Die For You (EreMika)

Capitulo III

Un nuevo día iniciaba para Eren, los primeros rayos del sol comenzaban a iluminar a lo lejos en el horizonte, desde su ventana tenía una gran vista de la ciudad de Liberio, ciudad en la cuál había estado los últimos meses.

Desde que abandono su hogar hace cuatro años Eren no dejo de viajar, terminó aprovechándose de su estabilidad económica, ya que tras la muerte de Akiko, Eren heredó una buena parte de la fortuna Ackerman.

En un principio Eren no quería tocar ese dinero, se sentía culpable de la muerte de su madre adoptiva. Recuerda que ni siquiera asistió al funeral, mucho menos estuvo presente en el entierro. Se enteró por medio de Levi que Akiko había asegurado su futuro con una cuenta bancaria exorbitante, necesitando más de una vida para gastar todo ese dinero.

En su momento, cuando Eren recibió la noticia por parte de Levi, no supo cómo reaccionar, su futuro se había resuelto de manera económica, pero eso pasaba a segundo plano después de la manera en como había llegado a ese punto, heredar toda una fortuna a costa de la muerte de su madre. No era algo justo para Eren, el habría preferido renunciar a todo eso por tenerla de vuelta. Aunque después de una conversación con Levi, en donde esté le sugirió que lo mejor era que se fuera lejos, así Eren podría aclarar su mente y superar la muerte de Akiko, además Mikasa estaría más tranquila y tendría más paz para vivir su duelo.
Al final Eren acepto la sugerencia de Levi, pidiéndole que se encargará del trámite legal para que pudiese disponer de la fortuna.

En ese lapso de tiempo Eren solo hablo una vez con Mikasa, la conversación tuvo lugar un día después del entierro de su madre. En esa ocasión Mikasa le pidió que no la dejase sola, entre lágrimas le imploró que superarán su dolor juntos, Mikasa le repitió hasta el cansancio que lo que había pasado no fue culpa de ninguno de los dos, ella creía que su amor lograría superar ese momento de dolor y al pasar del tiempo las personas de su círculo social verían con normalidad su relación, así ellos finalmente serían libres de vivir su amor.

- Por favor, mírame, Eren -Mikasa tomo entre sus manos el rostro de su amado, podía notar esos iris verdes inundados de lágrimas- Estoy aquí contigo, estamos juntos en esto, mi amor -

Las lágrimas brotaban de sus ojos, estaban rojos de tanto llorar, en ese momento el dolor que sentía solo podía ser comparado con la muerte de Carla.

- De verdad lo siento, no era mi intención, te lo juro Mikasa, yo no quería que muriera, yo no quería matar a nuestra...-No pudo terminar ya que se vio interrumpido por un beso de Mikasa-

-Basta Eren, no quiero escucharte decir eso- Mikasa comenzó a llorar tambien - no quiero que te culpes, ambos sabíamos que mamá no se encontraba bien, fue un accidente -

Con las manos aún en el rostro de Eren, con las yemas de sus dedos, trato de retirar las lágrimas que mojaban sus mejillas. Viéndolo fijamente a los ojos.

- Eren, se que es difícil para ti, también lo es para mí, pero deberemos ser fuertes, verás que juntos saldremos adelante, no será fácil, pero se que todo pasara. Verás que el rumbo de nuestras vidas se tornará claro otra vez, tan claro como el cielo azul y despejado de la primavera. - Acercó la frente de Eren a la suya sin romper el contacto visual - No pienso abandonarte y se que tú tampoco lo harás. Dime, ¿Quieres ir a nuestra cabaña? Podemos pasar unos días alejados de todo, ¿Que dices?, ¿Quieres ir a nuestro hogar?. -

En aquel momento Eren no le otorgó una respuesta clara a Mikasa, solo le menciono que necesitaba dias para pensar, lo último que le dijo fue que la amaba con todo su ser y que la decisión que el tomaría sería buscando lo mejor para ella. Fue así como decidió dejar la mansión Ackerman, pasando un par de días en su cabaña secreta en la que el y Mikasa se veían a escondidas.
Durante esos días recibió la noticia de su herencia y teniendo la conversación con Levi donde esté le convenció de irse lejos.