1 mes después.
Cuarto mes
Alerta contenido explícito
-¡Alejandra! ¡ven aquí!- La llamé emocionada
-¡¿Qué sucede?!- Ale se había vuelto algo histérica el último mes, tal vez y solo tal vez la había vuelto loca con mis cambios de humor y antojos, pero ella había puesto al monstruo dentro de mi y yo tenía que cargar con el. Aún no sabíamos el sexo del monstruo pero la verdad queríamos una niña
-Mira- Tomé su mano y la puse sobre mi vientre sintiendo una dolorosa pequeña patada
-Oh...- Se arrodilló a la altura de mi vientre recostando su mejilla ahí sintiendo otro pequeñisimo golpe, acto seguido puso sus labios donde hubo un último golpe que la hizo sonreír contagiándome su sonrisa
-Le gusta tu tacto- Le dije cuando se levantó a abrazarme y recostar su mejilla en mi hombro
-Te amo...- Susurró lo suficientemente alto para que pudiera escucharla dejándome helada parando cualquier caricia que estaba dándole
-Yo también te amo- Superé mi aturdimiento inicial sintiendo mil mariposas revoloteando en mi estómago cuando juntó sus labios dulcemente con los míos sin tener alguna noción del tiempo, nuestras bocas se acariciaban con ternura y poco a poco nuestros cuerpos fueron cayendo en la cama y las almohadas
-Hermosa...- Susurró en medio del beso acariciando mi vientre el cual ya era algo más notório. No lo habíamos hecho hace dos semanas por dos razones. La primera, Ale había vuelto a la escuela, una nueva claro está yo tomaría un año sabático por obvias razones. Y la segunda era la más típica de embarazada. No me sentía bien con mi cuerpo, estaba cambiado y aunque no demasiado me sentía un maldito cerdo
-Ale...-Susurré mareada entre sus perfectos besos y su delicioso aroma que no hacia más que adormecerme causándome a la vez sensaciones placenteras
-Voy a hacerte el amor ahora Lucia...- Dijo en un tono seductor en mi oído haciendo un camino de besos por mi cuello parando en un punto específico que me hizo delirar en el momento en el que con sus dientes marcó mi piel dejando así un segura marca y visible
-P-Pero hoy le diríamos a nuestros padres...- Tartamudeé tratando de salir de esta situación. Mi libido estaba por los aires últimamente pero gracias a mis nuevas inseguridades había evitado tener intimidad con Ale, como ya había dicho antes
-Faltan dos horas aún, dos perfectas y largas horas para amarte- Al caño... llevo a su alien y tendrá que acostumbrarse a este cuerpo deforme
-¿Estás muy cursi eh?- Pasé mis brazos entrelazados en su cuello acercándola ya no poniendo resistencia alguna
-Siempre si es contigo- Logró decir antes de que tomara sus labios con los míos en un deseo carnal y romántico a la vez, sentía las ligeras cosquillas de sus labios moviéndose con los míos y su lengua acariciando toda mi cavidad bucal con eficacia
-Sí...- Un bajo gemido escapo de mi cuando rozó su entrepierna con mi centro, roce que se convirtió en una fricción deliciosa sacando los más roncos y sensuales gemidos de parte de ambas
-Tu piel es tan suave...- Susurró cuando pasó sus manos por mi hombros para luego meter sus manos en mi blusa y retirarla con suavidad. Al instante su rostro bajó a mis pechos contorneándolos con sus labios y luego repasando el mismo camino con su lengua, no traía sujetador así que era un trabajo más fácil para ella hacerme delirar
-Ah...- Solté esta vez un gemido algo más alto arqueando un poco mi espalda cuando tomo uno de mis pezones ahora más sensibles en su boca dando una fuerte succión sintiendo una gran cantidad de humedad en mis bragas
-Deliciosos- Dijo sin más succionando el otro como lo hizo con el reciente y pellizcándolo sin dejar de darle atención.
