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Dos años desde que lo conocí

Año 2022. Fue el principio del fin. Recuerdo que estaba en casa, confinada por positivo en covid. Realmente me encontraba bastante mal como para pensar en él, pero aún así, cuando mis pulmones me daban un respiro, mi cabeza se iba. Era noche vieja. Laura y yo estábamos confinadas, cada una en nuestras casas. Segura estoy de que semejante Navidad no la olvidaremos nunca, aunque pasen años. Ahora me río, pero en ese momento, mientras miraba la tele y veía a Rufus caminar alrededor mio como llevaba los últimos días haciéndolo, cogí el móvil y le envié un mensaje a Laura.

No recuerdo mucho las tonterías que le puse, pero si recuerdo una frase muy importante. "De las pocas cosas que le agradezco al 2021 es de tenerte más cerca en mi vida y me gustaría seguir teniéndote en 2022"

También le envié uno a Marta, pues este año fue uno de mis mayores apoyos en todo, pero fue mucho más sencillo. " Te quiero en mi 2022 petarda"

Después de eso, miré hacia la ventana pues últimamente era la única salida que tenía, asomar la cabeza y ahí estaban mis padres, detrás de unas rejas, como siempre, sin dejarme de lado.

Estos días me habían dado mucho que pensar y llegué a la conclusión de que Jose se marcharía con el 2021. Me permití llorar una vez más por todo y después de las campanadas, brindé sola, bueno, mi perro me miraba y dije al aire

-Te vas con el 2021 amor.

No sé si esperaba que en algún momento de 2022 dejase de sentir o no tuviera ganas de llorar, claro está que eso era imposible, pues no somos interruptores pero me prometí a mi misma que no miraría atrás y que viviría mi vida, independientemente de que en mi corazón había escrito con sangre su nombre.

También pensé que llegaría alguien que lo borrase pero creo que eso nunca sucederá pues nunca sentí nada parecido por nadie.

Hoy, vivo con el corazón apagado, no queriendo sentir. No puedo dejarme sentir y que todo aquello que siento por él acompañado de la decepción y el enfado salgan pues me llevarían de vuelta al pozo y está vez será mucho más profundo.

Muchas veces mi madre me dice que en la vida no hay 3 amores, que hay 4 y siendo sincera,creo que eso es verdad.

El primero es el que te enseña a querer, en mi caso fue el primer novio.

El segundo es al que te aferras pensando que es para ti pero te hace mucho daño, en mi caso fue Carlos.

El último es aquel que llega sin que te des cuenta y que te acepta con todos los defectos. Aquel que vuelve a ilusionarte pero esta vez de una manera mucho más sana.

Para mi, entre el segundo y el último amor de nuestra vida hay otro, que sería el tercero. Aquel que te hace replantearte toda tu existencia, aquel que te hace pensar si en algun momento de tu vida quisiste a alguien o solo es a él. Aquel que te lleva a los rincones más oscuros de tu ser y por el cuál no te importaria vivir ahí y renunciar a todo con tal de tenerlo. Aquel que te enseña que de amor nadie se muere, pues yo estaría muerta y que recibiendo migajas nadie es feliz. Aquel que siempre buscarás en cualquier mirada, en cualquier caricia, beso o palabra, pero nunca encontrarás pues no será él.

A pesar de todo, a mi me ha enseñado una lección muy valiosa y es que valgo tanto que lo merezco todo. No merezco migajas ni mucho menos engaños. Merezco todo aquello que doy y yo, lo doy todo. Y este 2022 voy a por todo y voy con todo.

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⏰ Última actualización: Jan 24, 2022 ⏰

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