Capítulo 2

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Austin

Ciertamente nunca eh sido el típico ser humano que da a conocer todo lo bueno que tiene y no estaba hablando del dinero, si no de mis cualidades, cómo saber entregar el corazón cuando realmente se lo ganan, en fin otros puntos de vista.
Yo estaba en la puerta esperando a Marco un amigo que hace algunos meses había conocido y que supo apoyarme de buena manera sin esperar nada a cambio, aunque siendo franco debo decir y no negaré que pensaba que tal vez quería algo conmigo al principio ya que él habia mencionado que era gay pero muy buen amigo, el caso aquí, era que yo me encontraba afuera de su casa esperando a que me pudiera ayudar a comunicarme con alguien que estuviera cerca de la persona que yo en estos instantes amaba, al menos eso pensaba y por la cual yo estaba preocupado
-Hola Austin -pronunció mi nombre entre sus labios el alto pelinegro de piel clara
-Hola Marcó -correspondí a su saludo
-Estás listo para realizar la llamada? -preguntó
Sinceramente no negaré que no estaba listo para escuchar lo que sea que me dijera aquella persona que yo desconocía, pero no me iba a quedar así sabiendo que no respondía a ningún mensaje o llamada que yo le realizaba a la rubia así que asentí con la cabeza
-Bien -respondió, el pequeño aparato empezó a sonar haciéndonos saber que la llamada estaba en proceso de ser contestada cuando en eso, la voz dulce y suave de una pequeña mujercita contestó al saludo de aquel amigo que estaba a mi lado, me quedé corto y muy perdido ante aquella voz que salía por el diminuto aparato, mi amigo estuvo hablando con ella acerca de todo, hasta que su carácter al pedir que yo me comunicara con ella, me hizo darme cuenta que era muy tonta, de alguna manera me hizo reir con lo dicho antes mencionado, será que quería hablar conmigo o en verdad estaba molesta porque yo era el afectado y no le respondía, al final de cuentas, al finalizar la llamada me di cuenta que esa voz dulce y tierna me tenia sedado, no la podia dejar de escuchar en mi cabeza, tal vez ella tenia algo especial que iba a encajar a la perfección conmigo, al final yo estaba jodido desde que nací y con lo de aquella rubia que me habia terminado (pero yo aun no lo dejaba en claro) estaba aún más jodido. Ahora me daba cuenta que no quería conocer a alguien más que ya estaba arto de esto, de la mierda llamado <<AMOR>>
Tenía el número de aquella chica de voz dulce, tal vez podia preguntarle más acerca de la rubia, si sabia o conocía algo más, así que le escribí, a la vez nos desviamos un poco del tema hasta que me quedé dormido, mi intención era saber que más podia averiguar de Ally la chica que yo queria seguir haciéndome a la idea de que seguia siendo mi novia aunque al día siguiente las cosas cambiaron de alguna manera para bien...

Eran las 5:00am la hora en la que mi cuerpo automáticamente despertaba, así que me levanté de la cama y me vestí para salir a trabajar, todo estaba bien yo tenia un pequeño puesto asegurado vendiendo productos, que sinceramente era de mi tío, alguien a quien yo veia cómo un papá, y ese era el caso tenia trabajo seguro al menos por ahora, mientras no me fuera a drogar por culpa de esa puta a la que yo llamaba NOVIA hasta él día de ayer, pero tenia que tener fuerza de voluntad, así que lo único bueno que hice para controlar esta perra ansiedad fue hablarle a ella, Morgan, la chica de voz dulce y pensamiento tonto que me habló la noche anterior diciendo que estaba molesta, porque yo solo estaba mandando a mi amigo a preguntarle las cosas que a mi me interesaban saber, JAJAJA mierda.
Llamé a la pequeña y respondió de nuevo de una manera dulce y gentil cómo la noche anterior
-Bueno? -dijo suavemente y algo extrañada por mi llamada
-Hola Morgan -respondí en segundos, algo me decía qur debía hablar con ella no para vengarme por lo que aquella me habia hecho, si no porque algo me acercaba a esa chica tan despistada y de alguna manera, grosera y tonta
-Ahh Hola Austin -añadió a la llamada.
En ese momento no sabia que diablos pensar o decir, si colgar o seguir hablando con aquella persona que se encontraba en la linea, cortar la llamada seria un tanto descortés y eso me importaba una reverenda mierda, pero no queria hacerlo, queria hablar con ella, así que proseguí
-Que haces? Como has estado? - fue lo único que salió de mi boca
-Bien muy bien, gracias Austin y tú que tal? -utilizó mis palabras
-No tan bien como quisiera -dije sin pensar

Aquella persona se interesó en mi, tuvo el valor de preguntar que era lo que me sucedia y porque me sentía así, me dio la confianza de decirle todo y asi fue, dije lo que tenia, lo que sentia y no me juzgó, al contrario, dijo que yo podía y por primera vez, en toda mi jodida vida, me hizo creer en mi, tal vez Kayla Morgan era eso, un baúl de emociones que te harían caer y subir del cielo en segundos, quería conocer el fondo de aquel hermoso baúl

La Vida De KaylaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora