Las aventuras de un heroe enamorado

Capitulo 4

Todos habían escuchado un fuerte estruendo, al parecer Lumpy el torpe del pueblo había tropezado y hacía que muchas de las tazas y platos de una mesa cayeran al suelo rompiéndose todos.

Es que este tipo no deja de sorprenderme con su tremenda torpeza.

-Oye mejor concéntrate en narrar ¿No crees?-Se queja el alce.

¿Y qué crees que hago cornudo? De algo tengo que vivir.

Lo que nadie noto por prestarle atención a la discusión de Lumpy y la narradora fue que cierto chico con rasgos de oso, se alteró con aquel estruendo, lo que provocó que sus ojos tomaron un color ámbar, sus dientes se tornaran filosos, y una sonrisa de psicópata se formara en su rostro.

-Fli-Flippy?-Tartamudeo Flaky que estaba al lado de él sin poder reaccionar a tiempo cuando la fuerte mano de Fliqpy tomó su cuello con fuerza mientras soltaba carcajadas como loco.

Los demás entraron en pánico sabiendo lo que significaban aquellas risas, la bestia fue liberada, rápidamente Splendid como el héroe que era fue rápido a socorrer a Flaky aunque ya todos sabemos que cuando se trata de hacer su trabajo Splendid no es muy bueno en eso.

Y como era de esperarse el peliazul fallo en salvar a la pelirroja, terminando en una escena sangrienta que lamentablemente no puedo describir porque por cuestiones de censura.

-¡Demonios!-Dijo el héroe enojado consigo mismo por otra vez matar a quien se suponía que iba a salvar.

El asesino terminó riendo en su cara, realmente le causaba gracia lo irónico que era que el supuesto héroe del pueblo terminara matando a las personas, no lo culpo también me ando riendo internamente por las tonterías del peliazul.

-¡Oye!-Se queja el de antifaz rojo, no le gustaba las burlas que estaba recibiendo.

Sin embargo los gritos de terror de los demás hicieron que recordara que debía detener a Fliqpy antes de que asesine a alguien más.

Sin pensarlo mucho tomó al oso de cabellos verdes y salió volando hacia el techo lo cual provocó que atravesara el concreto de este, lo cual no le hizo el más mínimo daño, además que no le dio a Fliqpy ya que lo protegió con su cuerpo, los dos salieron volando de ahí, Splendid pensaba que si lo llevaba a otro lado donde no habia nadie podía mantener a las personas a salvo sin tener que pelear con su amor platónico, claro que no noto que su vuelo había provocado que la casa de la oveja cayera en pedazos aplastando a la mayoría de sus amigos, pero son solo detalles chiquitos.

El ex-militar se retorcia en los brazos de la ardilla azulada, le molestaba mucho que lo interrumpiera en sus secciones de matanza, pero no podía hacer mucho, el chico del antifaz era prácticamente indestructible, además que si lo soltaba se estamparía en el piso, ¿Entonces porque te mueves tanto?

-¡Porque es molesto ser cargado por este idiota!-Dijo molesto.

-¿Podrían no pelear? Además la narradora tiene razón, si te sigues moviendo te vas a caer-Dijo con preocupación.

-Como si te importara-Decía con amargura.

-....Si me importa-Murmuro, pero fue escuchado por el asesino que se quedó algo sorprendido y dejó de moverse.

Llegaron a una parte del bosque muy alejada del pueblo, asique Splendid aterrizó ahí y con cuidado dejó al de rasgos de oso en el suelo, este estaba frustrado, no pudo matar a nadie ademas que no valía la pena intentar matar al de rasgos de ardilla porque este era invencible, haci que solo se desahogó su frustración hacia un pobre árbol que andaba cerca.

El de ojos azules suspiro, al menos no tendría que pelear con Fliqpy, haci que solo fue a sentarse en el césped, hasta que el más alto se calmara, cosa que obviamente tardará mucho, miro hacia el cielo y vio que ya casi oscurecía, era mejor preparar una fogata mientras el ex-militar se relajara y pudiera volver al pueblo.

