Ayden Gerago y la llegada de las Tinieblas

Capítulo#3 La respuesta y el chico

Ayden y su acompañante brillante salieron de la casa y se dirigieron al bosque a plena noche, el cielo estaba cubierto de grandes y espesas nubes de color gris oscuro que tapaban a la luna sin dejár escapar la más miníma luz, pero no había problema ya que la acompañante que tenía Ayden iluminaba demasiado. Habían dejado la aldea atrás y poco a poco se adentraban en el inmenso y espeso bosque, Ayden estaba temblando y no por miedo sino por frío ya que en el bosque la temperatura bajaba mucho más; tanto que a veces nevaba aunque fuera verano.

-Hemos llegado Ayden-Dijo la luz azul.

-¿Dónde estamos?-Preguntó Ayden con curiosidad.

-Estamos en el bosque de Pretch, es hermoso ¿No crees?- Le dijo la luz.

-Sí lo es, ¿pero?... ¿Qué hacemos aquí y a mitad de la noche?- Preguntó Ayden con más curiosidad y forzando la vista para ver más allá del bosque.

-¿No recuerdas, la inscripción que apareció en tu espada?- Le preguntó la luz a la chica.

-¡Oh!, sí la recuerdo. Me felicitiraron por mi cumpleaños número 14-Le dijo Ayden pareciendo una tonta.

-¡ESA NO!-Dijo severamente la luz.

Ayden se encogió de hombros tras la reacción de su acompañante, entonces se pusó a recordar qué erá lo que decía la primera frase. Hubo un silencio y después Ayden hablo:

-Decía algo sobre una respuesta y que alguien me estaría esperando. Espera...¿Acaso tú eres la que tiene la respuesta para mí?-Dijo pensativa.

-Ven, sigueme y no te distraígas con nada-Le dijo la luz mientras se adentraba más en el bosque.

Ayden siguió a la luz que iba muy rápido y apenas podía seguirle el paso, cuando de pronto había llegado a una gran laguna muy hermosa y había mucha luz, ¿pero dónde quedó su mensajera?. Ayden la buscaba por todas las partes de ése lugar pero no la encontraba así que se dio por vencida y se sentó en la orilla de esa gran y hermosa laguna muy brillante. Ayden tocó la serena agua y al hacer eso algo la iluminó, ella volteo y ahí estaba la luz azul que le dijo:-¡¿Dónde te metisté niña?! Te dije que no te distragueras con nada en éste bosque, puede ser peligroso-Un poco molesta.

-Lo siento... Pero de repente habías desaparecido-Le dijo Ayden apenada, luego dio un suspiró y dijo:-¿Qué es lo que me dirás?-Con gran curiosidad.

-Mm... Por dónde empezamos..., veamos. Cómo ya sabes tú eres la Heredera prometida, eso significa qué tienes que salvar éste mundo y el Sagrado de las Tinieblas y te estarás preguntando que son las Tinieblas, ¿verdad?-Dijo la luz.

Ayden sólo asintió y nada más. Y la luz prosiguió.

-Bien. Las Tinieblas es un ejercito comandado por tres demonios muy poderosos, los seres que viste en el bosque hoy en la tarde se llaman "Seres Oscuros" que son demonios extramadamente peligrosos para cualquiera, incluso para un dios ya que absorben el alma de los demás hasta matarlos especialmente las almas jóvenes, puras e inocentes. Tú misión es matar a la bestia mayor de uno de los tres demonios más poderosos, el dragón Ryteckgo, que se encuentra en la Montaña de la Muerte; sí no lo haces todo será mucho peor y las Tinieblas cumplirán su objetivo de  dominar el Mundo Terrenal y el Mundo Sagrado. Recuerda, sólo tú podrás detener todo esto.

-Pero sólo tengo una espada, ¿cómo piensas que podría matar a un dragón con solo una espada?-Dijo Ayden inconforme.

-Sólo hazlo, sí confías en ti lo lograrás no lo olvides-Le dijo la luz-¡Buena suerte Ayden! Pronto nos volveremos a ver pequeña Heredera. Y después la luz desapareció y todo quedó en una gran oscuridad.