EL DESPERTAR DE LA MAGIA ANTIGUA - Dramione

Capítulo 15.- Volviendo a verlo

Habíamos cruzado el portal a Neverland, la tierra de las fantasías y magia pura, muchos cuentos y leyendas se escriben sobre esta tierra, la tierra perdida de la magia, la tierra de las hadas y elfos, el mundo de los sueños, Tir Na Nog, Narnia, entre otros, pero para mí era mi casa, el lugar en el que nací, era desconcertante, desde el momento en que entré a ese mundo, todo era diferente, una gran corriente de poder y magia pulsó en mis venas, el aire comenzó a revolotear a mi alrededor, un cosquilleo pulsaba en mi piel, me sentía poderosa, pero a la vez algo había en el aire, algo que sabía a óxido en mi lengua y dejaba incomodidad, seguíamos en una parte de un bosque, pero no hallaba la fuente de ese malestar.

- Es la magia negra que contamina el bosque salvaje - dice Ares y comprendo dónde estamos - démonos prisa antes de que una bestia decida hacernos su alimento. - asiento y comenzamos a caminar.

El bosque salvaje como lo dice su nombre es una tierra que, sí está bajo los dominios de nuestro reino, pero es un lugar neutro en el que las bestias peligrosas podían cazar libremente, cualquiera que viniera a estas tierras sabe que corre peligro, sólo el soberano escogido por la magia podía ser mediador entre las bestias y los otros seres, pues la magia lo declarará el más poderoso que haría que las bestias tuvieran cuidado, aquí es la ley de la jungla, solo el más fuerte sobrevive.

Caminamos por lo profundo del bosque, era de noche y los susurros de animales y aves nos acompañaban en el silencio, caminamos durante horas y cuando el sol se puso sobre nosotros decidimos descansar un poco.

- Descansaremos un rato, queda un poco para salir del bosque y entrar al territorio de los elfos - dice Ares - allí solicitaremos ayuda para llegar a la costa del Sur, la bahía lunar, ahí se encuentra nuestro campamento temporal mientras estaba en el mundo sin magia. - ante eso bufo.

- El mundo sin magia tiene más magia de lo que esperaba - digo sentándome en un tronco caído.

- Pero no se compara con la magia palpable aquí hermana - argumenta Ares y me mira fijamente - debo hacer que te quiten el glamour que te pusieron hace 9 años - menciona y levanto una ceja mientras cruzo mis brazos.

- Podría decir lo mismo Ares, recuerdo que eras más encantador y ese rostro no revela la sangre de los Neverland - digo y toco mi rostro - definitivamente será una sorpresa verme después de tantos años a ver esta cara - digo un poco melancólica, pues Ares se parecía un poco a papá con este aspecto, pero yo, definitivamente debería ser una copia de mamá en diferentes colores.

- Estoy seguro que mamá estaría orgullosa de saber que tienes su belleza - murmura un poco ares cabizbajo y hago una mueca ante el dolor que se instala en mi pecho.

- Hey - lo llamo tratando de cambiar de tema - encontré un cofre cerrado en la antigua casa de mis... de donde me dejaste - le digo corrigiendo a decir padres - está sellado y ahora que lo recuerdo contiene algo mío ¿no? - le digo y él asiente.

- Puse ahí todo lo relacionado con nuestra familia, tus joyas y tu emblema como parte de la realeza - dijo Ares.

- ¿Vamos a hablar sobre lo que está sucediendo aquí o intentaré mantenerme en la ignorancia? - le pregunto con una ceja alzada y entrecerrando los ojos observando su reacción. Ares parece pensarlo un momento y suspira.

- Algo está envenenando la magia, con el sacrificio de mamá siendo una Neverland y la magia familiar todo pudo estabilizarse hasta hace dos años, sin embargo seguimos investigando lo que lo causa, espíritus menores siguen siendo dominados por esta "contaminación", el pueblo de las hadas ha tenido que retirarse de sus tierras un poco, ahora se encuentran con los elfos en un hogar temporal hasta acabar esta contaminación, hasta ahora guardias y caballeros se mantienen custodiando las ciudades con humanos o mercenarios se adentran a este bosque para parar ataques de las bestias, - dice y fruncí el ceño.