•mentiras y verdades•

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•[Danganronpa 2]•

Cuando Hinata llegó esa mañana al restaurante, se encontró con una situación que no se esperaba en absoluto, y mira que le habían pasado muchas cosas raras desde que llegó a la isla.

-Oye, Owari...¿estás bien? - Dijo el castaño al ver a su amiga llorando.

-Uhhh...ughhh...

Owari no hablaba, simplemente seguía llorando. Hinata se imaginaba que debía ser por lo que le había pasado a Nidai el día anterior, al fin y al cabo estaba muy herido al haber salvado a Owari del ataque de Monokuma; pero aún así, nunca antes había visto a la castaña llorando y le pareció muy extraño.

-B-buenos d-días, Hinata-san... - Dijo tímidamente Tsumiki, para llamar la atención del contrario.

-Oh, ¡buenos días, Tsumiki! ¿Sabes qué le pasa a Owari?

-¡Lo que le pasa es que Nidai ha muerto! ¡Está tan dolorida que no lo puede soportar! Sin embargo, ¡yo estoy genial! De todos modos, no podía soportar a ese chico - Exclamó repentinamente Komaeda, que había estado todo ese tiempo allí en silencio.

-¿Que Nidai ha muerto? ¿Quién te ha dicho eso?

-¿Que quién me lo ha dicho? Koko-san, ¡por supuesto! ¡Él siempre lo sabe todo!

-¿¡Quién narices es Koko!?

-¡Buenos días, señoras y señores! ¿Cómo han amanecido? - De repente irrumpió en la sala Mioda, hablando de manera más formal que de costumbre.

-Ibuki, ¿tú también estás rara? - Dijo Hinata, ya desesperado por la situación.

-Mioda-san, ¡ten cuidado! ¡Hinata-kun está pensando en comerte, me lo acaba de decir! - Exclamó Komaeda de golpe.

-Hinata-san, se lo suplico, no me coma. Lo lamento pero no soy apetecible.

-¿¡Pero qué estás diciendo!? ¡Si yo no quiero comerme a Ibuki! Komaeda, ¿qué narices te ocurre? Sé que eres raro, ¿pero hasta este punto?

Al cabo de los minutos, aparecieron el resto de personas, confundidos por la situación. Querían preguntarles a las 2 únicas personas que estaban actuando normal que qué ocurría, pero una voz tímida les interrumpió.

-¡H-Hinata-san! - Dijo Tsumiki. Hinata se giró para ver a la que acababa de llamarlo - C-creo que Owari-san, Mioda-san y Komaeda-san están e-enfermos...L-le he tocado la frente a Owari-san y está ardiendo...

Nada más oír esto, Hinata le tocó la frente a Komaeda y después a Mioda, para comprobar lo que acaba de decir la pelimorada.

-Dios, ¡tienes razón! ¿Qué les pasa?

-Hinata-kun, ¡eso no es verdad! ¡Yo me encuentro perfectamente! ¡No siento ni una pizca de dolor! - Gritó Komaeda ante las palabras del castaño.

De repente, una risa familiar resonó por todo el restaurante, haciendo que todos los presentes se preocupasen.

-Upupupupupupupupupupupupu - Rio Monokuma, que parecía divertirse con la situación.

-¡Monokuma! Esto debe ser obra tuya, ¿verdad? ¿Qué les has hecho a estos 3? - Preguntó Hinata, agitado.

-¿Yo? Upupupu...¡simplemente he traído un nuevo incentivo! El motivo por el que estos 3 idiotas están actuando así es porque han padecido la desesperatitis, nada más y nada menos.

-¿D-desesperatitis? N-no conozco esa enfermedad... - Dijo la enfermera, con un tono triste.

-¿Ni siquiera eres útil para eso? ¿Y tú te haces llamar "Enfermera Definitiva"? Menudo malgasto de talento - Soltó Saionji, atacando a Tsumiki.

Comfort Zone •[Komahina]•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora