Capítulo 2: Cinco minutos de abrazos

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Los ojos de Fandu se abrieron de repente, ¿Qué diablos es esto? !

Las otras personas en la sala de enseñanza también se sorprendieron y se mostraron reacios a hacer un movimiento. El director dio una palmada en la mesa y regañó con rabia:

"¡El que no se abrace será castigado directamente a nivel escolar y toda la escuela será notificada y criticada!

Los estudiantes estaban muy conscientes de sí mismos y se emparejaban automáticamente como los airpods, así que cuando miramos por toda la sala de enseñanza, sólo quedaban Fandu y Xie Gu. Fandu miró a Xie Gu de arriba abajo, no era O, no importaba si lo abrazaba, se entretuvo de mala gana, abrió los brazos,

"Espera uno".

Xie Gu lo miró y casi escribió la palabra "joder" en su cabeza. Estaba reacio, y Fandu estaba aún más reacio. Justo cuando estaba a punto de irse, la voz del director sonó:

"¡No te atrevas a no abrazar! ¡Date prisa!"

Fandu no tuvo más remedio que tirar de Xie Gu a sus brazos. En el momento en que sus extremidades se tocaron por un momento, Fandu sintió claramente que Xie Gu se estremecía.

¿Miedo a abrazar?

Fandu seguía siendo un caballero, pero sólo le rodeaba vagamente la cintura, no realmente junto a ella, y su mente divagaba un poco, murmurando: "Bastante bien".

Xie Gu se acercó al oído de Fandu, exhaló un aliento cálido y su voz sonó un poco burlona.

"¿Estás bien?"

Los oídos de Fan Du de repente se entumecieron, hubo un zumbido y sus pupilas se contrajeron de repente, forzando una luz peligrosa.

La mano de Xie Gu se movió gradualmente hacia abajo a lo largo de la espalda de Fandu, "¿Qué estás haciendo tan en serio? Dame una sonrisa..." Fandu es despiadado. Aprieta su trasero con fuerza,

"¿Estás jodidamente enfermo?"

El director gritó en ese momento.

"¡Cuatro minutos más!"

El carácter juguetón de la cara de Xie Gu se acentuó aún más, y Fandu tuvo de repente la sensación de que algo iba terriblemente mal.

Los dos estaban ahora en un abrazo cara a cara. La punta de la nariz de Xie Gu se deslizó lentamente por el cuello de Fandu, y su aliento se roció sobre la delicada piel expuesta, provocando el más leve escalofrío. Fandu se estremeció de repente, a punto de empujarlo. En ese momento, el director gritó de repente.

"¡A ver quién se atreve a soltar la mano!"

Fandu se mordió la lengua con fuerza y no tuvo más remedio que volver a abrazar a Xie Gu

El director miró el cronómetro y dijo:

"¡Quedan tres minutos!"

Fandu advirtió ferozmente a Xie Gu:

"Si te atreves..."

Xie Gu lo miró, Levantando un lado de la boca, reveló una mueca:

"Me pregunto a qué saben tus feromonas".

De repente, mordió el cuello de Fandu.

¡Joder!

Este mordisco vio sangre enseguida y Fandu casi no gritó. Pero eso no es todo. A medida que la sangre fluye, las feromonas de ALPHA se apoderan rápidamente de la cavidad nasal, barriendo el campo de batalla y dominando todos los olores. Xie Gu olió el fuerte e imprudente olor a tabaco.

El olor era como si una mano invisible hubiera rodeado el cuello de uno, impidiéndole respirar, una supresión genética. En ese momento, el tiempo se extendió como si fuera extremadamente largo, como si no hubiera un final a la vista.

Las pupilas de Xie Gu se contrajeron repentinamente, resultó ser un ALFA

La feromona ALFA destructiva se precipitó en su cavidad nasal, penetró rápidamente las paredes de los vasos sanguíneos y se integró en la circulación sanguínea.

Fue como si el cuerpo hubiera sido sometido a una explosión nuclear no muy diferente a la de Chernóbil. La irritación se dirigió directamente al cielo, provocando la hinchazón de la córnea y el ennegrecimiento de los ojos.

Las piernas y los pies de Xie Gu sufrieron un espasmo, y no podía creer que no pudiera manejar tales feromonas.

Ni siquiera se dio cuenta de que los rincones más secretos de su cuerpo estaban cambiando silenciosamente.

Vandu soltó una carcajada, extendió la mano y frotó las nalgas de Xie Gu, burlándose con malicia:

"¿No puedes aguantar más? ¿Hmm?"

Una fina gota de sudor impregnó la frente de Xie Xue mientras apretaba los dientes hasta la muerte.

Los dos hombres se miraron con tanta fiereza como si fueran bestias luchando entre sí. Las chispas salpicaron el aire y la atmósfera tensa estaba a punto de estallar.

El director sostuvo el cronómetro,

"¡Está bien, se acabaron los cinco minutos!"

Como si hubiera recibido una amnistía, Xie Gu se apresuró a retroceder varios pasos, alejándose del lado de Fandu.

Su pecho se agitaba violentamente, le dolían las piernas y el sudor caliente penetraba en su espalda.

Xie Gu no entendía por qué tenía esa reacción, se tocó la nariz, afortunadamente, no le sangraba la nariz.

Fandu le miró desde arriba y se burló:

"No, sigue, eso no va a funcionar...". Si huyes después de burlarte, se te romperán las piernas. "

Xie Gu no estaba asustado en absoluto y le sonrió:

"No te preocupes, tendremos un largo día por delante"

La gatita salvaje de Xueba es demasiado sensualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora