𝑬𝒔𝒕𝒂𝒔 𝒆𝒏 𝒖𝒏𝒂 𝒐𝒃𝒔𝒆𝒔𝒊𝒐𝒏

O5

—Temo...—susurro Aris—

—¿Que pasa, Ari? —cuestionó el castaño deteniéndose—

—Salgamos hoy. —murmuró—

—¿Tu novia no se enojara? —preguntó—

—No, no, no. No tiene porqué. —contestó rápidamente el chico—

Temo asintió.

—Esta bien, ¿Después de la escuela? —preguntó—

—Claro, después de la escuela.

—Esta bien, debo irme. Nos vemos en el salón. —y sin más el castaño se fue—

—¡Mi amor! —exclamó la chica rubia abrazando a su novio— Hay que salir hoy.

—Hola Yolo, no podré salir hoy contigo. Ya tengo planes. —Ari alejó a su novia con lentitud—

—¿Que planes tienes? —preguntó la rubia cruzándose de brazos—

—He quedado con Temo, saldremos después de la escuela. —contestó él rizado con simpleza—

—¿Con Tamy? —cuestionó la chica—

—Si, con Temo.

—Temo me cae muy bien, pero todos sabemos los sentimientos que tiene por ti. No quiero sonar insegura o tóxica, pero no estoy del todo de acuerdo. —Aristóteles observó a su novia—

—Por favor Yolo, no seas...

—¿Él te invito o tú a él? Para saber que pensar. Porque si fuiste tú, hiciste muy mal al no darle un tiempo para poder reponerse después de que lo hayas rechazado. Y si fue él quien te invito...en ese caso tengo derecho de pensar otras cosas.

Él rizado se quedó en silencio.

Es verdad que aquel castaño le había pedido tiempo, sin embargo ya había pasado tres semanas desde eso. Y no pudo evitar acercarse y pedirle una salida, quería volver a ser único, en verdad que lo extrañaba.

Tampoco soportaba el hecho de ver cómo el primo del esposo de su prima, cada día se volvía más único a él.

—Creo que eso ya será nuestro problema, Yolotl. —Ari la soltó por completo— Me voy, nos vemos después.

—Hey Temo, ¿No vamos? —Ari se acercó al chico con una sonrisa—

—Hola, claro. ¿A dónde iremos? —Temo guardaba una libreta en su mochila—

—Vayamos a la feria del parque. Después podemos ir por un helado.

Temo asintió para después sonreír.

—Vamos.

Temo y Aristóteles salieron con una sonrisa. Sin embargo el sonido del celular del castaño hizo que se detenieran.

Temo saco su celular y al ver el mensaje sonrió levemente.