A la mañana siguiente intente levantarme temprano para salir a correr, por supuesto que no lo hice, estar de vacaciones es la mejor sensación del mundo, y más cuando despiertas entre sábanas suaves y te das cuenta de que no tendrías que tender la cama, me desperté algo así como las 11 de la mañana, pero decidí levantarme de la cama hasta la 1 de la tarde, realmente estaba agotada, tome el libro que había dejado a la mitad ayer al aterrizar y decidí leer unas cuantas páginas, nunca se me ha dado eso de la concentración.
Cuando sentí que ya no podía estar más tiempo quieta, me levante de la cama, me puse unos shorts de mezclilla, un top negro, mis clásicos converse negros y me dispuse a dar un recorrido a la zona.
Salí a recorrer el lugar, me sentía libre, y no en un sentido de droga, fiesta y sexo si no en un modo de realización no necesitaba esas cosas para divertirme.
Las vistas de la ciudad son realmente preciosas, capture bastantes fotos, la mayoría con gente saturada, pero le dio vida a la imagen.
Después de turistear un rato, y comprar algunas postales y recuerdos para mi familia y amigos, me dispuse a buscar un sitio donde comer en frente de la playa, ya que quedaba cerca mi hotel.
Llegué a la playa, con los pies palpitando, me saqué los zapatos y decidí sentarme en la orilla, con los pies remojando mientras leía un poco con mis audífonos puestos.<este habia sido mi sueño desde que era una niña, y ahora lo estaba cumpliendo> Me dije a mi misma mientras apreciaba el atardecer.
Cuando de pronto sentí una mirada, mire de reojo hacia atrás para descubrir que un chico particularmente conocido me miraba, me levante de un brinco y me dirigí hacia él a paso rápido, mientras me sacaba el audífono alcancé a distinguir que me hablaba.-Wow creo que realmente te guste-Contesto descaradamente, como mencioné ¿qué se creía?
-¿Me estás siguiendo?- Exigí val ver que se veía tan seguro hablando con una desconocida
-Pienso que yo debería preguntar lo mismo- Dijo en un tono algo coqueto. A la luz del sol se veía un poco más bronceado, en su cabello castaño tenía algunos rayos rubios que resaltaban por el reflejo del sol
-¿Trabajas aquí?- Pregunte señalando el establecimiento de pizza frente al mar
-Si justo enfrente- declaró mirando hacia el establecimiento. Tenía una pinta acogedora, hasta acá llegaba el aroma de masa caliente
hubo una pausa incómoda, ya que ninguno de los dos sabía qué contestar.
-Bueno supongo que debería regresar al trabajo- finalmente habló.
Asentí ligeramente con la cabeza, realmente era complicado que mantuviéramos la conversación.
-Si, yo también debería seguir.
-¿Piensas recorrer todo el lugar?
-Ese es el plan.
-Podría darte un tour.- Dijo inocentemente.
-Estoy bien.- Contesté intentando terminar la conversación.
-¿Segura? Conozco unos cuantos sitios interesantes.- Insisto.
-Prefiero conocerlos por mi misma.- Dije, ese chico tarde o temprano acabaría con mi paciencia.
-De acuerdo, pero sabes dónde estoy cualquier cosa, cariño.-
-Aún no nos conocemos y ya me pones apodos, eso habla muy bien de ti.- Contesté ya un poco fastidiada por la situación.
-Tú lo dijiste "aún".
ESTÁS LEYENDO
Un verano más
RomanceSi alguien me hubiera dicho que cuando lo conociera a él iba a desordenar y cambiar todos los planes en mi mundo nunca lo hubiera creído, porque él es como una brisa fresca después de un día caloroso, él me hacía sentir que todo conmigo estaba bien...