31. Qué se joda todo.

165 8 1
                                    


ALICE.

Ya había pasado algunos días desde que regresamos a Londres, me la había pasado en el estudio con Carlos y Oscar ya que queríamos formar una disquera solo para Dj's.
Garreth se la pasaba en prácticas ya que pronto iniciarían los juegos Can se había ido a Turquia y mis demás hermanos seguían en Los Angeles. Había estado hablando mucho con Niall por mensaje o algunas veces antes de dormir me llamaba para que pudiera dormir bien, segun él, aunque tenía razón, era extraño que mis pesadilla habían disminuido y más cuando él me llamaba.
Hoy estábamos en el estudio haciendo algunas audiciones para los chicos que queríamos en nuestra disquera, entonces sonó mi móvil, le di los controles a Carlos y me aleje para contestar.

—Señor Horan, es muy temprano para ir a dormir ¿no?— sonreí.

—Si lo se señorita Ellis, solo que me preguntaba si ¿Quiciera ir a comer hoy conmigo?—

—¿Me está invitando a una cita?—

—No es una cita— reímos.

—¿Acaso me se esta burlando de mi señor Horan?—

—No, solo estoy contestando con unas palabras que me habías dicho anteriormente — rió— Pero para que veas que no me burlo, entonces diré que si, si es una cita y pasaré por ti a tu casa en eso de las tres de la tarde—

—Pero que mandon es usted— reí— Solo que no estoy en casa —

—¿Oh no? ¿Entonces dime en donde te veo?—

—Estoy en los estudios SET, ¿te molesta venir hasta acá?—

—No es ninguna molestia, nos vemos ahí—

—Bien, nos vemos, ciao— colgué y camine hacia los chicos con una gran sonrisa en mi rostro.

—¿Y por qué tan contenta?– me vio Oscar.

—Por nada— trate de quitar mi sonrisa.

—Es obvio Oscar, esa sonrisa tiene nombre y apellido, Niall Horan— hablo Carlos.

—Estais locos— reí— Hoy terminamos a las tres ¿vale?—

—No preguntare porque, así que por mí esta perfecto—

Reímos y terminamos de escuchar las audiciones que nos habían mandando y escogimos como a dos chicos que nos habían parecido extraordinarios.
Llego las tres de la tarde, Oascar y Carlos se acababan de ir mientras yo cerraba mi estudio y salía del lugar, en cuánto cruce la gran puerta divisé la gran camioneta de Niall y a él bajando de ella.

—Hola señor Horan— lo salude y me abrió la puerta de copiloto.

—¿Qué tal señorita Ellis?— sonrió cerró la puerta y se dirigió al lugar del piloto.

—¿A dónde iremos Niall?— pregunte en cuanto entendió la camioneta.

—Bueno pensaba en un lugar muy lindo de aquí, tengo un amigo que tiene un restaurante en el que hace una comida estupenda—

—Perfecto—

El camino fue una charla tranquila, le conté sobre las audiciones y que estábamos reclutando a chicos para nuestro grupo y también los posibles nombres para la disquera, también él me contó sobre sus ensayos y que estaba pensando en ya comenzar a escribir su otro álbum, también que ya quería terminar estos conciertos para dedicarse a escribir.
Unos treinta minutos más tarde estábamos estacionados fuera del restaurante, entramos y el lugar era lindo.

—Señor Horan, me alegro de tenerlo aquí— dijo el chico que recibía.

—Hola Ben, me alegra verte ¿tienes mesa para dos en la zona privada?—

Falling Down N.H (Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora