Los Quiero... Att: Lan Sizhui

cap 8

A la mañana siguiente Sizhui despertó algo desconcertado, miro a su alrededor y suspiro al recordar la regla que había roto el día anterior, decidió dejarlo pasar, no tenia muchos ánimos para cumplir algún castigo, y sabia que rompería aun mas reglas por eso, salió del Jingshi con la mirada baja, tenia que ir a su habitación a organizar todo, el día anterior les habían dicho que tenían que salir a lanling, el lider de secta Jin Guang Shan había pedido ayuda por que habían aparecido cadáveres cerca de su gran "castillo" , definitivamente la secta Jin tenia a los cultivadores mas inútiles, lo único que tenían era dinero, y eso, solo por que se lo quitaban a su pueblo, no le gustaba ir mucho a lanling, había ido a la villa Mo por que lo habían obligado, pero nunca había ido por voluntad propia, le dolía ver a la señorita Yanli ser tratada como sirvienta por culpa del líder  Jin, Jinling se había quejado unas cuantas veces con el por el como su abuelo trataba a su madre, el había crecido prácticamente junto a jinling, eso lo convertía en uno de sus únicos amigos junto con Jingyi, y eso había generado confianza entre ellos, obviamente en secreto, jinling no era tan malo y arrogante como lo aparentaba, de hecho solo lo hacia por el líder de la secta jiang, que siempre le decía que tenia que ser así para evitar "tontearías" como lo decía el, en su camino, conoció a jinling una vez cuando el líder de la secta jiang lo obligo a ir, fue muy gracioso ver como un jinling llorón se aferraba a la pierna de su tío, el lider jiang logro quitárselo de encima a base de amenazas y maldiciones, después Jingyi se acerco a el y lo invito a dar un paseo con ellos, y como era de esperarse Jinling lo mando muy lejos diciendo que nadie podía acerarse de manera tan vulgar a el, desde ese día jinling y jingyi se habían vuelto una especie de amienemigos, mientras que el se mantenía tranquilo mirando como aquellos dos se mataban entre si, no era necesario intervenir si podías reírte internamente de aquella situación que después se aclararía, le gustaba estar en compañía de esos dos, podía ser el mismo cuando salían de gusu hacia alguna misión y esos dos estaban, obviamente ningún adulto o algún discípulo joven sabia de esto, el era hijo del gran HanGuang-Jun y sobrino del líder de secta ZeWu-Jun, por lo tanto tenia que ser el ejemplo de muchos jóvenes de la secta, y esto no le molestaba, simplemente le cansaba estar fingiendo tranquilidad cuando quería gritar, llorar o simplemente reír, el en algunas ocasiones envidiaba a jinling, el podía expresarse como y cuando quería, tenia los cumpleaños mas espectaculares de todas las sectas y ellos solo tenían un "ahora eres un año mayor, debes ser mas sabio y mas disciplinado que el anterior" por parte de Lan Quiren y ya, la vida en Gusu era dura si no habías nacido con el don de la paciencia y la tranquilidad, su padre y su tío si, o eso creía, ya que las historias que solían contar de ellos eran de la tranquilidad que poseían a la hora de resolver problemas, aunque las historias que había logrado escuchar de su "madre" le gustaban mas, lo pintaban como un espíritu feliz y libre que no le importaba expresarse en cualquier situación, solía revelarse contra su abuelo sin siquiera dudarlo, eso le causaba gracia, pero el no podía imitar aquello, probablemente lo mandarían a un lugar alejado a meditar y lo castigarían con escribir mil millones de veces las reglas...

Sizhui lavo su cara antes de ir a donde probablemente los demás lo esperaban, miro a jingyi  caminar de lado a lado algo desesperado

-¿Donde estabas?

Dijo este en voz baja y algo molesto

-Hablando con el maestro Quiren...

Mentira, pero quienes eran ellos para cuestionarlo, aunque tenia que admitir que los Lan eran un tanto intensos en esos casos, les gustaba ir a ver si era cierto lo que el otro decía, obviamente esto lo hacían de manera muy pero muy discreta para no romper las reglas tan abiertamente, en el fondo creía que a los Lan les gustaba acusar a los demás solo para tener algo diferente en sus rutinas, o eso es lo que había escuchado decir a su tío cuando se emborrachaba de vez en cuando sin que el abuelo Quiren se enterara, y si, eso también había sido culpa de su "madre" pero a su tío no le gustaba hablar de aquello...

-Pero ya es muy tarde

Menciono uno de los miembros mas jóvenes con calma y una arrogancia disfrazada de elegancia, solo había sido un minuto, lo decía enserio cuando menciono lo de intensos, pero Sizhui sabia salir de esas situaciones cuando tenia a Jingyi a su lado

-Entonces camina de una vez si no quieres que nos tachen de impuntuales, el maestro Quiren habrá tenido sus razones, ahora caminen

Todos le hicieron caso a Jingyi y empezaron a caminar detrás de ellos, algunas veces parecía que Jingyi era quien guiaba a los demás en vez de el, pero no le molestaba, Jingyi había sido de gran ayuda en esos casos donde los demás se revelaban, y en cierto sentido le aligeraba el trabajo a la hora de mover a los demás, Jingyi tenia un poco, solo un poco mas de libertad que el, y eso lo agradecía, si no fuera por eso, nunca habría conocido al que ahora podría considerar un hermano jurado, si el lograba convertirse en líder de secta definitivamente Jingyi seria su gran y fiel consejero.

-Sizhui... te digo un secreto...

Dijo Jingyi en su oído con la voz mas baja que pudo, Sizhui solo hizo un pequeño movimiento para indicar que continuara

-El discípulo de atrás casi se cae 

Sizhui trato de no reír, Jingyi solía decir tontearías solo para hacerlo reír, pero tenia a unos cuantos disípalos atrás y no podía hacerlo, Jingyi se divertía con las muecas que hacia para no reír frente a todos 

-Jingyi deja a Sizhui en paz

Dijo alguien mientras seguían caminando

-Tranquilos chicos, estamos fuera de Gusu, nadie los acusara mientras estamos lejos

Dijo Jingyi confiado, el solía dejar las reglas en la secta, el era libre fuera de esta 

Horas después llegaron al lugar que Sizhui temía, para llegar a Lanling tenían que pasar por los túmulos funerarios, un lugar al que no entraban ya que siempre solían rodearlo pero esta vez no podían evitarlo, llegarían al atardecer del día siguiente si lo rodeaban, y si pasaban por ese lugar llegarían al anochecer, Sizhui le tenia miedo a ese lugar, según los libros de historia y lo que las personas comentaban, hace años aquel lugar era el cementerio de personas sin familia y bandidos, huesos por todos lados y una atmosfera horrible se decía de aquel lugar, decían que cuando "El Patriarca de Yiling" aun vivía solía ser su castillo y su secta eran los cadáveres vivientes que rodeaban la zona, esa historia era inquietante ya que el lugar ni siquiera tenia la luz del sol, o eso parecía, otra leyenda decía que los ancianos caminaban desde sus sectas hasta ese lugar solo para morir, nadie sabia por que, solo que una vez entrabas ya no volvías a salir...