Destino o casualidad(Kakashi Hatake)

El informe

Hola, aquí traigo mi fanfic con el sensei albino mas sexy de todos XD De verdad lo amo. Si te gusta Kakashi espero que también te guste mi historia, es totalmente de mi invención por lo tanto cualquier cosa que quieras copiar deberás pedir permiso primero (o no pero te arriesgas a que me entere ) en serio, no tendré problemas en aconsejar y/o ayudar si se da el caso . ^^ ¡A disfrutar!

Primero que nada les presento a la OC protagonista

Nombre: Nanami Kuramoto
Edad: 16
Villa: Konoha
Familia: La única familia que le queda es su madrina Tsunade.
Apariencia: tiene el pelo largo por la cintura que le cae en forma de tirabuzón, es de un color cobrizo claro muy bonito que encaja perfectamente con sus grandes ojos pardo-verdosos y su piel blanca ligeramente oscurecida por el sol. Es bajita, mide 1,58 m pero tiene un buen cuerpo con curvas donde deben estar.

Punto de vista de Nana

Llegué de la última misión hecha polvo, asique decidí darme un largo baño relajante en las aguas termales.
-Ahhh... esto es tan gratificante...- Suspiré al notar el contacto del agua caliente sobre mi piel desnuda.
Estaba sola a pesar de ser unos baños mixtos, pero no me extrañó debido a que era muy temprano. ¿Qué que hacía en unos baños mixtos? Muy simple, mi presupuesto no alcanzaba para unos femeninos.
Solté un suspiro tratando de despejar mi mente cuando escuché a alguien entrar, "Genial, adiós tranquilidad. Ya llegan los pervertidos..." Pensé pero estaba equivocada, se trataba del dueño que venía a decirme que alguien me buscaba en la entrada.
-¿Y cómo demonios sabían dónde estaba? No me van a dejar tranquila un rato ¿verdad, Ryu?- Le dije al dueño a lo que él respondió con una sonrisa que parecía decir "Vamos, tú puedes" suspiré dirigiéndome a los vestuarios para ponerme mi ropa. No me di demasiada prisa porque me dije a mi misma que si era Naruto no podría molestarse por hacerle esperar un poco, al fin y al cabo estaba acostumbrado a esperar a Kakashi-sensei.
Salí del vestuario con mi pelo recogido en un moño y un kimono limpio que me había traído de casa para reemplazar el uniforme ninja. Mi sorpresa llegó cuando en la entrada había un ANBU con máscara de jabalí que me miraba fijamente, enseguida comprendí cómo me habían encontrado.
-Señorita Kuramoto, me han encomendado la misión de guiarla al castillo con la Hokage. Sígame. - Su voz sonaba como la de un robot, sin emociones y por eso los ANBU me producían cierto pavor, Tsunade sabía lo qué hacía cuando envía a uno a por mí.
Me giré hacia Ryu entregándole el dinero que le debía.
-Quédatelo, sólo has estado 10 minutos dentro. Espero que vuelvas otro día Nana-chan.- dijo restándole importancia al asunto mientras me sonreía amablemente como siempre, yo suspiré y me giré hacia el hombre de forma cautelosa, sabía que llevarle la contraria a Ryu no era una opción válida. Seguí al ANBU sin decir ni una sola palabra hasta llegar al castillo.
Llamé a la puerta sin ganas bajo la atenta mirada de aquél hombre con máscara que me ponía de los nervios.
-Adelante.-la voz de la rubia resonó dentro de la sala.
Abrí la puerta aún seguida por el ANBU y encontré a Tsunade sentada en su habitual postura mirándome fijamente. Me aclaré la garganta antes de abrir la boca pero no dije nada porque me vi interrumpida.
-Puedes retirarte, déjanos solas.- Dijo ella al hombre, él asintió y se fue.
-Siéntate Nana. Por favor.- obedecí inmediatamente, no me convenía enfadarla con mis bobadas.
-¿Qué quería Hokage-sama?- pregunté tímidamente.
