Los Quiero... Att: Lan Sizhui

Cap 9

Sizhui tenia miedo, y Jingyi pudo notarlo, el también tenia miedo, el lugar no era la habitación lujosa de Jinling a la que tanto le gustaba ir, pero alguien tenia que dar el primer paso o si no se les haría mas tarde, y ellos no quieran romper la promesa que le habían hecho a Jinling, es mas, Jingyi se había portado bien para poder ir a esa misión, días atrás cuando se encontraron a Jinling este les conto que había escuchado al líder de la secta Jiang decirle a su madre que Jinling no tenia habilidad para una casería nocturna, Jinling se sintió mal por haber decepcionado a su madre y a su tío favorito, entonces los tres idearon un plan, el cual era que Jinling atraería a unos cuantos cadáveres, una vez los miembros de su secta salieran corriendo y su abuelo pidiera la ayuda de los Lan los mandarían a ellos para "practicar", ellos llegarían una noche antes para enseñarle a Jinling a acabar con ellos y después el quedaría como un héroe al día siguiente "ayudándolos" a acabar con los cadáveres y su tío estaría orgulloso de el , un gran plan el cual no podía fallar, y mucho menos por su miedo a morir en los túmulos funerarios.

Jingyi miro a los demás disipulos, estaban igual que ellos, entonces a Jingyi se le ocurrió la mejor idea que pudo haber tenido... según el

-Bao es tu turno, entra primero

Dijo Jingyi con una sonrisa mientras el otro chico lo miraba entre confundido e indignado

-Y-Yo? p-pero...

-Si no lo haces puedo decir que a escondidas de todos vas al pueblo a comer carne

Dijo Jingyi susurrando en su oído, el pobre chico solo trago saliva y con pasos lentos empezó a avanzar hacia adentro de los túmulos funerarios, Sizhui se sintió mal por no haber sido lo suficientemente valiente para entras, así que siguió a Bao y con ello todos los demás siguieron a Sizhui , el lugar era aterrador, la luz del sol era bloqueada por los grandes arboles que rodeaban el lugar, caminaban lentamente y alerta de cualquier cosa que pudiera atacarlos, Jingyi tomo la mano de Sizhui para no perderlo, el lugar se hacia cada vez mas oscuro y los arboles hacían ruidos extraños...

Siguieron caminando por aquel oscuro lugar, Minutos después se dieron cuenta que no había nadie mas a parte de ellos caminando por aquel lugar

-Jingyi... Y los demás?

Sizhui lo miro asustado, no podía ser verdad que de la nada los demás hayan desaparecido sin gritar ni hacer ruido, los dos chicos siguieron caminando con temor y tratando de no separarse en lo mas mínimo, a lo lejos lograron ver una pequeña luz, los dos se miraron sorprendidos y caminaron un poco mas rápido con la esperanza de que fuera alguno de los discípulos con los que venían, al estar un poco mas cerca se dieron cuenta que había una silueta que se podía distinguir por la poca luz que provenía de lo que ahora distinguían como un pequeño farol.

- ¡Hey chicos! ¿Son ustedes?

pregunto Jingyi a la distancia, tenia miedo de que fuera un cadáver feroz que los estaba buscando, por esa razón detuvo a Sizhui a una distancia considerable

-¡Hey tu!

Volvió a hablar Jingyi acercándose poco a poco, cuando se acerco lo suficiente pudo ver una cara pálida y arrugada, Soltó un grito aterrado y al tratar de alejarse tropezó, Sizhui se acerco a Jingyi tratando de levantarlo pero el nombrado estaba a punto de desmayarse por el terror.

- Que irrespetuosos jovencitos

Escucharon una voz que supusieron provenía de aquella silueta, Sizhui dejó a Jingyi tirado y se acerco a aquella siluet

-Sizhui no!

Dijo Jingyi tratando de detenerlo, Sizhui no le hizo caso y se acerco, prendió un talismán de fuego y lo acerco a aquella silueta donde el suponía estaría su rostro, Sizhui vio la misma cara pálida y arrugada que había visto Jingyi, solo que ahora tenia una sonrisa como si estuviera riéndose de su situación

-D-Disculpe nuestro atrevimiento, no queríamos faltar le al respeto en ningún momento, solo estamos un poco sorprendidos de encontrar a alguien en este lugar...

Dijo Sizhui tratando de ser lo mas amable posible

-Si es que sigue viva

se escuchó la voz de Jingyi a lo que Sizhui solo suspiro y sonrió con nerviosismo, lo que tenían enfrente era a una mujer de una edad avanzada la cual estaba enmedio de la nada,  Sizhui no quería hacer enojar al espíritu, era obvio que no podía haber nadie con vida a parte de ellos y sus compañeros en aquel lugar... Verdad?

-Nos podría indicar el camino hacia lanling?

pregunto Sizhui con propiedad y educación

-mmmm claro, siganme

Dijo aquella mujer caminando con el pequeño farol alumbrando su camino, Sizhui observo a aquella señora, sus pies no flotaban y no mostraba ser algún espíritu errante que había tenido la desgracia de perecer en aquel horrible lugar, Mientras mas caminaban escuchaban murmullos y risas? Había mas espíritus cerca de ahi?

Caminaron un poco mas encontrando un pequeño lugar iluminado con pequeños faros y había personas alrededor de una fogata comiendo y conversando alegremente, los dos chicos se mostraron sorprendidos, había ancianos, niños y adultos en aquel lugar, se veían felices, que hacían esas personas en ese lugar? No se supone que iban a morir en aquel lugar, recorrieron el lugar con la mirada hasta que miraron cinco cuerpos tirados en el suelo mientras una mujer les pasaba una tela mojada por la frente, reconocieron a sus compañeros y corrieron hacia ellos

-Que fue lo que paso?

Pregunto Sizhui preocupado, aquella mujer sonrió

-Mei wàizǔmǔ suele pasear por la noche, se los encontró, pensó que estaban perdidos, pero dice que al verla los chicos se desmayaron, así que los trajimos aquí

La chica se encogió de hombros y siguió con lo suyo, fue entonces que Sizhui se dio cuenta, aquel lugar no albergaba seres malignos, y la señora tampoco era un espíritu herrante, si no una simple mujer de edad avanzada, era extraño, ese lugar no era precisamente el mejor lugar para vivir, y normalmente las personas preferían vivir en una villa donde los cultivadores pudieran protegerlos, o eso había escuchado de los demás miembros de su secta, entonces que hacian aquellas personas en ese lugar?...

-Wen Qing ha vuelto!

Un joven grito mientras una mujer con vestido rojo y blanco aparecía, tal parecía ser la matriarca de aquel lugar...