bebé, el cielo está en tus ojos ~ chuuves

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Chuu estaba teniendo enormes dudas sobre la fiesta que tenía que tirar, cuatro horas antes de que se suponía todo el mundo llegaría. Había estado sola en su enorme casa durante dos días y había estado planeando la fiesta desde ayer. Literalmente salió de compras en una tienda de abarrotes llamada Tesco o algo así.

Compró 200 dolares de patatas fritas, alcohol (sí, estaba orgullosa de la capacidad de poder comprar alcohol ella sola) y otros aperitivos.

El salón y la cocina ahora estaban llenos de aperitivos y bebidas, al igual que había visto a Kim Lip hacer en sus fiestas. No se preocupó por la música porque sabía que Kim Lip traería su memoria USB etiquetada como 'música de fiesta' y la conectaría al sistema estéreo.

Chuu estaba emocionada y nerviosa al mismo tiempo, y dio gracias a Dios por la idea de Kim Lip de hacer una previa antes de la fiesta, porque no hubiera sabido que hacer si sus amigos (los podía llamar oficialmente amigos) no hubieran aparecido una hora antes.

Estaba vestida con una camisa a rayas blancas y azules, una falda larga azul marino y converse blancas. Tenía el pelo planchado y suelto y llevaba colonia Channel.

"Jichuu necesitas relajarte, a la gente le va a gustar tu fiesta." Kim Lip le aseguró y le dio palmadas a la menor en su espalda.

"Sí, pero ¿y la basura de la casa?"

"Estoy ofendida que pienses tan humilde de mis amigos."

Chuu miró a Yves, que había abierto una cerveza para ella. Llevaba una camisa blanca Nirvana y jeans ajustados negros. Por no hablar de la chaqueta de jeans que siempre ataba a su cintura delgada.

"¿Quieres un poco?" Preguntó Yves cuando llegó junto a Chuu, poniendo un brazo alrededor de sus hombros.

Chuu se tensó y miró alrededor de la habitación, pero nadie parecía prestarle realmente atención. Kim Lip y Jinsoul estaban ocupadas con la música; Heejin y Hyunjin estaban hablando con Yeojin y Sunoo.

"Uh... no, gracias. Mi plan no es hincharme esta noche." Dijo Chuu.

"Pero la única persona que probablemente va a verte sin camiseta esta noche voy a ser yo, y no me importa." Yves respondió e hizo que Chuu se sintiera mejor por dentro.

A pesar de que nunca lo admitiría, en realidad le gustaba la sensación de ser querida. Buscada por Yves, para ser más específica.

"¿Cuándo van a estar tus padres de vuelta?"

"El viernes. ¿Por qué?"

"Sólo preguntaba."

"No estás pensando en quedarte más tiempo, ¿verdad?" Preguntó Chuu, y en realidad quería que Yves se quedara.

"Al igual que tú no quieres eso." Yves susurró al oído y Chuu se estremeció porque su aliento era caliente. Sería una noche interesante, la rubia estaba segura de eso.

Eran las diez y media y la sala y la cocina estaban llenas de gente de la escuela de Kim Lip y a Chuu no le importaba. Le gustaba que, literalmente, nadie tuviera un problema con ella (al contrario al que solía tener con ellos) y nadie juzgara a nadie. Había chicas besándose, chicas y chicos besándose y un chico vestido con una falda y tacones. Y a nadie le importa una mierda. Chuu estaba completamente abrumada por él.

Heejin y Hyunjin estaban besándose en la esquina y Chuu terminó en la cocina, sirviéndose un trago de vodka. Se preguntó si debía encontrar a Yves y tal vez... ¿tal vez podrían besarse también?

¿Qué pasa si alguien las veía? ¿Qué pasa si alguien lo publicaba?

Luego se recordó a sí mismo que había literalmente dos chicas casi follando en el sofá y nadie se inmutó.

Después de que Chuu bebió el tiro de vodka, hizo su camino de regreso a la sala, donde se veía Yves. La encontró bailando con otra mujer y se sintió un poco celosa porque la mayor tenía que ponerle atención a ella.

Así que después de tener una pequeña charla con dos sujetos, caminó entre los cuerpos sudorosos para llegar a Yves. La música era muy alta, golpeando en sus oídos y podía haber jurado que el suelo vibraba.

Cuando por fin llegó a la castaña, la chica mayor tenía a la otra chica apretada contra su pecho y ella se frotaba su entrepierna contra su culo. Chuu quería que Yves quisiera su culo, y SU culo solamente.

Así que se acercó un paso más y puso una mano sobre la espalda baja de Yves, que volvió la cabeza y sonrió cuando vio a Chuu. Empujó a la otra fuera de ella y envolvió su brazo derecho alrededor de la cintura de la rubia, tirando de ella contra su pecho.
"Hola." Dijo y Chuu no respondió, simplemente se dio la vuelta y se apretó contra la espalda de Yves.
"¿En que estamos?" Yves bromeó pero agarró las caderas de Chuu de todos modos.