Eʟ Sᴜʟᴛᴀɴ Tᴏᴍʟɪɴsᴏɴ - L.S.(Omegaverse)

𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 15

Ediz (Harry)

-Dime, ¿Qué quieres de mi?—Le dije mirándolo.

-Quiero que seas obediente Ediz, que te sometas.—Me dijo.

-¿Qué quieres decir?—Le pregunté.

-Haz lo que te digo y no seas terco, ¿Entiendes?—Me miró serio.—No será difícil.

-¿Me tengo que someter… A ti?—Lo miré.—¿Por qué?

-No a mi.—Me dijo.—A la sultana Michael, si haces lo que te digo Ediz… Te prometo que tus problemas se acabarán para siempre.

-¿De qué estás hablando?—Le dije perdiendo la poca paciencia que tenía.—No comprendo.

-Ven al palacio.—Dijo.—Parate frente a la gente y besa el dobladillo del vestido de toda la familia real, también besa el dobladillo de la Sultana Michael y le pedirán perdón.

Lo miré casi gruñendo, venía a este palacio con aires de grandeza, me ponía condiciones y aparte… ¿Pedirle perdón a ese Omega por algo que no hice?

-No hay nada que pensar Ediz.—Me dijo al ver que no respondía.—Te estoy abriendo las puertas del palacio, ¿Acaso no querías eso?

-No comprendo Luke, me expulsaron y no puedo ingresar al palacio.—Le dije siendo obvio.—¿Cómo me llevarás de regreso?

-No te preocupes, déjamelo a mí.—Me dijo despreocupado.

-¿Por qué te intereso?—Le dije.—¿No estabas feliz cuando me expulsaron del palacio?

-No me importas tú Ediz.—Me miró.—Nunca me importaras, debes saber que no significas nada para mí… Debes entender que no lo estoy haciendo por ti.

-¿Entonces por quien?—Le pregunté.

-Necesito una respuesta ahora, no puedo esperar todo el día.—Me dijo exigiendome.—¿Quieres ir o no?

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Louis

-Su majestad.—Hizo una reverencia Elena.

-Señorita Elena.—Me acerque sonriendo a ella.—Cuentame, ¿Cómo has estado?, Hace tiempo que no te veo.

-Me encuentro bien, gracias Allah.—Me dijo con una pequeña sonrisa.—Y le rezó por su salud.

-Se que quizá fuí injusto contigo.—Le dije mirándola.—Y que te he lastimado muchas veces, quizá Allah no me otorga el éxito.

-Sultán, nunca me he quejado de usted y nunca lo haré.—Me dijo mirándome.—Nunca estuve enfadada, ¿Por qué lo estaría?, Solo no quería meterme en su camino, solo quería que fuera feliz y verlo sonreír. Esto es lo que Allah eligió, yo no podría darle un hijo y entonces escogí mi destino, estoy convencida de que solo la muerte puede separarnos su majestad.

-Sentemonos, acompáñame.—Le dije sintiendo ese dolor tan fuerte de nuevo.

Se sentó frente a mi, nunca olvidaré los bellos momentos que pase con Elena, es una mujer muy hermosa y maravillosa que valía demasiado.

-No se que le sucede a usted.—Me dijo mirándome.—Hace tiempo que no se nada de su vida, pero lo único que sé es que tiene un gran corazón, no debe culparse a sí mismo… Nunca sería injusto con nadie.

-Si yo no soy el problema…—La mire sintiéndome culpable.—¿Quién lo es Elena?, Puedes decírmelo abiertamente.

-Michael y Ediz lo aman.—Me dijo.—Las sultanas siempre lo respetaron mucho… No tengo duda alguna, Allah le otorgará a ambos una vida larga y saludable… Le dieron lo que usted desea, hijos. Lo que yo no pude darle.—Podía ver el dolor en sus bellos ojos.—No tengo ese control, no pude convertirme en su compañera, no pude compartir sus sueños, fui una estúpida… No pude ver el futuro como usted y nos distanciamos y nos separamos.