Han Ji Sung pensó que su primer amor ya lo había vivido. Pensaba que aquella relación de pareja en preparatoria con esa chica fue el primer amor de su vida.
Que equivocado estaba. ¿Cómo le dices a este joven universitario de veintidós años que apena...
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El silencio era demasiado para Felix, un chico que estaba acostumbrado a parlotear demasiado sobre cualquier tema que se le llegara a pasar por la mente. Sus nervios estaban a punto de estallar, no obstante, algo dentro de él decía que no era el momento perfecto como para hacerle una broma a su amigo.
Suspira y deja el tenedor de lado, toma su lata de refresco y da un largo trago. Observa a Han como sigue jugando con los boneless y su plato sigue igual de lleno como lo habían traído hace más de diez minutos. La vista de Ji Sung sigue en el plato y en su mano libre está recargada su cabeza, haciendo que su mejilla se vea aún más regordeta.
Lame sus labios y da una calada grande de aire para después expulsarlo completamente. El sabor amargo no ha querido irse desde que vio a Min Ho con otro chico, por el contrario, su apetito solo disminuyó e iba en disminución cada que la imagen se repetía en su mente.
¿Por qué se sentía tan desagradable? ¿Por qué sentía la necesidad de llorar de impotencia? Más y más preguntas eran albergadas dentro de su mente. Solo quería una respuesta rápida y disfrutar de sus alimentos, pues sentía que si llevaba un pequeño bocado a su boca terminaría vomitando incluso el desayuno.
Se sentía demasiado patético.
Vuelve a suspirar y retira la vista de su plato lleno hacía la ventana, viendo a las personas transitar por la vereda llevando paraguas y abrigos grandes. Algunos automóviles en movimiento y las gotas de lluvia en disminución. Era un día agradable y tranquilo, desprendiendo un olor a humedad exquisito que realmente quisiera disfrutar. Pero la incomodidad que se encuentra en su ser no se lo permite.
— Si vuelves a suspirar pensaré que estás enamorado. — Ji Sung no se había percatado del suspiro que había dado, a no ser por Felix. Su mirada regresa hacia su amigo, quien estaba con el ceño fruncido y el tenedor en la boca.
— Lo siento. Es solo que me siento frustrado.
Felix arquea una de sus cejas y traga el pedazo de pollo empanizado. Da un trago a su refresco y se aclara la garganta para continuar con la plática. El ambiente que lo había rodeado ya no era tan tenso, por lo que se sentía en plena libertad de preguntar cualquier cosa.
— ¿Qué es lo que te frustra? ¿La exposición? — pregunta intentando aligerar aún más la tensión — Mira, si es eso todo estará bien. El tema no es tan complica...
— No es eso. — Felix es interrumpido por la abrupta respuesta de Han. Ji Sung solo mantiene su cabeza agachada, viendo como su comida va enfriándose conforme pasa el tiempo. — Es solo que, no lo comprendo. Es... ¡Agh! Es complicado de explicar. Ni yo mismo puedo entender porqué me siento frustrado.
Felix aprieta los labios y asiente por la confesión de Han. En su mente, varias cosas comienzan a hacer click y cree saber la respuesta. Sin embargo, necesita que su mejor amigo le terminará por confirmar su teoría.