-Nana... ¿Cuántas veces voy a tener que decirte que me tutees?- Me golpeé mentalmente por no haberlo recordado.
- Discúlpame, es la costumbre Tsunade-sama.- Ella asintió y se colocó en una postura más cómoda.
-¿Recuerdas qué hace unos meses mandé hacer un informe sobre tu clan?-
-Sí, siento no saber nada pero yo me enteré el mismo día que uste... digo, qué tú. Pero... ¿Por qué me recuerdas eso ahora?-
-Me acaba de llegar, por desgracia eres la única que queda viva y aún están buscando pero...- sacó una carpeta del escritorio.- aquí tienes, puedes llevártelo para leerlo pero mañana tienes que venir a devolverlo. - Sonrió amablemente, me levanté y recogí la carpeta un poco dudosa, "¿De verdad quiero saber mi pasado?" me pregunté mentalmente, agité la cabeza eliminando esas ideas de mi cabeza y la abrí allí mismo.
-No tienes por qué leerlo aquí, ya he dicho que puedes llevártelo.- asentí y cerré la carpeta.
-¿Necesitas algo más?-
-No, puedes retirarte. Ah, y siento haberte interrumpido.- no sé porqué ella sabía que me había interrumpido pero tampoco quise preguntar
-No hay problema Tsunade-sama, gracias por la información.-Eso fue lo último que dije antes de salir del despacho y bajar las escaleras.
Caminaba hacia mi apartamento cuando pasé junto a Ichiraku Ramen y una voz gritó mi nombre justo antes de abordarme por detrás en un abrazo de oso.
-¡NA-NA-CHAN! ¿Dónde estabas? Te hemos buscado por todas partes.-
-Naruto, bájame por favor.- le supliqué.
El muchacho obedeció a mi petición bajándome enseguida al suelo, le miré y me sonrió de forma boba como solía hacer a menudo. Pude observar que dentro del local estaba el equipo entero, incluido Kakashi-sensei.
Entré en el local siguiendo al rubio y me senté en el único sitio libre, entre nuestro sensei y mi mejor amigo, dejé la carpeta a mi lado y pedí una ración de ramen de cerdo.
-Oh, Nanami-chan hacía mucho que no venías por aquí.- dijo Teuchi, el dueño, justo antes de servirme un tazón de humeante y delicioso Ramen casero.
-Bueno, no he tenido demasiado dinero este mes asique no pude venir... - dije mientras cogía unos palillos dispuesta a comer.
-No importa, mira te regalamos un vale por 2 raciones gratis. Así podrás venir con tu novio- intervino Ayame, la hija del dueño.
-No hace falta Ayame, ya sabes que a Yuki-kun no le gusta el ramen...- ella insistió y colocó los cupones encima del mostrador. Ayame y yo siempre fuimos muy buenas amigas, me agradaba el hecho de que no tratase mal a Naruto.
Empecé a comer lentamente mi ramen degustando ese maravilloso sabor que solo Teuchi sabía lograr.
-Nana-chan, ¿Qué es eso?- Me preguntó el rubio señalando la carpeta cuando estaba a punto de terminar mi comida.
-E-esto...Nada, no es nada que deba interesarte.- Kakashi noto mi nerviosismo y antes de que pudiese hacer nada cogió la carpeta.
-¿Esta es una de las carpetas que utilizan en la torre para archivar los informes?-
-Sí, es cierto. Es como las que tiene Tsunade-sama en su despacho-Dijo Sakura.
-Tsunade-sama me dio permiso, es más casi me obligó. - El albino me miró dudando de la veracidad de mis palabras- Si quieres ve y pregúntaselo pero me duele mucho saber que no confías en mí.- Dicho eso le arranqué la carpeta de las manos y me fui de allí totalmente enfadada con la cabeza echando humo. Pude escuchar suspirar a mi sensei justo antes de que yo desapareciese doblando la esquina.

Nos vemos en el siguiente!!!! Ah, casi se me olvida... La serie Naruto no me pertence, es propiedad intelectual del genio Masashi Kishimoto ^^