Ʈᖾᥱ ᒐoᥴƙᥱɾ 18 📚 - Adaptación Luciale (G!P)

8:No

-Por favor prestame tu auto papá, tengo la licencia- Rogué por milésima vez, no podía llevar al cine caminando

-¡Te dije que no Alex, La última vez que te lo preste Sol vomitó en el!- Recordé la vez que quería violar a ese gato -Por ningún motivo por más importante que sea te dejaré llevarlo otra vez-

-Es que...- suspiré -En verdad yo... voy a llevar a Lucía al cine esta noche y-

-Toma las llaves, te quiero aquí a las diez Alex- Vi un brillo en sus ojos y rostro que cambió por terror al instante -No le vayas a decir a tu madre, se discreta que ella escucha to-

-¿Qué no debo saber?- ¡¿Cómo había hecho eso?!

-Corre Alex-Susurró e hice caso en ese instante y fui a encerrarme a mi habitación en la que por alguna razón Constanza se encontraba

-¿Que estás haciendo aqui duende segundo?- Le pregunté

-Yo solo tengo diez años Ale, voy a crecer, Mar no- Dijo suavemente

-Para mi siempre seran un par de duendes...- Sonreí -Vuelvo a preguntar ¿Qué haces aquí?-

-Pues estaba dibujando y una hoja de papel se metió por debajo de la puerta y vine a buscarla, por cierto... Te llamó Tania- Se fue dejandome en shock del cual salí para revisar mi teléfono

-Tania- Leí en el registro de llamadas ¿La regreso? que demonios... lo haré

-¿Ale?- Escuché su voz al otro lado del teléfono logrando tensarme

-¿A que se debe tu llamada?- Eso sonó muy estúpido Ale...-

-Yo quería saber si podemos vernos hoy, regresé a la ciudad antes de lo previsto y quería hablar ya sabes -Miré la hora y me quedaba una hora para recoger a Lucía

-Está bien pero que sea algo rápido- Respondí, me arreglé más de lo que hago comunmente porque después de eso iría por Lucía -¿Donde quieres que nos veamos?-

-A la cafetería que está frente al parque que hay unas cuadras de tu casa se llama Mocca- Ya sabía de cual se trataba

-Bien... te veo ahí en diez minutos- Colgué. Cuando estuve lista tomé las llave del auto y me dirigí al lugar acordado, y ahí estaba la chica que había matado a la tierna Alejandra y también la chica por la cual media escuela quería comerme la polla

-Hola Ale- Me sonrió, podía decir que es una zorra y ese tipo de cosas pero no le guardaba rencor

-Hola, Tania- Le sonreí devuelta por cortesía

-Estas tan preciosa Al, nada de la bebé que conocía- Se mordió el labio

-Gracias...- Le contesté lo menos seca que pude

-¿Como te ha ido?- Preguntó apoyando su barbilla en la mano

-Pues bien aunque me molesta tener que vaciar el estúpido casillero cada día. ¿Sabes?- Le recordé de alguna manera que por su culpa tenía a tanta chica hormonal detrás mío. Como había dicho antes no le guardaba rencor pero me molestaba saber que todo ese rollo de las cartas se pudo evitar

-¿Todas esas idiotas siguen detrás tuyo?-Preguntó con leve molestia en su voz

-Si son muy insistentes la otra vez tomé una foto de mi Locker ¿Quieres ver?-Preguntó

-Claro- Le extendí el teléfono con la foto puesta llena de cartas de distintos colores, hojas simples y el pedazo arrugado de papel que había dejado pegado "Lucía pasó por aquí"

-Wow, están locas- Observó la foto con detenimiento y por harte de magia el número de Lucia comenzó a sonar

-¿Quién es Lucía y por qué tiene un corazón?- Iba a quitarle el teléfono para responder pero contesto

-Ale está ocupada llama luego, no hemos terminado de hablar así que tomate dos horas si quieres, bye- ¡¿Ella enserio acababa de hacer eso y encima colgarle?!Oh no Tania, Así como mataste a Ale tierna mataste mi timidez y mi mente manipulable

-¡¿Pero qué mierdas Emma?!- Le arrebaté el celular y corrí afuera y me apresuré a entrar al auto para buscar a Lucia

-¡Tu y yo tenemos que hablar Alejandra!-La escuché gritarme

-¡No! No tenemos que hacerlo- Arranqué arrepentida de haber aceptado venir ¡Maldita sea! estúpida Alejandra... por qué siempre lo arruinas. Llegué a la casa de Lucía no sin antes comprar una rosa como disculpa, si ir al cine ya era un cliché tenía que ser uno bueno. Toqué la puerta repetidas veces hasta que una enojada Lucía abrió y alzó una ceja

-¿No vendrías en dos horas?- Me contesto enojada, y la entendía

-Enserio lo siento, juro que te explicaré en el auto todo fue un malentendido... te traje esto- Le extendí la rosa que analizó por unos momentos poniendome nerviosa al final aceptandola y suspirando me contestó

-Escúchame Alejandra, si tu excusa no es buena no pienso volver a salir contigo- Me señaló y luego su gesto se suavizó sonriendome un poco

-Gracias enserio, por cierto... te ves preciosa Al- Con mi disculpa no había podido observar bien a Lucia, pero la verdad es que estaba bellisima

-Muchas gracias bebé, tu también te ves hermosa- Besó mi mejilla suavemente extendiendo mi sonrisa a más no poder

-¿Vamos? Tu carruaje espera bella dama.-Se rió por mi comentario y salió de su casa aconpañandome al auto mientras yo le habría la puerta del copiloto para luego sentarme en el asiento del conducto

-¿Lista para nuestra primera cita?- Sonreí

-Más que lista...-