Mustafá y Hurrem, un amor prohibido.

Capítulo 3

El sultán pide que todos se retiren de sus aposentos menos Hurrem lo que provocó los celos enfermos de Mustafá quien quería a Hurrem solo para él, luego de haberla tenido en su cama no quería que nadie más estuviera con ella, ni siquiera su legítimo esposo... Mustafá pidió hablar con Hurrem sobre la Sultana Mahidevran para calmar la guerra que existía entre esas dos...El Sultán Suleiman aceptó y pidió que Hurrem regresara para que pasaran juntos. Mustafá esclavo del deseo y amor durmió a la Sultana cargándola hasta sus aposentos, él la tenía frágil y débil ante él... siguió sus instintos y tomó a Hurrem, se despertó rápidamente al sentir el aroma varonil de Mustafá
¡Qué haces! -gritó Hurrem...
Mustafá la beso y le dijo que ella era propiedad de él y no permitiría que su padre volviera a tenerla...
Nadie lo hacía como el príncipe, era tan bueno en la cama que lograba el Hurrem se olvide que era una mujer casada...envueltos en una nube de lujuria Mustafá liberó dentro de su amada a sus hijos. Dejándola cansada Hurrem durmió esta noche con el hijo de su esposo.
Suleiman se había quedado dormido esperando a su Sultana, pero ella nunca llegó...
El canto de los pájaros, el sol naciente anunciaba que había amanecido, Mustafá despertó junto al cálido cuerpo de Hurrem la besó y la despertó dedicándole un verso corto que había escrito para ella...
Cielo mío, reina de mi corazón
Dueña de mis victorias
Soy tu prisionero y pierdo la razón
La mirar tus ojos de esmeraldas
Hurrem, con sus mejillas enrojecidas abrazó a su amado, pero, ¡El Sultán!
Hurrem se vistió rápidamente y sacó a Mustafá de sus aposentos, se deslizó por la columna llegando al Jardín.
Mahidevran vio a Mustafá en el Jardín y se preguntó ¿Cómo había llegado? Si no lo vio salir y no estaba en sus aposentos...en su mente nunca imaginó que su hijo pasó la noche con su rival...
El Sultán Suleiman se despertó, al no ver a Hurrem a su lado se preguntó por su paradero...el cual era incierto... comenzó va sospechar sobre ella y su posible amante...pero la verdadera pregunta era ¿Quién era el amante de Hurrem? Podía ser cualquiera incluso Ibrahim Pasha pero nunca imaginaria que su propio hijo mantenía una relación con su esposa.
Mustafá estaba feliz porque Hurrem era suya y él era de ella, el joven príncipe había tenido su primera vez con la mujer que ama, ¡Qué dicha!
Hurrem fue a los aposentos del Sultán a disculparse poniendo como excusa que su pequeño hijo estaba inquieto y se quedó dormida junto a él...El sultán no tan convencido le dijo que pasaría toda la tarde con ella, que se preparara y se pusiera más bella de lo que ya era... Así Hurrem fue a bañarse, el agua corría por su piel esperando ella que así se limpiara el pecado de haberse acostado con el hijo de su esposo, pero, cuando pensaba en él, su cuerpo se estremecía deseando que Mustafá la haga suya de nuevo, su boca era la de un profeta pues Mustafá llegó, tomó a Hurrem y le dijo:
- ¿Necesitas ayuda querida Sultana?Hurrem solo jadeó su nombre y le dijo que sí... Las manos de Mustafá eran fuertes y grandes, con esas manos pasó el jabón por todo el cuerpo de la sultana, sus piernas, sus brazos su abdomen y así mismo la besaba en el cuello, cuando Hurrem presa del miedo intentó irse Mustafá la tomó por el cuello y la hizo suya nuevamente, una vez saciada la lujuria de ambos ella corrió a secarse y prepararse pues debía estar con el Sultán... Mustafá presa de los celos idearía un plan para alejar a Hurrem de su padre.