando especias, etc...
—Wow, sabes bastante jajaja.
—Es solo mi deber como empleado de ahí jaja, no es para tanto. —Dice agachando la mirada.
—Pues ante mis ojos parece que sabes bastante. De hecho te emocionas hablando de eso jajaja. Te ves lindo.
—¿P-Perdón? —Dijo Yoojung un tanto incómodo.
—Oh nono tranquilo no lo tomes a mal. Intentaba dar un cumplido. Lo siento.
—N-No es eso. Es solo que no estoy acostumbrado a cumplidos así... —Apartó la mirada, haciendo notar unas mejillas enrojecidas.

Todo estaba saliendo a la perfección.

Siguieron el camino hasta llegar finalmente a la zona de departamentos de Yoojung. Kyubin estaba viendo con detalle cada calle, señalamiento, edificio y cualquier cosa que le hiciese recordar el camino.

—Bueno, parece que hemos llegado.
—S-Sí. Muchas gracias enserio, te debo una.
—Oh permíteme. —Salió del auto primero para, al igual que en el estacionamiento de la universidad, ahorrarle el trabajo a Yoojung de tener que abrir o cerrar la puerta.
—Gracias jaja...

"¿Te acompaño a tu departamento?". Dijo Kyubin quién no quería perder ni un detalle. Quería saberlo absolutamente todo.
Yoojung aceptó aunque algo incómodo.

—Oh por cierto, ¿No tenías que ir al restaurante hoy? —Preguntó Kyubin.
—Hoy tengo el día libre. Por eso no te dije que me llevaras ahí jajaja.
—Así te ves mejor. Eso quería ver. Tenía miedo de que estuvieras deprimido o algo así, por lo que es bueno verte sonreír. Tienes una sonrisa muy linda.
—G-Gracias —Dijo está vez con una cara completamente enrojecida—. ¿Por qué eres tan amable conmigo?
—"¿Por qué?" Dices, pues simplemente quiero llevarme bien con alguien nuevo que parece no ser respaldado por el grupo. ¿Está mal?
—No no, de hecho gracias. Hablar contigo sinceramente me hizo mucho bien. Creo que sin tí estaría perdido en estos momentos jajaja.

Yoojung estaba bromeando y sonriendo más. Era una perfecta señal.

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Llegaron a la puerta del departamento de Yoojung, quién, tal vez para sorpresa no vivía en un lugar feo. "Ser mesero en un restaurante fino no parece ser tan malo". Pensó Kyubin al ver el lobby y los pasillos del lugar.

—Muchas gracias enserio por todo. Adiós. —Dijo Yoojung quién estaba cerrando la puerta de su departamento.
—¡Espera! —Gritó Kyubin—. ¿Puedo visitar el restaurante donde trabajas?
—Oh... —Se tomó unos segundos para pensar—. Claro, me gustaría.

Cerró la puerta y se le vió bastante animado, contento de haber tenido alguien tan amable y alguien que le hizo sentir mejor.

Kyubin por otro lado salió sonriente de ahí. Estaba consiguiendo su cometido: "Si quiero a mi musa, tengo que enamorarlo".

Continuará...