; Efímero [Adrienette] (Re- Escritura)

II

Marinette pasó la noche reflexionando sobre sus sentimientos y la misteriosa conexión que sentía con el chico rubio de sus sueños. A medida que examinaba sus bocetos, trató de recordar cada detalle que pudiera haber influido en la creación de su personaje imaginario.

Al día siguiente, Marinette llegó al colegio llena de intriga y curiosidad. El concurso de moda organizado por Gabriel Agreste se había convertido en el tema principal entre sus amigos. Todos estaban emocionados y hablaban de sus ideas y diseños para el evento. Sin embargo, Marinette se sentía algo inquieta.

Durante las clases, su mente divagaba y su mirada se perdía en la lejanía. Alya, siempre atenta a los estados de ánimo de su amiga, notó su preocupación y decidió hablar con ella durante el receso.

"Marinette, ¿qué te pasa? Pareces distante y preocupada", preguntó Alya con voz suave y amigable.

Marinette suspiró y miró a su amiga con expresión pensativa. "Alya, tengo esta extraña sensación de que hay algo más detrás de todo esto. El concurso, Gabriel Agreste, mi conexión con el chico rubio en mis sueños... no sé, siento que todo está relacionado de alguna manera".

Alya frunció el ceño, mostrando su interés. "¿A qué te refieres exactamente, Marinette?"

Marinette se mordió el labio inferior, tratando de encontrar las palabras adecuadas. "Es como si hubiera algo que se me escapa, como si estuviera viviendo una especie de destino entrelazado con mi amor imaginario. Pero no sé qué significa todo esto, Alya. Me siento confundida".

Alya colocó una mano reconfortante en el hombro de Marinette. "Marinette, a veces nuestras emociones y nuestra intuición nos guían hacia respuestas que no podemos comprender de inmediato. Tal vez haya algo especial en todo esto, algo que aún no hemos descubierto. Pero recuerda, no debes dejar que estas emociones te consuman por completo. Disfruta del proceso y mantén la mente abierta".

Marinette asintió lentamente, sintiendo el apoyo de su amiga. "Tienes razón, Alya. No puedo dejar que estas incertidumbres arruinen mi emoción por el concurso. Seguiré adelante con mis diseños y, quién sabe, tal vez encuentre respuestas a lo largo del camino".

Con una sonrisa de ánimo, Alya animó a su amiga. "Así se habla, Marinette. Confía en ti misma y en tus habilidades. Estoy segura de que encontrarás la verdad detrás de todo esto y, quién sabe, quizás incluso encuentres un amor real en el proceso".

Marinette sonrió, agradecida por el apoyo de su amiga. Juntas, se levantaron y se dirigieron hacia la cafetería para reunirse con el resto de sus amigos.

Falta muy poco para la competencia de Gabriel Agreste, se me ocurrió la idea de hacer un sombrero. Ha sido todo un desafío para mí como diseñadora principiante.