Pasó un rato y ya se podía ver como la luna y las estrellas se asomaban, el héroe miraba maravillado la vista nocturna, no se veía muy seguido en el pueblo, mientras que el psicópata solo concentraba su mirada en las llamas de la fogata, aún seguía enojado por no poder matar a nadie, pero su irritación bajo un poco al ver al peliazul, no podía negar que le causaba cierta curiosidad, aún más que realmente no lo trata como un monstruo, siempre fue respetuoso y amable con él, sin importar su actitud, y la forma tan grosera que lo trató anteriormente.

Aunque para él era muy posible que solo era porque Flippy compartía su mismo cuerpo, y por eso nunca trató de golpearlo o que le preocupara que cayera de gran altura, cosa que en parte era cierta, pero no del todo.

-"¿Qué demonios está diciendo esa narradora?"-Se preguntó mentalmente el peliverde.

-Vaya día ¿No?-Dijo Splendid intentando tener una conversación con el peliverde.

-Una mierda de dia-Contesto con un gruñido-Al Fin soy libre y no me dejan matar-.

-Bueno, a las personas no les gusta morir asesinados-.

-Reviven al siguiente día ¿Cuál es el problema?-.

El héroe solo rodo los ojos, y siguió viendo el cielo nocturno, otro silencio se formó entre los dos, pero esta vez el de rasgos de oso quería romperlo, cosa sorprendente, ya que el psicópata prefería matar en vez de hablar.

-"Seria mas facil si esta mujer no hablara tanto".....Oye-Hablo llamando la atención del de rasgos de ardilla- Fue....¡Genial como matastes a Flaky hoy!-Felicito con una sonrisa, pero vio como claramente el de mascara roja no estaba feliz.

-¡Esa no era mi intención!-Se quejó mientras flotaba un poco encarando al ex-militar.

-Igual pasó, y fue genial-Hablo sin mucho interés del enojo del de cabello azul.

-¡No puedo creer que hables haci de la chica que te gusta!-Dijo indignado.

-¿Gustarme? Flaky no me gusta-.

-¿Que?-Lo miro sorprendido-Creí que...-.

-El idiota de Flippy es el idiota enamorado, yo no estoy interesado en eso-.

-Oh....ya veo-Volvió a sentarse en el suelo, internamente estaba feliz, pero no podía mostrarlo porque sospeche de él.

-Igual ¿Porque sigues intentando ayudar a esas personas? Fallas tantas veces en hacerlo que ni sé porque sigues intentándolo-.

-.....Quiero ayudar, quiero...mostrar que soy capaz de usar mis poderes para el bien, si fracaso muchas veces, pero no me importa, quiero ser un héroe....no una menza que todos temen y se esconden de él, que me vean....como un monstruo....me a pasado eso en casa hogar que e estado y...odie eso, se siente tan...-.

-Solitario...-Terminó la última frase como si supiera que iba a decir.

Ambos se miraron, Splendid con asombro y Fliqpy con...era una expresión algo difícil de explicar, pero era un rostro serio sin ninguna pizca de burla, locura o algo que mostrará la típica faceta del psicópata, sus ojos ámbar se veían con sentimiento, como si hubiera sentido lo mismo que el de ojos azules, como si aún hubiera algo de humanidad en ese asesino.

-Si...-Contestó el héroe aun desconcertado.

-....Ire a dormir ya es de noche-Dijo mientras se acostaba dándole la espalda el héroe.

-Claro buenas noches-.

No recibió respuesta así que supuso que ya estaba dormido o que lo ignoro qué es lo mas seguro, pasaron unos minutos y el héroe decidió dormir también, como veía que el peliverde se acercó a él acostándose a su lado y pegando su cabeza a la espalda de su amado, cosa que lo puso muy feliz, sabía que se estaba arriesgando, pero era mejor que nada.

Pero lo que no se dio cuenta es que el ex-militar si estaba despierto, pero decidió no apartarlo, ya que el contacto que tenía con el héroe se sentía cálido, algo que hace años no sentia, haci que lo dejó pasar, y esta vez el de rasgos de oso pudo dormir sin pesadillas.