Cuando estuvo satisfecha no sin antes darle un suave mordisco a uno de mis pechos sobresaltándome dejó un camino de mordidas por todas partes deteniéndose en mi un poco crecido vientre donde solo dejó un beso y fue directo a mis bragas bajándolas con sus dientes de manera erótica sin quitar sus ojos de los míos
-¡O-Oh Dios¡- Apreté la sabanas con fuerza cuando abrió mis piernas dando una larga lamida a mi coño, por instinto intenté cerrar mis piernas al contacto pero se puso entre medio de ellas. Ahí fue cuando me di cuenta de que solo traía sus boxers ¿Cuándo se había desvestido? La acerqué hacía a mi nuevamente juntando nuestras bocas al instante al igual que nuestras lenguas. Fui bajando mi mano por su pecho sin romper el contacto de nuestros labios finalmente llegando a su más que erecta polla, sin duda era enorme podría medir quizás unos veinte centímetros, cada vez que estaba dentro de mi sentía como me abría más y más. Era delicioso
-Justo ahí amor...- gimió en mis labios sin parar de besarnos cuando apreté su pene y lo acaricié por encima de la tela poco a poco bajándolo hasta que su polla golpeó su abdomen. Mis bragas eran un maldito charco y sentía que iba a explotar sin ser tocada correctamente aún. Ya algo desesperada tomé su erección en mi mano comenzando a recorrerla con la misma. Estaba dura, caliente y enorme. Seguí masturbándola por unos minutos has que no aguanté mas y comencé a guiar su pene a mi entrada
-¡Ale!- Di un gritó de placer cuando se adentró en mi de una estocada llenándome completamente
-Eres tan malditamente apretada... siento que asfixias mi polla- Dijo antes de empezar a moverse dentro de mi a un ritmo perfecto sintiendo como se deslizaba fácilmente gracias a mi abundante humedad
-¡Ahh! ¡Más rápido!- Me abracé a su cuello al cabo de unos minutos me sentía en las nubes y su gran polla estaba partiéndome en dos placentera y deliciosamente. Ella al instante aumentó el ritmo de sus penetraciones sacándome un grito debido mi increible orgasmos. No había terminado con el cuando Ale tomó una de mis piernas pasándola por su hombro y comenzó con rápidas y duras pentraciones buscando su liberación dandome otro maravilloso orgasmo antes de dejar su espesa carga dentro de mi que comenzó a chorrear junto con mis fluidos por mis piernas al mismo tiempo que ella se desplomaba encima mío sin dejar todo su peso
-Te amo- Fue lo último que dijimos con una sonrisa antes de compartir un ultimo beso
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-¿Estás segura que estarás bien?- Me preguntó mi novia por milésima vez, solo iba a la puta tienda por unas galletas
-Que si mierda, tu arréglate que por tu calentura llegaremos tarde- Me quejé
-No parecías molesta cuando estaba dentro tuyo- La fulminé con la mirada con mis mejillas algo rojas
-Cállate- Salí por la puerta en busca de mis amadas galletas
-Ten cuidado- Fue lo último que escuché sin saber que estaba yendo directamente al peligro
*******
-Tan preciosa...- Sollocé cuando aquel hombre acarició mi mejilla
-Esta vez no vas a huir, Lucía, no sin haberte hecho un bebé antes- Me retorcí antes sus asquerosas palabras y puse una mano en mi vientre, tenía un vestido suelto y veraniego que disimulada bastante mi embarazo y temí por mi y mi bebé cuando sentí que comenzó a subirlo
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Ʈᖾᥱ ᒐoᥴƙᥱɾ 18 📚 - Adaptación Luciale (G!P)
FanficEl casillero de Alejandra siempre era vaciado en su totalidad por ella, tirando todas esas cartas superficiales y estúpidas, pero este año solo algunas iban a quedarse en su casillero así como en su corazón para siempre. Esta es una adaptación Auto...